Elecciones: ¿qué necesita Milei para recuperar el control del Congreso y avanzar con sus reformas de alto impacto?

Las complicaciones que encontró el gobierno de Javier Milei rumbo a las elecciones legislativas nacionales del domingo lo obligaron a fijar como meta ya no un triunfo en votos sino en bancas del Congreso, donde el oficialismo proyecta que su éxito o fracaso dependerá de llegar al tercio, algo que podría lograr pero no por sí mismo, en ningún escenario.

En una reciente entrevista a Milei, le preguntaron cuál sería un buen resultado el próximo domingo, cuando los argentinos elegirán diputados nacionales en todo el país y senadores en ocho provincias. "Uno que me asegure un tercio en la cámara, que es una pared de defensa", sentenció sin dudarlo.

De esta forma, el Presidente se refirió a la cantidad mínima cantidad de legisladores que se necesita en cualquiera de las dos Cámaras para defender decretos, vetos a leyes o impedir otros embates de la oposición, como podría ser un planteo de juicio político. En Diputados, ese "número mágico" es 86, mientras que en el Senado 24.

Sin embargo, incluso en el mejor escenario posible para La Libertad Avanza (LLA) -el de un triunfo- el bloque de diputados que lidera Gabriel Bornoroni quedaría con alrededor de 70 escaños y el de senadores que encabeza Ezequiel Atauche con poco menos de 20. La llave para alcanzar el estratégico tercio en ambos casos la tendrá el PRO, razón por la cual el Gobierno dependerá más de cuidar esa alianza que del resultado del domingo.

El mejor escenario para Javier Milei en las elecciones: ¿cómo puede llegar al tercio?

El oficialismo cuenta con la ventaja de ser el espacio que arriesga la menor proporción de bancas en esta elección, en comparación con el peronista Unión por la Patria (o Fuerza Patria, como se presenta). En la Cámara de Diputados, se juega apenas 8 de los 37 lugares que tiene hoy LLA.

El escenario más favorable para Milei lógicamente es el de un triunfo, algo para lo cual se estima que necesitaría lograr entre el 35% y el 40% de los votos e imponerse en distritos grandes como la Ciudad de Buenos Aires (CABA), Córobda y Mendoza. En este caso, su bloque de diputados pasaría de 37 a entre 70 y 77 bancas.

Para llegar al tercio necesitará sí o sí del PRO, que en este escenario se quedaría con un bloque que rondaría los 24 diputados. La alianza con el partido amarillo de Mauricio Macri le permitiría al Gobierno contar con poco más de 100 votos, lejos del quórum (129) pero bastante por arriba de los 86 que le darían a Milei la "pared de defensa" que busca.

En este cálculo (que incluso fue mencionado por el Presidente en la entrevista) se esconde la razón profunda del nuevo acercamiento a Macri y, sobre todo, las versiones sobre la llegada de dirigentes del PRO al Gabinete, donde Milei ya confirmó que hará cambios después de las elecciones.

Mientras tanto, Unión por la Patria es el espacio que más bancas arriesga. En Diputados, de las 98 que tiene se vencen, 46 vencen este año. Si LLA se impusiera en las elecciones sobre Fuerza Patria, el peronismo retrocedería pero no demasiado ya que se quedaría con un bloque de 86 diputados como mínimo. Podrían estirarse a 89 y superar los 90 con la ayuda del Frente de Izquierda.

Qué pasaría con el Senado en el escenario más favorable al Gobierno

La situación es similar en el Senado, donde LLA no arriesga ninguna de sus siete bancas y, en caso de alzarse con un triunfo, crecerían a 17 o 18. Seguiría lejos de las 24 que marcan el tercio de la Cámara alta y para llegar dependería otra vez del PRO y de los acuerdos que logre construir con gobernadores dialoguistas.

No obstante, el número será mucho más ajustado que en el caso de Diputados, debido a que el PRO perderá lugares inevitablemente por el tipo de acuerdos que hizo con LLA para esta elección (en CABA y Entre Ríos, por ejemplo, le cedieron toda la lista de senadores a los libertarios).

