A pesar de su interna, en el oficialismo hay una decisión unánime de ir hacia una reforma de la Corte Suprema de Justicia y los senadores del Frente de Todos dieron un nuevo paso hacia ese objetivo al recibir el apoyo de los gobernadores a la ampliación del máximo tribunal a 25 miembros en un plenario de comisiones sin presencia opositora y firmar el dictamen para tratar de aprobar el proyecto en el transcurso de julio.

La reunión de este miércoles en las comisiones de Justicia y de Asuntos Constitucionales con la presencia de siete gobernadores -la mayoría de ellos, del peronismo- coincidió con el reclamo que hizo el presidente Alberto Fernández a la Corte Suprema para que revise la situación procesal de la dirigente Milagro Sala, detenida desde 2016 en Jujuy e internada ahora por problemas de salud.

El elenco completo del Frente de Todos muestra así un alineamiento detrás del objetivo de reformar la Corte, con fuertes críticas a su desempeño. Sin embargo, y a pesar de que el Presidente, la vicepresidenta Cristina Kirchner y buena parte de los gobernadores están en la misma sintonía en este tema, todavía están lejos de asegurarse la aprobación de la ley.

Distintas fuentes parlamentarias indicaron a iProfesional que el oficialismo confía en reunir una mayoría para aprobar el proyecto en el Senado a mediados de julio. "Sería con lo justo", evalúan en la bancada del Frente de Todos al tiempo que reconocen que la iniciativa podría estancarse luego en la Cámara de Diputados.

La reforma de la Corte, uno de los temas que no profundiza la interna en el Gobierno.

Ampliación de la Corte: el rol clave de los gobernadores para el plan oficialista

El plenario de comisiones convocado por el Frente de Todos recibió a los gobernadores Axel Kicillof (Buenos Aires), Jorge Capitanich (Chaco), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gustavo Sáenz (Salta) y Raúl Jalil (Catamarca). Los senadores de Juntos por el Cambio decidieron ausentarse en muestra de rechazo a la iniciativa.

Su presencia en el Senado obedeció a la necesidad de mostrar músculo político detrás del proyecto ante la dificultad de conseguir mayoría en ambas cámaras del Congreso para avanzar hacia la sanción de la ley. Los argumentos que desplegaron durante la reunión fueron esencialmente dos: tener una Corte "más federal" con representación de las 24 jurisdicciones del país y propiciar la "paridad de género", pero sin ahorrar críticas al tribunal.

Uno de los más duros fue Capitanich, quien sostuvo que "la composición de la Corte ha sido claramente centralista, misógina y con un sesgo anti federal". El chaqueño se expresó así luego de señalar que en sus 159 años, de los "113 jueces" que integraron el tribunal "solamente 3 fueron mujeres" y que el "60% fueron graduados en la Ciudad de Buenos Aires".

Capitanich también apuntó a los distintos conflictos que la Corte debe resolver, donde consideró central el tema económico. "La propuesta de integrar una Corte de carácter federal va a permitir corregir asimetrías históricas. ¿Por qué vamos a seguir pagando precios de combustibles y energía de carácter diferencial?", remarcó.

Por su parte, Rodríguez Saá reveló que en la conversación que los gobernadores mantuvieron el mes pasado con el Presidente sobre este proyecto Fernández les dijo que si se aprueba la ley "está dispuesto a dictar un decreto auto limitándose y pidiendo a los gobernadores que envíen una cuaterna" de candidatos a jueces de la Corte para garantizar la representación de todas las provincias.

Los gobernadores del oficialismo impulsan la ampliación de la Corte Suprema.

¿Qué límites enfrenta la ampliación la Corte?

Los gobernadores que asistieron al Senado son parte del conjunto a 18 mandatarios que impulsaron el proyecto para llevar la integración de la Corte Suprema de 5 miembros a 25. Como el kirchnerismo ya había activado ese debate con otras iniciativas presentadas por distintos legisladores, finalmente los senadores decidieron ponerse al hombre esta propuesta.

