Elegir el electrodoméstico de cocina de bajo consumo adecuado para la tarea correcta es una manera fácil de ahorrar energía y potencialmente reducir los costos de energía en el hogar.

En la casa hay enfrentamientos energéticos entre las bombillas LED y CFL, las ollas de cocción lenta y los hornos, y las secadoras de gas y eléctricas. Ahora es el momento de coronar al ganador de las batallas entre el microondas vs el horno eléctrico vs el horno tradicional. El ganador de la cocina energéticamente eficiente es... ¡el microondas!

Por horno tradicional o convencional se entiende el de una cocina que no utiliza gas sino electricidad. El horno eléctrico es un electrodoméstico de tamaño similar al de microondas.

Elegir cocinar con un microondas en lugar de un horno tradicional de cocina alimentado a electricidad puede consumir entre un 30% y un 80% menos de energía. 

Como beneficio adicional, un microondas no calienta la cocina en el verano tanto como lo haría cocinar con un horno, lo que puede ayudar con los costos del aire acondicionado.

Es útil comprender cómo funcionan estos electrodomésticos al considerar si usar un horno eléctrico en lugar de un microondas o un microondas en lugar de un horno. Los microondas usan ondas de radio de alta frecuencia para calentar las moléculas de agua dentro de los alimentos.

El microondas es más eficiente que el horno eléctrico.

La comida se cocina de adentro hacia afuera, dejando que el aire alrededor de la comida permanezca a temperatura ambiente. En esencia, los microondas calientan toda la comida a la vez. Este método reduce el tiempo de cocción y el consumo de energía, especialmente cuando se cocinan pequeñas cantidades de alimentos.

Por el contrario, un horno convencional calienta principalmente por convección: el aire caliente rodea la comida y el calor de los serpentines calientes proviene de la diferencia de temperatura entre el aire caliente y la comida.

A medida que las partes exteriores de los alimentos se calientan, el calor se mueve hacia adentro para calentar el interior de los alimentos. Los hornos eléctricos cocinan los alimentos combinando aire caliente con calor radiante.

Horno eléctrico vs microondas: cuál gasta más

Los hornos eléctricos y los microondas generalmente tienen una potencia diferente. El microondas promedio usa 925 watts y los hornos tostadores 1225 watts. Eso significa que, desde el principio, el microondas está por delante del horno eléctrico en cuanto a la cocción con eficiencia energética, ya que usa alrededor de un 20% menos de energía.

Los hornos eléctricos también superan a los hornos convencionales. Usan alrededor de un tercio a la mitad de la cantidad de energía de un horno convencional cuando cocinan comidas pequeñas. Los hornos eléctricos se utilizan principalmente para tostar y hornear, y con menos frecuencia para descongelar, calentar o asar alimentos.

Microondas vs horno convencional

Cocinar una papa es una forma de comprender los posibles beneficios de cocinar de usar un horno de microondas frente a un horno. Cocinar cuatro papas medianas lleva unos 15 minutos en un horno de microondas.

El microondas tiene posibilidades versátiles de cocción.

Cocinar esas mismas cuatro papas en un horno convencional llevaría alrededor de una hora. Esto es obviamente una reducción tanto en tiempo como en costos de energía.

A veces, sin embargo, un horno es el electrodoméstico de cocina eficiente en energía adecuado para la tarea en cuestión. Grandes cantidades de alimentos, por ejemplo, funcionan mejor en un horno que en un microondas.

Consejos para gastar menos con tu horno convencional

Podés aumentar la eficiencia energética de tu horno convencional, con electricidad o el tradicional con gas, siguiendo algunos consejos:

• Instalá tu horno lejos de tu heladera. El calor de la cocina hará que la heladera trabaje duro y aumente tu factura de electricidad. Si tenés que colocar electrodomésticos uno al lado del otro, colocá una lámina de aislamiento de espuma entre ellos.
• Los hornos autolimpiantes tienen más aislamiento y puertas más ajustadas que los hornos estándar. Esto mantiene el calor de manera más efectiva.
• No abras la puerta del horno mientras cocinás para revisar su comida. Cada vez que abrís la puerta, la temperatura del horno baja 25 grados. Por eso los hornos tienen luz interior o usan un temporizador.
• Precalentar el horno consume energía adicional y, por lo general, se considera innecesario.
• Utilizá los utensilios de cocina correctos. En el horno, usar recipientes de vidrio o cerámica en lugar de metal te permite bajar la temperatura unos 25 grados y cocinar los alimentos con la misma rapidez.

Consejos para garantizar una eficiencia energética de microondas óptima

• Los microondas son más eficientes para porciones pequeñas o para descongelar.
• Los microondas no son apropiados para todas las cocciones; pueden cocinarse de manera desigual y no pueden dorar los alimentos.
• La eficiencia energética de microondas no varía mucho. En general, un microondas pequeño, con una potencia nominal de 600 a 800 vatios, es más eficiente energéticamente que uno más grande, normalmente de 850 a 1650 vatios. No compres un microondas más grande de lo que necesita tu familia.
• Los modelos más nuevos pueden aumentar la eficiencia energética de microondas a través de sondas de temperatura, controles de detección que indican el contenido de humedad cuando la comida está completamente cocinada y configuraciones de potencia variable.
• El tamaño importa a la hora de elegir el mejor aparato de cocina de eficiencia energética. Lo mismo ocurre con el tipo de cocina que deseás hacer. Pero si lo que deseás es pequeño y/o recalentado, no puede superar la eficiencia energética del microondas.