Zoom, una de las aplicaciones de videoconferencias más utilizadas, sufrió la filtración y venta de las contraseñas de más de medio millón de sus usuarios.

Según la firma de ciberinteligencia Cyble, un grupo de "hackers" de la web oscura empezó a recopilar contraseñas de usuarios de Zoom a principios de abril. Esto ha terminado con la puesta a la venta de credenciales de un gran número de usuarios, tanto gratuitos como pagos, de Zoom. El precio de esta información es muy asequible: menos de un centavo por cuenta.

Según la información a la que han accedido en BleepingComputer, muchas de las cuentas se corresponden con perfiles de universidades de EEUU, las cuales han usado Zoom para impartir clases a distancia.

Dado que Zoom ha sido utilizado por grandes empresas como Google y por gobiernos, como el de Reino Unido, esta brecha de seguridad no sólo pone en entredicho a la aplicación sino que podría costar caro a instituciones claves durante la actual crisis.

La fiscal general del estado de Nueva York, Laetitia James, ha enviado un comunicado oficial a la empresa para que aclare cuáles son sus prácticas de privacidad y qué medidas está tomando para mejorarlas, especialmente en lo que concierne al uso de la herramienta por parte de menores.