Falta tiempo todavía para subirse al ring electoral, pero mientras tanto desde el oficialismo como la oposición empiezan a pensar los candidatos en el 2023. Las apariciones públicas de la vicepresidenta Cristina Kirchner de forma más constante despertaron las especulaciones de que podría tener intenciones de competir en una lista por un nuevo cargo de presidenta.

Este sábado la vicepresidenta volverá a encabezar un acto en Ensenada por el 48º aniversario de la muerte de Juan Domingo Perón. Es un acto que organizará el Frente de Todos bonaerense y estará secundado por el intendente, Mario Secco. En el escenario también la acompañarán el gobernador Axel Kicillof, y el diputado y presidente del FDT bonaerense, Máximo Kirchner.

Desde el Instituto Patria contaron a este medio que la presentación estaba prevista en principio para el viernes "pero cuando Cristina se enteró de la presencia de Alberto Fernández en la CGT a la misma hora decidió pasarlo al sábado". El Presidente participará el viernes 1 de julio a las 18 horas de un acto homenaje organizado por la central obrera en la sede de Azopardo. Parece todo un gesto de parte de la vicepresidenta para que no se superpongan los protagonismos.

Alberto Fernández no acompañará a Cristina Kirchner al acto en Ensenada

Dos actos separados

Ni Cristina ni Alberto estarán en el acto que encabece el otro. Será a casi un mes de la última vez que compartieron la presentación en Tecnópolis por los 100 años de YPF el pasado 3 de junio donde la vicepresidenta le reclamó "que use la lapicera". El último discurso también fue en territorio bonaerense, donde la presidenta del Senado se siente más cómoda. Nuevamente despertará expectativa su discurso luego de la aparición del 20 de junio en Avellaneda donde lanzó críticas al Gobierno por "el festival de las importación" y reclamó que se termine con la "tercerización de los planes sociales". Luego del acto en la CTA, el Gobierno tomó algunas medidas que había planteado Cristina respecto de ponerle un cepo a las importaciones para evitar una mayor fuga de dólares del país.

En el entorno cristinista prefieren no hacer futurismo con el destino político de la vicepresidenta.  Su protagonismo hace pensar dos cosas: que no quiere ceder terreno a la oportunidad de que la oposición gane las próximas elecciones o que busque alejarse de las decisiones que toma el presidente para no quedar pegada a la gestión. Hay un grupo fiel que plantea una candidatura presidencial. "Es en el sentido de posicionarla en la cancha, y no como candidata. Los sectores que plantean su candidatura presidencial son muy marginales", explican desde el kirchnerismo.

Al Presidente no le gustó a la vicepresidenta que se apresurara a plantear una candidatura

Las candidaturas

Alberto Fernández dejó de hablar de la reelección. Algunos en su entorno señalaron que no le gustó a la vicepresidenta que se apresurara a plantear una candidatura. En cuanto a la vicepresidenta, todas las chances están puestas en que compita como senadora por la provincia de Buenos Aires. "Sólo Dios sabe", aclaran en su entorno.

Desde el kirchnerismo plantean que "puede haber un candidato de unidad" que no sea Fernández. Se piensa en la posibilidad de un gobernador pero no Axel Kicillof que sí irá por la reelección en la provincia de Buenos Aires. Suena el chaqueño, Jorge Capitanich, que lidera la "Liga" de los gobernadores.

Alberto Fernández estuvo el fin de semana en la Cumbre del G7 en Alemania y no hizo ninguna referencia a Cristina. Tampoco se escuchó hablar de la interna en el Frente de Todos pese a la presencia del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, uno de los integrantes de la alianza.

Funcionarios que no funcionan

La piedra en el zapato para el cristinismo es la gestión económica. Ya lo dejó muy en claro la ex presidenta en cada uno de sus discursos y cartas. Dentro de los señalados como los "funcionarios que no funcionan" estaba Matías Kulfas que ya dejó el Ministerio de Desarrollo Productivo y en su lugar fue ocupado por el ex candidato presidencial, Daniel Scioli.

Otro de los apuntados es el ministro de Economía, Martín Guzmán. Desde la primera carta de Cristina "Como siempre…sinceramente" que escribió tras la derrota en las PASO, viene reclamando cambios en el gabinete, que finalmente sucedieron.

Con respecto a Guzmán aclaran que ella "nunca pidió su desplazamiento" y "menos porque lleva adelante las negociaciones con el FMI". "Por más presión política que haya no se lo puede remover", señalan en el ala cristinista. El kirchnerismo cataloga el inicio de la crisis dentro del Gobierno desde la publicación de la primera carta.

La titular del Senado planea continuar con apariciones más seguidas, cada quince días, para señalar los problemas que tiene el país y corregir los que considera errores de la gestión. Está claro que la única "jefa" en el territorio bonaerense sigue siendo Cristina.