A través de un test psicológico, se puede relucir el significado de tu personalidad. Hay un manual simple que muestra paso a paso de algunas reglas básicas de grafología para ayudar a comprender quién es cada uno.

La interpretación de la propia escritura y la de los demás es importante para conocer los rasgos ocultos de nuestro carácter y de quienes nos rodean.

Para evaluar la personalidad a través de la escritura, se deben tener en cuenta algunos criterios: 

1- Presión y ritmo

El primer criterio a evaluar es la presión que se ejerce sobre el papel: quien presiona mientras escribe es una persona segura y enérgica que no teme imponerse a los demás. Aquellos que escriben de forma "ligera" suelen ser personas inseguras que temen cometer errores.

Por otro lado, en lo que respecta a la marcha: una escritura tranquila denota paciencia, calma. La escritura rápida, por otro lado, indica nerviosismo y un carácter indisciplinado o vivaz.

2- Dimensión

La forma y el tamaño de las letras también son elementos importantes para la prueba psicológica de la escritura: las letras redondas distinguen los rasgos de una persona leal y buena.

Quienes tienen una gran escritura tienden a sobreestimarse a sí mismos, son personas astutas que se tienen en alta estima a sí mismas y tienden a imponerse a los demás.

Los de escritura pequeña tienen problemas de autoestima, son personas introvertidas que tienden a devaluarse, mostrándose inferiores.

 

3- Dirección de escritura

La posición del personal, respecto a la hoja, puede tener un ritmo ascendente, descendente, horizontal, esto revela la forma de situarse respecto a los demás. Según consigna Radio Mitre, la dirección de la escritura puede indicar positividad si mira hacia arriba o negatividad si mira hacia abajo.

Escritura ascendente (hacia arriba): indica un personaje positivo, optimista y creativo que ama la novedad. Una persona emprendedora e inclinada al liderazgo: si la tendencia está marcada nos encontramos ante un individuo que tiende a dominar a los demás.

Escritura descendente (hacia abajo): es una persona que tiende a disminuir y cerrarse haciendo prevalecer las ideas ajenas más que las propias. También puede indicar una endencia a mentir y depresión.

4- Respeto por los márgenes

Incluso el respeto o no de los márgenes puede decirnos algo sobre el carácter de las personas.

Respeta los márgenes: estamos hablando de personas metódicas y ordenadas que tienen los pies bien plantados en el suelo.

Dejar el margen a la derecha: es sinónimo de apertura, indica que a la persona le encanta tener nuevas experiencias y no le teme a las cosas nuevas.

No deja margen a la izquierda: personaje introvertido, muy atado al pasado y poco inclinado a la novedad y los cambios.

5- Espacios entre palabras

Dejar grandes espacios entre palabras: es signo de una mente abierta propensa a la crítica, a la racionalidad, a una persona seria, que persigue metas y más apta para la actividad científica o intelectual.

Dejar estrechos espacios entre palabras: indica superficialidad, impulsividad e imprudencia. Esta es una persona de mal humor que difícilmente puede evaluar las consecuencias de sus acciones.

6- Claridad de escritura

La claridad de la escritura refleja la claridad del escenario y la acción, saber lo que quiere y ser consciente o no de lo que está haciendo.

Escribe con claridad: típico de alguien que actúa con claridad y justicia hacia los demás, una persona que también aprende con facilidad nuevas nociones, según consigna Radio Mitre.

Escribir de forma oscura: es una forma de escribir sobre una persona que no tiene pensamientos y acciones claros, que hace razonamientos esquivos. La forma de escribir también es típica de quienes se conforman con poco y actúan de forma poco concienzuda.