Comienza este jueves la última semana para que los celulares prepagos que no hayan sido registrados con su dueño y su DNI quedarán inactivos. Se trata de una nueva medida del Gobierno que apunta a desincentivar el robo de celulares delito que, en el caso de la ciudad de Buenos Aires, es muchas veces protagonizado por motochorros. Se trata de unos 8,5 millones de líneas móviles prepagas distribuidas en todo el país.

La medida alcanza a los usuarios de este tipo de líneas que todavía no hayan realizado el llamado proceso de nominativización, es decir, darle a cada teléfono su nombre y su DNI. Para ello, sólo deben llamar al *234# para concretar este proceso.

Este Registro de Celulares, que emula al Registro Nacional de las Personas, se puso en marcha hace dos años, plazo en el que se fueron tomando varias medidas, en conjunto con las operadoras de telefonía móvil y también a partir de la concientización de los usuarios a denunciar cuando eran víctimas de un robo de estos aparatos.

Este jueves se iniciará la tercera fase de esta iniciativa que apunta a que el 35% de los usuarios de telefonía paga que aún no han anotado su teléfono con su nombre y su DNI lo haga. Quienes no realicen este “trámite” en esta semana correrán el riesgo de que su línea y su teléfono queden inmediatamente desactivados.

La medida fue anunciada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y la presidente del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), Silvana Giudici, quienes explicaron sus alcances junto al vicejefe de Gobierno porteño, Felipe de Miguel, y el ministro de seguridad de la Ciudad, Martín Ocampo.

“La seguridad es nuestra prioridad y esto apunta a prevenir el delito de robo de celulares que es uno de los principales en la Ciudad y en el país, y que cometen los motochorros”, explicó Bullrich.

Coincidieron, junto con Giudici, en que estas medidas desincentivan el robo de teléfonos móviles porque, al estar registrados con nombre y DNI, dejan de tener un valor para ser utilizados con otra línea, pues no funcionarán. Esta base de datos de celulares está cruzado con los datos del Registro Nacional de las Personas (ReNaPer) como medida para prevenir que sean anotados con datos falsos.

La medida alcanza, en esta oportunidad, a los celulares que todavía no han sido anotados en esa Registro, calculadas en unos 8,5 millones de líneas prepagas que realizan cargas de crédito de manera regular y que forman parte de los 60 millones de líneas activas que existen en el país, según los datos del Enacom.

Este paso no tienen que darlo ni los dueños de celulares con abono ni aquellos que compraron un teléfono, con cualquier sistema de pago, desde septiembre de 2017. Todos esos equipos están nominativizados.

De modo que, en caso de que algún dispositivo de estos sea robado, el pedido de las autoridades es que se efectúe la denuncia de manera inmediata para poder darlo de baja y, así, evitar que ingrese en el mercado ilegal. Esa denuncia se realiza en el *910.

Los teléfonos nominativizados que hayan sido robados y sobre los cuales se hizo la denuncia dejan de ser útiles para los delincuentes. De ahí la insistencia en esta medida, orientada a generar conciencia entre los usuarios y colaborar en el desincentivo de este tipo de robos.

Dos años de trabajo

El proceso de nominativización de los teléfonos celulares comenzó hace dos años y el próximo 18 de octubre vence el plazo para finalizar esta tarea. Desde entonces, y gracias a las denuncias realizadas cuando los móviles fueron robados “se bloquearon más de 4,2 millones de dispositivos”, confirmó Giudici.

La que arranca hoy es, en definitiva, la última semana para incentivar a esos 8,5 millones de usuarios –que las operadoras móviles estiman en varios millones más- a que nominativicen su teléfono.

En agosto pasado se ingresó en la etapa final de este proceso, cuando se volvió a recordar la necesidad de avanzar con este registro. Desde entonces, quedaron bloqueados entre 1.500 y 2.000 celulares por día, describió la presidente del Enacom.

“Con esta tercera etapa se finaliza el proceso de nominatividad. Aquel que tenga un chip prepago debe nominarlo en el *234# con su nombre y su DNI. Así, se asegura también el crédito que tiene cargado, como también la portabilidad numérica, es decir, su número de línea”, agregó la funcionaria.

Insistió, en este sentido, que se pide a los ciudadanos que, cuando compren un celular, exijan la factura y el número de IMEI, que es propiedad del usuario, no del operador de telefonía móvil. Ese registro de IMEI es llevado a nivel mundial por la GSMA, la asociación que nuclea a las principales operadoras de telecomunicaciones del mundo y que impulsa diversas medidas, entre ellas la prevención del robo de móviles, a través de la campaña Nos importa.

En una conferencia de prensa que se realizó en el Enacom, la ministra Bullrich expresó que Argentina “es el primer país de América latina es tener este registro único de nominatividad de teléfonos celulares”.

“Hoy el celular es el efectivo que la gente lleva en la mano. Hoy un móvil cuenta entre $5000 y $30000, es decir, es efectivo. Deja de serlo cuando la gente lo nominativiza y si alguien se lo roba marca * 910 y ese teléfono se convierte en un hardware sin posibilidad de uso”, agregó la ministra de Seguridad.

A través de estas medidas, el robo de celulares bajó un 20%, aseveró la ministra. Pero estimó que esa cifra podría ser más alta una vez que el total de los usuarios de teléfonos móviles prepagos los registren mediante el *234#.

Bullrich subrayó que en cada lugar en que hubo un operativo donde actuaba una banda de narcotraficantes se encuentran entre 20 y 30 celulares. “Esto ayuda a prevenir el robo del objeto más buscado en la Argentina”, sentenció. 

Los motochorros suelen tener en los celulares su principal objetivo de robo. Otros espacios en donde este delito es muy alto es en los recitales, en el subte y en la calle, mediante arrebatos.

Por su parte, Martín Ocampo, ministro de seguridad porteño, indicó que los controles de venta de celulares arrojaron más detenidos que los que se realizan a motociclistas. Sobre 220 controles en puntos de venta de móviles se detuvo a 140 personas y se secuestraron más de 2.500 aparatos, aseveró el funcionario.

Comienza la última semana para nominativizar el celular prepago. Aquellos que no lo realicen, corren el riesgo de que no puedan usar más ese móvil. Las operadoras acompañan la medida impulsada por el Enacom y el ministerio de Seguridad no sin cierta resistencia: saben que serán ellas las que recibirán las quejas inmediatas de aquellos usuarios que no realicen el trámite porque no se enteraron o porque no le dieron importancia.