El cambio en la denominación del Centro Cultural Kirchner, al que actualmente se lo designa directamente como CCK, está nuevamente en la mirada del macrismo.

Funcionarios del actual gobierno llegaron a un acuerdo con diputados y senadores del partido oficialista para crear un proyecto de ley que tendrá como iniciativa generar la competencia del Congreso para que sea el encargado de poner nombre o modificarlos a los edificios públicos o monumentos.

Por supuesto que no será tan simple. Para lograr su aprobación, deberán contar con el voto de la oposición, especialmente de cierto segmento del peronismo, algo que será difícil si se tiene en cuenta que uno de los nombres a cambiar será el del CCK, que podría ser reemplazado por "Centro Cultural Bicentenario" o "Centro Cultural de la Independencia".

En el proyecto, se destacará que el cambio del nombre puede hacerse a un edificio que haya sido bautizado así en los últimos 15 años, deberá haber pasado 20 años desde la muerte de la personalidad que le da nombre al lugar, el personaje o hecho histórico que se utilice para la designación debe tener un valor simbólico de unidad y no división y los nombres deben tener control parlamentario, entre otras cosas.

Para este último aspecto, el de la atribución constitucional al Congreso para la imposición de nombres o denominaciones, se creará una Comisión Bicameral para la Denominación de Bienes y Espacios Públicos, con integrantes de ambas cámaras, y se deberá contar con el voto de la mayoría.

Esta nueva iniciativa surge luego de las discusiones que siguieron a la aparición de los cuadernos de las coimas kirchneristas. En este contexto, el juez Claudio Bonadio procesó a la ex presidenta Cristina Kirchner, a quien considera jefa de una asociación ilícita que manejaba cifras millonarias de coimas junto a su fallecido esposo Néstor Kirchner.