En ese marco, los amarillos podrían contar con un bloque de unos 5 senadores que ayudarían al oficialismo a llegar a 22 o 23 votos y lo que le falte para alcanzar el tercio deberá buscarlo en las bancadas provinciales independientes, posiblemente la que conquiste el frente Provincias Unidas.

Mientras tanto, el bloque de Unión por la Patria que conducen José Mayans, Anabel Fernández Sagasti y Juliana di Tullio es el que más arriesga en este turno electoral, con 15 de sus 34 bancas a renovar, y en caso de un triunfo libertario podría caer a 28 o menos. Tendría así el tercio, pero no le serviría de mucho ante un oficialismo fortalecido con aliados y, además, quedaría mucho más lejos que hoy del quórum, que aquí se logra con 37 senadores.

¿Podrá conquistar el tercio si no consigue un triunfo en las elecciones del domingo? 

En el extremo opuesto de los cálculos electorales aparece una eventual derrota de La Libertad Avanza, que podría concretarse si queda abajo del 35% a nivel nacional. Lógicamente, en este caso vería frustrado el objetivo de llegar al tercio en Diputados incluso con el PRO, aunque no sería imposible si consigue acuerdos con gobernadores.

De darse esa situacón, LLA se quedaría con un bloque de 60 diputados aproximadamente y el PRO con una veintena de bancas, pero no llegaría a las 26. Para alcanzar el tercio de 86 votos el oficialismo necesitaría negociar con otros actores de la Cámara baja, como podría ser Provincias Unidas o la UCR, pero sin garantías de alcanzar el número deseado.

Esta dificultad radica en dos elementos: por un lado, será más difícil para Milei cerrar acuerdos desde la derrota, sobre todo si hay provincias donde pierde con esos gobernadores a los que luego tendrá que ir a buscar; por el otro, espacios como la UCR se verían muy reducidos tras esta elección.

Además, el conglomerado peronista de Fuerza Patria podría llegar en caso de un triunfo frente a Milei a tener 100 bancas propias, un crecimiento muy modesto pero suficiente como para complicar al oficialismo.

Este escenario negativo también dejaría al Gobierno lejos del tercio en el Senado, donde LLA podría quedarse con un bloque de unos 13 senadores y estirarse a 20 con ayuda del PRO y otros aliados eventuales. Fuerza Patria podría consolidar 30 votos, mientras que Provincias Unidas contaría con alrededor de 6 senadores, que se volvería muy codiciados por ambos polos.

Suben las acciones del PRO: Milei necesitará más que nunca el apoyo de Macri

La Casa Rosada maneja ambos escenarios y por ello Milei acabó por reconocer que una buena elección para el oficialismo será, más allá del número, la posibilidad de alcanzar el tercio aunque sea con ayuda del PRO y otros sectores.

"Con nuestros aliados podemos llegar a 100 votos en la Cámara baja y es posible conseguir quórum también, entonces vamos a empezar con una dinámica parlamentaria que nos va a permitir viabilizar reformas", afirmó el Presidente.

Esa declaración no solo confirmó los cálculos que se hacen por estos días en LLA sino también la importancia central que tiene hoy para el Gobierno la relación con el PRO. El partido de Macri ve subir sus acciones porque sus votos en el Congreso serán necesarios como el agua para Milei.

La nueva relación que intenta mantener Milei con Macri, así como las versiones que apuntan al posible ingreso de figuras como Diego Santilli, Guillermo Montenegro o Guillermo Dietrich al Gabinete, están cifradas en esta matemática parlamentaria.

Ocurre que La Libertad Avanza necesitará construir un arco oficialista, más que una alianza que bien podría romperse en cualquier momento, y el mejor camino para ello sería busccar una integración de ambas fuerzas y no solo acuerdos legislativos. De hecho, por el momento Macri se resiste a que el PRO y LLA armen un interbloque, según supo iProfesional.

El líder del PRO y los legisladores que mantuvieron sus reservas durante este año a la alianza con los libertarios saben que tras las elecciones del domingo serán más necesarios que nunca para el gobierno de Javier Milei, enfocado en que el resultado que arrojen las urnas lo ayuden a llegar por lo menos el tercio en el Congreso, tanto para resistir como para tener una base más firme desde la cual buscar acuerdos. Esto último, se volverá una obligación.