A algún fanático de las divisas digitales le parecerá imposible que, a esta altura del partido, haya gente que aún no sepa qué son o cómo funcionan las criptomonedas. Y viceversa: quizá esas personas que desconocen por completo el ecosistema cripto, piensen que es imposible que haya tanta gente invirtiendo en ellas.

¿Qué son las criptomonedas?

Las criptomonedas son activos digitales que utilizan la criptografía para garantizar la seguridad de las transacciones. Son monedas que no existen de forma física y, por lo tanto, deben guardarse en una billetera digital o wallet.

La primera criptomoneda que se creó fue bitcoin (BTC), se cree que fue Satoshi Nakamoto. En la actualidad, esta y ethereum son las dos criptodivisas más grandes por capitalización de mercado.

El valor de las criptomonedas cambia constantemente (después se verá el porqué de estas continuas variaciones), de hecho, una de sus principales características es la extrema volatilidad que tienen. Por ello, en la actualidad se utilizan mucho más como una forma de inversión de muy alto riesgo que como medio de pago, señala Business Insider.

Como muestra un botón: según CoinMarketCap, el 9 de noviembre de 2021, bitcoin alcanzó su precio máximo en la historia, 58.283,8 euros. En el momento de escribir este artículo está en 20.849,47. Por lo tanto, el precio de BTC ha caído un 64,23%.

Características comunes a todas las criptomonedas

Aunque cada una tiene sus particularidades (y con el desarrollo de las llamadas criptomonedas del metaverso las diferencias se van acentuando), hay una serie de características que son comunes a todas y sirven para entender muy bien cómo funcionan las criptomonedas.

Antes de comprar bitcoin, Ethereum, Bitcoin u otras criptomonedas, hay que asegurarse de hacerlo en un exchange regulado

-Operan sobre la blockchain, también conocida como cadena de bloques, que es la tecnología que permite realizar transacciones entre 2 o más personas sin que haya intermediarios. Es como un gran libro de contabilidad que guarda todas las operaciones que realizan los integrantes de la red.

-Son criptográficas, es decir, emplean técnicas de cifrado para las transacciones.

-No se pueden falsificar ni duplicar.

-No es posible cancelar la operación.

-Se compran con dinero fiat y se venden por dinero fiat. De ahí que se hayan convertido en una forma de inversión.

-No están controladas por ninguna institución, ni administración, ni banco. Ergo, no están reguladas y, por lo tanto, tampoco amparadas por alguno de los mecanismos de protección al cliente, como es, en España, el Fogain (Fondo de Garantía de Inversiones).

¿Por qué varía el precio de las criptomonedas?

Un aspecto clave para entender cómo funcionan las criptomonedas es comprender por qué su precio es tan volátil.

En la web del Santander dan una explicación acertada:

"El valor de las criptomonedas varía en función de la oferta, de la demanda, y del compromiso de los usuarios. Este valor se forma en ausencia de mecanismos eficaces que impidan su manipulación, como los presentes en los mercados regulados de valores. En muchas ocasiones, los precios se forman también sin información pública que los respalde".

También en BBVA hacen un repaso a los motivos principales que mueven el precio de las criptomonedas:

-Baja adopción: una adopción masiva, apuntan, ayudaría a regular el precio, pero parece que esto está lejos de producirse. Un aumento en la regulación, sostienen, podría sentar las bases para una mayor adopción, pero si esta es demasiado estricta, también existe la posibilidad de que tenga el efecto contrario.

-La confianza: al no estar respaldadas por gobiernos centrales, los mercados no confían tanto en las criptomonedas como en las monedas fiduciarias.

-Oferta y demanda: si la criptomoneda genera un gran volumen de unidades con poca demanda, explican, su valor será bajo y viceversa. A esto afecta la escasez, bitcoin, por ejemplo, ha establecido un límite de 21 millones de unidades.

-Nivel de utilidad: con esto se refieren a la capacidad de una criptomoneda, o de su plataforma blockchain, de resolver un problema real. A más utilidades, más demanda.

-El sentimiento: esto es especialmente importante en un momento como el actual, en el que la quiebra de algunas grandes empresas del sector, como FTX, ha generado una enorme desconfianza en la industria. En BBVA indican que si las noticias en torno a una criptodivisa o su recepción por parte de los usuarios son positivas, la demanda y el precio aumentarán.

-Las ballenas: en el entorno bitcoin, las 'ballenas' son billeteras que tienen una gran cantidad de criptomonedas, habitualmente más de 1.000. Son tan grandes que un movimiento suyo es capaz de revolucionar el mercado.

¿Cómo comprar criptomonedas?

El último paso en el proceso de comprender cómo funcionan las criptomonedas es saber la manera de comprarlas. Y es tremendamente sencillo, solo hay que recurrir a uno de los muchísimos intercambios (exchanges) online que están activos en el mercado y realizar la compra.

Posteriormente, hay  que guardar esas criptomonedas en un almacenamiento en frío o en caliente. Lo habitual es que en la propia plataforma criptográfica guie y asesore en todo el proceso.

Eso sí, antes de comprar bitcoin, Ethereum u otras criptomonedas, hay que asegurarse de hacerlo en un exchange regulado. En la parte inferior de la web deberían aparecer los datos del negocio, como el lugar en el que está radicado o las licencias para operar que tiene.

También, directamente, está la opción de buscar en la web de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), si la empresa con la que vas a trabajar está autorizada.

O al revés: está la opción de comprobar si dicho intercambio de criptomonedas aparece en la conocida como 'lista gris' de la CNMV.