Según los datos oficiales, unas 2.000 empresas adhirieron al nuevo Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento (Ley EDC). Sin embargo, aún son pocas si se tiene en cuenta que la Ley 27.506 brinda importantes incentivos económicos, vigentes hasta 2029, a emprendimientos de muy diversos sectores, entre ellos la industria 4.0.

Entre las actividades beneficiadas, se encuentran las siguientes:

• Software y servicios informáticos y digitales.
• Producción y postproducción audiovisual.
• Biotecnología.
• Servicios geológicos y de prospección.
• Servicios profesionales de exportación.
• Nanotecnología.
• Industria aeroespacial y satelital.
• Ingeniería para la industria nuclear.
• Industria 4.0.
• Ingeniería, ciencias exactas y naturales, ciencias agropecuarias y médicas.

En lo referente a las microempresas en particular, la norma les otorga un tratamiento especial y privilegiado en materia de los requisitos a cumplir para su incorporación a dicho régimen y el consecuente goce de sus beneficios.

Al respecto, la normativa determina que las microempresas, con una antigüedad menor a los tres años desde el inicio de actividades, sólo deberán acreditar para su inscripción en el Registro EDC que se desempeñan en el país, por cuenta propia y como actividad principal, en algunos de los rubros beneficiados.

Como única limitación se establece que, una vez transcurridos cuatro años de la respectiva inscripción en el Registro EDC o cuando deje de ser microempresa en los términos que fija la legislación, aquello que ocurra en primer término, la compañía deberá dar cuenta del cumplimiento de los requisitos adicionales que exige la Ley EDC.

Silvia Tedin: "Las microempresas nuevas que adhieran al régimen promocional podrán gozar de significativos beneficios fiscales".

Topes vigentes para ser una "microempresa"

Si se toma al rubro de industria y minería a modo de ejemplo, la norma dispone que el promedio anual ventas netas, de los últimos 3 últimos años, no debe superar los $45.540.000 (detrayendo el 75% de las exportaciones).

Entre los beneficios tributarios, se plantea una reducción de los costos laborales mediante un bono de crédito fiscal utilizable contra el pago de IVA y/o impuestos nacionales excluidos de Ganancias, no transferible, sobre el 70% de las contribuciones patronales efectivamente pagadas.

Este bono podrá incrementarse al 80% en el caso de contratar a mujeres, personas transgénero, con discapacidad, o residentes en zonas desfavorables, y/o cualquiera que antes de ser empleado percibiera planes sociales, entre otros.

En lo que hace al Impuesto a las Ganancias, contempla una alícuota reducida, según el siguiente esquema por tamaño de empresa: 60% para micros y pequeñas, 40% a las medianas, y 20% para el caso de las grandes.

Si se considera que la alícuota de Ganancias fue modificada recientemente por una escala progresiva, donde puede llegar al 35%, este beneficio se podría ver potenciado si la empresa pasa al tramo de escala máxima. Los empresarios que exporten servicios y que se inscriban en el registro podrán gozar una alícuota del 0% de derechos de exportación.

Las Micropymes se encuentran en una situación muy favorable entre los primeros pasos deberán verificar que su código de actividad (CLAE) esté entre los promovidos, y luego deberán cumplimentar muy pocos requisitos, para lograr la inscripción en el registro.

Entre estos, tendrán que darse el alta en el Registro Único de la Matriz Productiva (RUMP), no poseer deudas fiscales a la fecha de adhesión, ni sindicales (si tuviera empleados sindicalizados), contar con certificado MiPyme para la categoría "Micro" en mano y completar el formulario de adhesión y un presentar planilla de personal con varios datos de la nómina, acompañado por una descripción detallada de su modelo de negocios.

Ricardo Proganó: "La Ley 27.506 brinda importantes incentivos económicos, vigentes hasta 2029".

En función de lo mencionado, queda claro que las microempresas nuevas que adhieran al régimen promocional podrán gozar de significativos beneficios fiscales por varios años mediante un trámite sencillo y sin mayores requerimientos inmediatos.

(*) Silvia Tedin: socia y consultora de Misión Pyme SMS. Ricardo Proganó: director de finanzas corporativas de SMS Buenos Aires.