Los sensores de movimiento conectados a la Internet de las cosas pueden hacer más que el encendido y el apagado de luces y la regulación de temperaturas. Son la oportunidad para redefinir el modelado de edificios, la supervisión del estado de obra y el envío de alertar sobre el mantenimiento de materiales.

Las casas y edificios "inteligentes" son el resultado de una vida hiperconectada, pero el control y la automatización de la tecnología puede extenderse más allá de la domótica y ser protagonista en otras etapas de la vida de un edificio, desde el diseño inicial y la construcción hasta un mantenimiento que alargue la vida útil de la infraestructura.

La interconexión entre dispositivos que permiten los sensores de Internet de las cosas (IOT, sigla en inglés) no tiene límites y puede ser una gran aliada antes, durante y después de la obra.

La combinación de estas herramientas con el modelaje tridimensional (3D) de un edificio, por ejemplo, puede ayudar a que un cambio en el diseño se modifique en simultáneo en el plan de obra, y mantener actualizada toda la información disponible en todo momento.

"Estas tecnologías son una ventaja para prevenir cualquier complicación en todas las etapas de la obra. Si el equipo, desde los arquitectos hasta los constructores, tiene datos actualizados siempre disponibles, se reduce el margen de error y se pueden aplicar soluciones antes de que un sistema falle", detalló ante iProfesional Federico Gagliardo, fundador y director general ejecutivo de Vitrium Capital, una desarrolladora inmobiliaria internacional.

Por ejemplo, en el uso de hormigón, la aplicación de sensores IOT permite recibir informes en tiempo real sobre su temperatura y "asegurarnos de aprovechar el material maduro en el momento justo", destacó.

Sensores para conectar a la IOT.

Una red para una obra segura

Una red de conexión que supervise los materiales crea un plan de varias instancias: identifica piezas defectuosas, monitorea las condiciones ambientales para cuidar los materiales y da alertas tempranas sobre cualquier posible escasez de insumos. Gestionar un proyecto con estos datos a mano acorta los tiempos, reduce los costos y prioriza la eficiencia energética.

Además de la sostenibilidad, transforma la construcción en un espacio más seguro. Los dispositivos localizan dónde están los materiales, el equipamiento y los obreros, y supervisa y permite el diseño de hojas de ruta con movimientos óptimos e itinerarios regulados para cada día.

Combinado con un seguimiento de maquinarias y camiones, por ejemplo, puede avisar a los trabajadores sobre las zonas que conviene evitar para la disminución de riesgos o direccionarlos a otra parte que tenga tareas por completar.

"La seguridad es importante para cualquier obra y la tecnología puede cambiar cómo implementamos medidas y protocolos", resaltó Gagliardo sobre la alianza entre los mundos físicos y digitales.

"La operación remota de máquinas es posible gracias al avance de estos sistemas de conexión. Hoy, un operario puede manejar sus equipos conectados con Wi-Fi, sin tener que exponer a los obreros a estar en cercanía durante la construcción, o puede aplicarse cuando se trabaja en áreas peligrosas por contaminación u otros factores de riesgo", afirmó.

La digitalización también acompaña al edificio una vez que su construcción ya haya finalizado. Además del seguimiento preventivo, el intercambio de información IOT abre la puerta a un "mantenimiento predictivo".

Los edificios modernos son la vanguardia de la IOT en la construcción.

Al analizar los usos y condiciones del edifico y sus servicios, se puede anticipar cuándo sería el momento más adecuado para un mantenimiento total o parcial, lo que da una nueva dimensión a la arquitectura sostenible y autosuficiente.

La conexión con Internet de las cosas alcanza desde la computadora de un estudio de arquitectura hasta dispositivos en bolsones de cemento ubicados en un futuro rooftop.

Las ventajas de la tecnología en obra siguen redefiniendo cómo construimos y qué herramientas incorporamos para simplificar procesos, predecir fallas y mantenernos informados con datos actualizados a toda hora.