Pero rápidamente aparecieron algunos límites. El rionegrino Alberto Weretilneck, aliado habitual del Frente de Todos en el recinto, ya adelantó su rechazo a este proyecto. Si bien tiene una iniciativa propia para llevar la Corte a 16 miembros, Weretilneck consideró que la del oficialismo "es inviable" porque, aún si se aprobara, para designar a cada juez hace falta una mayoría de dos tercios del Senado que nadie tiene. "No se va a lograr un acuerdo", vaticinó.

El Frente de Todos confía en sortear esa dificultad con el apoyo de la riojana Clara Vega y de la misionera Magdalena Solari Quintana, con quienes podría alcanzar la mayoría justa de 37 votos para aprobar el proyecto en la Cámara alta. No obstante, en Diputados, al oficialismo no le alcanzan sus 118 votos. y conseguir el respaldo necesario será complicado.

El rol de los gobernadores es central para esa tarea y por eso el oficialismo mostró su respaldo en el Senado. Los mandatarios provinciales son jefes políticos de muchos de los legisladores nacionales y pueden influir en las votaciones. Según supo iProfesional, en las últimas semanas algunos de ellos intentaron convencer a los radicales Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) de acompañar la iniciativa para consolidar una mayoría.

Sin embargo, esto ya parecía difícil (dado que generaría un terremoto político en Juntos por el Cambio) y ahora mucho más, debido al enojo de Morales con Alberto Fernández por su visita a Jujuy para reclamar nuevamente la liberación de Milagro Sala, enemiga política del gobernador y presidente de la UCR.

Weretilneck, un gobernador que ya manifestó su rechazo a la reforma de la Corte.

El oficialismo cierra filas: la nueva crítica de Alberto Fernández a la Corte

Luego de la visita a Milagro Sala, internada tras sufrir una trombosis venosa, Alberto Fernández dio una conferencia de prensa en la que sostuvo que la líder de la Tupac Amaru es una "perseguida política". Dardo contra Morales, a quien la dirigente kirchnerista responsabiliza por su detención.

Seguidamente, le pidió a la Justicia jujeña y también a la Corte Suprema que empiecen a "enmendar las barrabasadas que se hicieron" y revisen la situación de Sala.

"Espero que los tribunales de Jujuy tomen mis críticas del mejor modo. Por favor, los insto a revisar lo que están haciendo, no es un buen modelo para el país. Lo mismo para la Corte Suprema, que resuelven con urgencia las cosas que atañen a sus intereses, que por favor le impriman la misma urgencia al recursos de Queja presentado por Milagro Sala", disparó el Presidente.

Con esa declaración el mandatario ratificó sus críticas a la Corte en línea con los planteos sobre los que machan las huestes de Cristina Kirchner. El objetivo de reformar la Corte es una de las pocas cosas en las que ambos coinciden en medio de la feroz interna que vive el Frente de Todos.

La Corte Suprema, blanco de fuertes cuestionamientos desde el oficialismo.

¿Qué dice el proyecto de los gobernadores?

El proyecto que impulsado por los gobernadores con apoyo de Alberto Fernández y Cristina Kirchner tiene solo cuatro artículos, en los que establece que la Corte Suprema "estará compuesta por 25 jueces y juezas" y que "una ley especial determinará el modo de organización y funcionamiento" del tribunal con su nueva integración.

A pesar de las críticas del kirchnerismo a los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, en su tercer artículo la iniciativa establece que todos ellos "conservarán sus cargos" y que la cobertura de vacantes "tendrá en consideración la actual composición", mientras que el resto de los nombramientos se irán produciendo "conforme sean designados".

En los fundamentos del proyecto, el oficialismo evitó los cuestionamientos políticos a los miembros del máximo tribunal que suelen repetir en debates y entrevistas, y señaló que la ampliación tiene como objetivo evitar los "altísimos niveles de delegación de trabajo jurisdisccional en personas que no son sus jueces" y "favorecer la inmediatez" en la resolución de expedientes.

En base a los propios datos de la Corte sobre la cantidad de causas en trámite, el proyecto señala que "resulta materialmente imposible para un magistrado siquiera leer 21 mil expedientes durante un año, y menos aún fallarlos", porque "se deben dictar cerca de dos mil sentencias por mes".