El increíble pasado de Buenos Aires: un libro descifra su arquitectura, mitos y leyendas
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A pocos días de la presentación de su quinto libro, Tan Buenos Aires (Editorial Dunken), la periodista y especialista en patrimonio urbano Mariela Blanco vuelve a poner la lupa sobre la ciudad que mejor conoce y más ama. Con una mirada curiosa, una prosa cercana y una investigación minuciosa, la autora reúne historias, hallazgos y curiosidades de Buenos Aires y su conurbano bonaerense, en un retrato tan emocional como documental de los rincones que definen la identidad porteña.
La presentación será el viernes 14 de noviembre a las 20 - con reserva previa por WhatsApp al 11 2 496-8771- en el mítico Claridge Hotel (Tucumán 535), declarado "Testimonio vivo de la memoria ciudadana" por el arquitecto José María Peña en 1992. El escenario no podría ser más simbólico: un edificio clásico de la arquitectura porteña, inaugurado en 1946, con vestíbulos revestidos en mármol italiano y capiteles jónicos que condensan el espíritu refinado de una ciudad que aún busca reconocerse en su pasado.
"La idea de Tan Buenos Aires nació porque me habían quedado muchos temas afuera del libro anterior. Después de tantos años recorriendo la ciudad, sentí que todavía tenía mucho por contar, como la verdadera historia detrás de la Casa Mínima o del Palacio Lezama, pero también de algunas costumbres que nos siguen definiendo", explica Blanco. "Quería mostrar que Buenos Aires no termina en la avenida General Paz y resaltar que el conurbano guarda un patrimonio arquitectónico y emocional enorme, con castillos, historias y personajes que también forman parte de esta identidad", agrega.
En los capítulos desfilan lugares icónicos —el Palacio de los Patos, la Casa Mínima, la Residencia Maguire, la Casa de los Pavos Reales, el Palacio Lezama, el Hotel Plaza, el Claridge, el Kavanagh— junto a joyas poco conocidas del Gran Buenos Aires, como el Palacio Sans Souci, Villa Ocampo, la Casa Minka, el Club Canottieri Italiani o el Castillo Guerrero.
Cada historia está respaldada por documentos originales —como planos firmados por Corina Kavanagh o Rosa T. de Torquinst— y por testimonios de descendientes de las familias que habitaron esas residencias históricas
Fiel a su estilo, Blanco introduce humor, ironía y pequeñas irreverencias narrativas que le dan frescura a su trabajo. "No me ciño a los estilos narrativos tradicionales. Me dejo llevar y me doy la libertad de standupear un poco, de sumar humor, ironía, guiños. Me permito escribir como si conversara con mi lector, aunque la Real Academia levante una ceja", confiesa con una sonrisa. "A veces, una licencia poética logra crear complicidad, y eso es lo que busco. Es como si la historia quedara entre nosotros, dos buenos amigos. Y bueno… que Cervantes me disculpe".
Una mirada afectuosa sobre el patrimonio y la identidad porteña
Además de un recorrido por edificios emblemáticos, Tan Buenos Aires propone una reflexión sobre la relación entre los habitantes y su entorno urbano. Blanco sostiene que preservar el patrimonio no solo implica conservar estructuras, sino también mantener viva la emoción que despiertan.
"Creo que hoy hay más conciencia sobre la importancia de preservar el patrimonio, pero todavía queda mucho por hacer. Con mis libros intento despertar curiosidad y afecto por Buenos Aires, porque sólo se protege lo que emociona. Cuando uno descubre la historia detrás de una fachada, seguro ya empieza a querer cuidarla", reflexiona.
Esa mirada sensible atraviesa todo el libro, donde los edificios se transforman en testigos silenciosos de una época. Para la autora, la arquitectura de Buenos Aires funciona como un espejo colectivo.
"Creo que la arquitectura de Buenos Aires es un espejo de lo que fuimos. En los ladrillos, en las aberturas y en los detalles del mobiliario se refleja esa Argentina que aspiró a ser parte del primer mundo. De hecho, llegamos a ser la octava economía global. Pero lo más curioso es que esa vocación de grandeza se mantuvo incluso en tiempos de crisis. La construcción de grandes edificios públicos y privados buscaba sostener, al menos visualmente, esa ilusión de prosperidad", explica.
Uno de los capítulos más llamativos está dedicado al Club Canottieri Italiani, una joya arquitectónica de Tigre, al norte del conurbano bonaerense que conserva intacta su fisonomía original de comienzos del siglo XX. "Ese lugar me sorprendió porque forma parte de un patrimonio poco conocido vinculado al deporte, la inmigración y la vida social. Pero además me sorprendió cómo a las leyendas urbanas se les va agregando ‘IVA’. Encontré nuevas versiones alrededor del Kavanagh, del Hotel Plaza, de la Casa Mínima… Eso me obligó a investigar más y a no repetir historias conocidas y, probablemente, incorrectas. En este libro van a encontrar varios de esos mitos revisados, y algunos, directamente, derribados", adelanta.
El prólogo, a cargo del periodista Sergio Elguezábal, complementa la propuesta desde la misma sensibilidad: la búsqueda de belleza en los detalles cotidianos. Y hasta la tapa del libro responde a esa estética cuidada y desafiante: fondo negro, letras blancas y un fileteado porteño como único guiño visual. En tiempos de inmediatez, Blanco apuesta por la sutileza.
Licenciada en Periodismo (UNLZ) y autora de títulos como La Conexión Aparente, Las mejores entrevistas de Radio y Televisión, La Historia es Noticia y Leyendas de ladrillos y adoquines —libro declarado de Interés Cultural por la Legislatura porteña y la Cámara de Diputados—,Blanco es una divulgadora incansable del patrimonio. En 2023 recibió el Premio de Oro a la Difusión del Patrimonio, Arte y Turismo Cultural, otorgado por la Asociación Art Nouveau Buenos Aires.
"Tan Buenos Aires no es sólo un libro de historia —dice Mariela Blanco—, es una carta de amor a la ciudad. Y como toda carta de amor, tiene sus nostalgias, sus ironías y sus pequeñas verdades. Pero sobre todo, tiene emoción."