El Gobierno oficializó la candidatura de Rafael Grossi para ser secretario general de Naciones Unidas

En medio del inicio formal de la carrera para suceder a António Guterres al frente de Naciones Unidas, el Gobierno argentino confirmó este miércoles su apoyo oficial a la postulación de Rafael Grossi para conducir la Secretaría General del organismo a partir de 2027.

El respaldo fue comunicado por el canciller Pablo Quirno a través de un mensaje publicado en la cuenta del Ministerio de Relaciones Exteriores. Allí afirmó: "Es un honor y un privilegio presentar hoy la candidatura de Rafael Grossi (@rafaelmgrossi) al cargo de Secretario General de las Naciones Unidas", destacando su trayectoria al frente del OIEA.

El Gobierno postuló a Rafael Grossi como candidato a conducir la ONU

El mensaje del canciller Pablo Quirno

Quirno subrayó que el diplomático argentino "es reconocido internacionalmente por la extraordinaria tarea que viene desempeñando como Director General del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) desde hace ya seis años", una función que -según remarcó- puso a prueba su liderazgo frente a "graves situaciones que afectan la paz y la seguridad internacional".

El mensaje oficial también sostuvo que esas capacidades "son esenciales para ejercer el cargo de Secretario General en el actual escenario internacional", especialmente en un momento en el que, a 80 años de la creación de la ONU, se considera necesario avanzar en reformas que mejoren su efectividad y restauren su prestigio global.

Grossi llegó a ocupar un rol de enorme visibilidad durante su gestión en el OIEA, al enfrentarse a asuntos de alto voltaje geopolítico, como el riesgo que representan las centrales nucleares en Ucrania en plena guerra, las negociaciones sobre el programa atómico iraní y el monitoreo de las pruebas de Corea del Norte.

Aunque no existe un reglamento formal, una tradición no escrita indica que esta ronda le correspondería a América Latina, lo que en principio favorece al argentino. Sin embargo, deberá competir con figuras de peso en la región: la expresidenta chilena Michelle Bachelet y la costarricense Rebeca Grynspan, exvicepresidenta y actual funcionaria internacional. Ambas cuentan con respaldo en sectores que impulsan que la próxima conducción de la ONU sea ejercida por una mujer.

El proceso de selección comenzó oficialmente el martes, cuando los 15 miembros del Consejo de Seguridad y la presidencia de la Asamblea General —que reúne a 193 Estados— enviaron una carta para invitar a los países a presentar candidatos. Desde ahora se abre un año de negociaciones, ya que el nombramiento del próximo secretario general está previsto para 2026, con inicio de mandato el 1 de enero de 2027.

El mensaje de Cancillería sobre la postulación de Grossi

"La República Argentina tiene el honor de presentar la candidatura del Embajador Rafael M. Grossi, actual Director General del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), al cargo de Secretario General de las Naciones Unidas para el período 2027–2031", dice el comunicado de Cancillería al oficializar la postulación de Grossi.

"La Argentina, miembro fundador de las Naciones Unidas, cuenta con una trayectoria extensa y reconocida en el ámbito multilateral y mantiene un firme compromiso con los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, en particular con la preservación de la paz y la seguridad internacionales y la promoción de la cooperación entre los Estados", agrega.

Y señala que "el Embajador Grossi cuenta con una destacada trayectoria de más de cuatro décadas como funcionario del cuerpo diplomático argentino y, más recientemente, al frente de la conducción del OIEA, cuyo liderazgo fue reconocido al ser electo para un segundo mandato en 2023. Sus principales logros estuvieron orientados a contribuir a la paz y seguridad internacionales mediante una gestión abierta, eficiente, presente y de resultados evidentes".

Su profundo conocimiento del sistema multilateral, su capacidad para promover el diálogo diplomático, su desempeño probado en situaciones de conflicto y graves crisis internacionales como interlocutor imparcial y eficaz, su solvencia técnica y lingüística y su compromiso con la Carta de las Naciones Unidas, lo convierten en un candidato de excelencia para desempeñar las responsabilidades del cargo de Secretario General que el mundo hoy demanda.