Una figura evangélica desembarca en el Gobierno de Milei con un rol clave

"Representamos el costado conservador del libertarianismo de Milei", afirma el pastor Gabriel Ballerini, reconocido referente de los pañuelos azules que se opusieron a la legalización del aborto y que trabaja junto al ideólogo principal de La Libertad Avanza, el filósofo Agustín Laje, en la institución educativa en línea tecnopolitea.com.

El costado conservador de un libertario debe ser una de las categorías más difíciles de comprender dentro de las ciencias políticas. Parece sonar como un oxímoron, una contradicción entre los términos que lo definen, porque hay que anotar que la historia del liberalismo mundial enseña que sus líderes promueven la libertad individual de culto pero, también, y no es un detalle menor, la completa separación entre la Iglesia y el Estado.

Esta última premisa no parece estar cumpliéndose en la administración liberal de Javier Milei.

Porque comenzó la lucha por la sucesión o preservación del disputado tercer lugar en la sucesión presidencial: la presidencia provisional del Senado, que hoy detenta el legislador de la provincia de San Luis, Bartolomé Abadala, que en vez de ser sostenido en el cargo tras sortear con mucha muñeca política los primeros dos duros años de la gestión Milei, en los cuales recrudeció el enfrentamiento del presidente con su vice, Victoria Villarruel, podría ser reemplazado en breve por el poder evangélico que tiene un ingreso como no lo tuvo nunca en la Casa Rosada.

Política, relaciones, dinero y poder

Cerca de la poderosa secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, explicaron descarnadamente la cuestión. "Para nosotros es más importante una reunión con ACIERA que con la UIA. Al presidente Javier Milei le sirve más recibir al pastor de Donald Trump, Franklin Graham, que a Martín Rappalini", titular de la organización industrial.

Con esta frase que pone de manifiesto el poder real que se va conformando tras las figuras de Javier y Karina Milei, el funcionario consultado, se refería a la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera), principal institución evangélica de la Argentina, donde se congregan mayormente corrientes teológicas pentecostales y bautistas.

Una organización que no distingue en su accionar predicador de sutilezas de la política nacional. Representan a más de 15.000 congregaciones y tiene buena llegada en el peronismo más conservador y del otro. Incluso tiene peso en las secretarías de Culto de municipios como el de La Matanza, del polémico Fernando Espinoza.

Sea como fuere, su poder de lobby avanza tanto como lo hizo el partido político dirigido por Karina Milei, que en Neuquén produjo una sorpresa electoral con la excelente elección que realizó la pastora y diputada nacional, Nadia Márquez, hija del vicepresidente de Aciera.

Márquez fue electa senadora nacional por su provincia y "necesita un lugar de proyección para su intento de acceder a la gobernación neuquina en el 2027. Ese lugar es la presidencia provisional del Senado cuyo titular suele dirigir los debates en el recinto de la Cámara Alta, cuando no los preside Victoria Villarruel y tiene un rol político, de diálogo y de negociación fundamentales para los intereses del gobierno", explicaron asesores de Martín Menem, titular de la Cámara de Diputados.

Sin embargo, existen algunos problemas para los planes de la familia Márquez.

Nadia fue investigada por la Justicia penal en el pasado. Una mancha negra, de esas que en un momento de éxito electoral no preocupan, pero que suele extenderse cuando los vientos de la voluntad popular soplan en contrario.

La senadora electa neuquina afrontó una causa penal donde se la acusó de haber emitido títulos falsos en dos institutos terciarios de Neuquén entre 1999 y 2004. Aunque accedió al beneficio de la suspensión del juicio a prueba, que le permitió evitar un juicio oral y público. Tras cumplir la "probation", fue sobreseída en 2016.

Por estos problemas, hay juristas que sostienen que el plan de Márquez de ir por la gobernación podría naufragar, porque a nivel provincial rige la Ley de Ficha Limpia, que invalidaría una posible presentación en un cargo provincial. En diálogo con Perfil, Márquez desestimó esas interpretaciones y reafirmó haber sido sobreseída en dos instancias judiciales aunque reconoció haber tenido una "probation" por una causa que se cerró en el año 2016 y que hoy no tiene ninguna cuenta pendiente ante la justicia.

Sea como fuere, Márquez es parte de una avanzada evangélica por el poder en la Argentina. En la Cámara de Diputados ya están los dipu-evangélicos, Gastón Riesco y Soledad Mondaca por Neuquén, María Frías por Chubut, Mónica Becerra por San Luis y Miguel Rodríguez por Tierra del Fuego.

Pero ninguno parece ser tan "fiel" a los dictados del "León" y de Karina Milei como Nadia Márquez. Al menos por ahora.

"A diferencia de Villarruel, quien sigue peleada con Javier Milei y absolutamente marginada de la gestión, Márquez cumple con la condición más importante para el Gobierno: es 100% fiel a los hermanos", sostuvo una fuente parlamentaria. "Es absolutamente leal, muy trabajadora, empatiza mucho, arma equipo y se adelanta a los problemas", dice Gabriel Bornoroni, titular del bloque de diputados de La Libertad Avanza.

Los vínculos con el Estado provincial

Uno de los pilares del liberalismo es completamente avasallado por los dirigentes de la derecha conservadora que integran La Libertad Avanza. Y, no hay planes de que eso cambie. Si Nadia Márquez accede a un lugar preponderante en la línea de sucesión presidencial, esos lazos serán fortalecidos.

Además, basta observar como se movieron los Márquez en su provincia, Neuquén, con las autoridades estatales.

Según investigaciones periodísticas, desde el año 1989 la mutual A.M.E.N. (Asociación Mutualista Evangélica Neuquina) y el colegio Bautista dependiente de la mutual, reciben fondos bajo la forma de subsidio para hacer frente al personal docente. El monto del subsidio que otorga el gobierno de Figueroa, no está claro.

De la Asociación Mutual también depende la Iglesia Jesús Rey, de la que los padres de la senadora electa son pastores. También lo es la pareja de Nadia Márquez, Matías Riffo. La Directora General de los tres niveles es Silvia Stekar, la madre de la legisladora. A su vez, Riffo es profesor de educación física en la misma institución.

Una pyme familiar que crece al calor de la prédica pastoral y a la sombra del poder de turno.