En las parejas, la idea del amor no siempre es exactamente la misma por la simple razón de que ninguno siente igual. El amor tiene tantos significados como personas en el mundo. Lo que para una persona puede ser el acto más amoroso del mundo, para otra puede ser algo que la desenamore completamente.

Sea como sea, lo interesante es que esa diversidad nos permite siempre encontrar algo nuevo. Lo importante no es ser un alma gemela, como se nos enseñó de chicos, sino aprender a complementarse, a funcionar a la par como un equipo. Por eso ser diferentes es clave: cada uno aporta su mejor virtud en el amor para hacer que las cosas funcionen.

¿Cuál es tu mayor virtud en el amor?

Mirá la imagen a continuación y, sin pensar, pensá qué es lo primero que te llamó la atención. Luego buscá la respuesta.

 

Manos en forma de corazón

Si lo primero que te llamó la atención de la imagen fueron las manos en forma de corazón, tu mayor virtud en el amor es ser compañero. Te sale naturalmente estar ahí para tu pareja, acompañarla, contenerla, ser su sostén. La persona que esté con vos siempre sabrá que puede sentirse segura, dado que le darás confianza y funcionarás como su oasis en medio de cualquier tormenta. Con vos podrá sentirse cómoda y plena.

Ojo con lágrimas

Si elegiste el ojo con las lágrimas, tu mayor virtud en el amor es tu capacidad de empatía. Podés ponerte en el lugar de tu pareja, aunque no pienses igual que ella. Sos sensible y podés escuchar con el corazón. Son sabias y cálidas tus palabras, por eso despertás confianza y ternura. Aunque a veces podés llegar a pensar que esa sensibilidad es una debilidad, debés aprender a verla como la virtud de ser genuino de corazón.

Rayos que se irradian del ojo

Si lo que te llamó más la atención fueron los rayos que el ojo irradia a su alrededor, tu mayor virtud en el amor es tu energía. Tenés iniciativa, la rutina no es un problema para vos y siempre tenés ese empuje que algunas personas necesitan para sentirse mejor. Enamorás por tu buen humor y por tu alegría, capaz de transformar los problemas que surgen en algo mucho más llevadero.