La digitalización de la mayoría de las actividades económicas creció en el 2020 como consecuencia de la pandemia del coronavirus y las medidas de confinamiento social. Una de ellas fue la construcción, sobre la cual penden dos espadas de Damocles, según advirtió en una entrevista con iProfesional Francisco Brañas, cofundador y director general ejecutivo de la empresa Capp.

El nombre de esta compañía es un acrónimo de "Construction application" o aplicación para construcción. Se trata de una plaza de negocio ("marketplace") y comunidad colaborativa dedicada a la construcción.

-¿Cómo cambió Capp y su ecosistema de clientes y socios de negocios entre diciembre de 2019 y el mismo mes de 2020?

-En relación con nuestro trabajo netamente de software, la realidad planteó una serie de problemas al principio teniendo que rearmar nuestra estructura, pasando de lo presencial a lo digital ya que no teníamos por el momento implementado ningún tipo de política respecto al teletrabajo. Sin embargo, es un desafío con el que hoy estamos muy contentos y con un rendimiento mayor.

La relación de trabajo remoto y presencial pasó de 0 a 100%. Si bien nunca tuvimos políticas en contra del teletrabajo, hoy nos dimos cuenta de que no lo habíamos puesto en agenda como lo hacemos ahora. La relevancia de poder flexibilizar los lugares desde donde la gente trabaja tiene un gran impacto tanto en las personas como en las organizaciones.

En el futuro cercano, creemos que esta es una realidad que llegó para quedarse y que nuestras oficinas se convertirán en puntos de encuentro con el objetivo de potenciar la cultura que tenemos en el equipo desde la experiencia.

.¿Cómo impactó la pandemia en su agenda de proyectos?

-La pandemia tuvo sus etapas con un comienzo intrigante y desafiante para todos. En la construcción, la pandemia mantuvo a los vendedores cerrados por un buen tiempo y luego con serios problemas de reposición de stock. Esto en nuestras agendas representó una desaceleración en el plan de expansión, en un rubro donde los acuerdos presenciales siguen teniendo un peso considerable.

De todos modos, no consideramos esto negativo, el parate en el plan nos dio la libertad de tomar distancia y decisiones, que en el día a día no hubiésemos podido realizar. Esto nos preparó mejor y hoy estamos parados desde una situación diferente en cuanto a plataforma y equipo.

-¿Qué iniciativas realizaron en medio de la pandemia? ¿Qué pendientes de trabajo quedaron para 2021?

-Trabajamos fuertemente en los modelos de escalabilidad de la plataforma. Entendimos que esta situación no era más que dar unos pasos hacia atrás para tomar impulso y así lo asumimos. Creemos que el compromiso que tomamos va de la mano a una apuesta fuerte en 2021, donde la construcción tendrá un rol protagónico en la recuperación económica del país. En este sentido, buscamos ser el vector para agilizar y eficientizar las compras de materiales de las obras a través de nuestras herramientas de cómputo y gestión.

Capp ofrece una comunidad colaborativa dedicada a la construcción.

Logros y pendientes que dejó el 2020

-¿Cuáles fueron las TIC a las que recurrieron para los cambios registrados en las preguntas anteriores?

-Sumada a las plataformas que veníamos usando de trabajo colaborativo para compartir archivos, planificar trabajos, seguimiento de tareas, entre otros; sumamos otras que replican el trabajo en equipo que hacíamos típicamente en la oficina como pizarrones virtuales (Boards), herramientas para implementación de metodologías tipo scrum, mind maps, etc.

Para el comienzo y seguimiento de los trabajos en estas herramientas, tuvimos que adaptarnos e implementar procesos que nos permitan exprimirlas al máximo. Hoy en día forman parte de nuestro día a día.

-¿El 2020 dejó enseñanzas y hechos destacables para las TIC en la Argentina?

-Para la industria, el 2020 fue un año plagado de contrastes desde nuestro punto de vista. Sin dudas, aceleró el proceso de digitalización en las personas con un aumento considerable del universo ecommerce y alentó a que nuevos competidores se sumen a nutrir la gama de productos y servicios. Desde nuestro punto de vista, el ingreso de competidores fuertes en los servicios claves es fundamental para elevar a toda la cadena en calidad y democratizar en costos.

Por otro lado, se notó que algunos de los actores principales como medios de pago y plataformas B2C no estaban preparados para afrontar los cambios de escala y sufrieron la transición.

La ley de conocimiento es vital para el rubro, nos hace competitivos a nivel mundial y potencia el crecimiento de las empresas de base tecnológica que tenga base en el país y sus fuentes de ingreso sean provenientes del exterior.

En cuanto a la ley del teletrabajo, creemos que hay varios puntos que se deberían revisar, principalmente las que en cuanto a la naturaleza de lo estudiado contenga contradicciones con el motivo real del trabajo remoto. Las principales ventajas ya naturales del teletrabajo nacen de los trabajadores hacia las empresas y no al revés, los beneficios de la versatilidad y manejo de horarios son el atractivo fundamental y la rigidez que se imponga en esta metodología de trabajo debe ser estudiada porque corremos el riesgo de quitarle el atractivo y los beneficios tanto a trabajadores como a empleadores.

-A partir de su balance de 2020, ¿cuáles son los pendientes tecnológicos que tiene la Argentina?

-Es imperativo tener políticas de estabilidad y sinceramiento cambiario, apoyo al sector del conocimiento y tecnología. Hoy la distorsión cambiaria y las políticas impositivas que aumentan los costos de los servicios TIC, hacen titánico el trabajo de las empresas por retener el talento en las áreas de mayor requerimiento técnico y más aún perjudica el relacionamiento con talento y servicios del exterior.

Francisco Brañas: "Es imperativo tener políticas de estabilidad y sinceramiento cambiario".

-¿Qué tendencias en TIC estima que crecerán en su adopción en 2021?

-Dependerá de diversos factores. Si hay algo que nos enseñó la pandemia es que estamos navegando por un mar de incertidumbres que va cambiando día a día con las decisiones que se toman a todo nivel.

A priori, esperamos que siga creciendo en los niveles actuales y esperamos un impacto positivo en el involucramiento de grandes jugadores en el mercado digital. También, creemos que el nivel de los servicios actuales aumentará rápidamente durante el 2021 y estaremos expectantes de las decisiones que se tomen en cuanto a las políticas de apoyo al sector, las cuales son vitales para retener el talento y mejorar la calidad y exponencialidad de los proyectos en el país.