El vino argentino está en un momento clave: el mercado interno se ve afectado por la pandemia y los mercados interancionales, fundamentales para las bodegas locales, también están sufriendo por el Covid-19. 

Países como Estados Unidos, el Reino Unido y Brasil, además de China, están atravesando diferente fases de la pandemia y el impacto en las exportaciones se está haciendo notar.

En este contexto complejo, Wines of Argentina, entidad responsable de promover el vino argentino en los mercados internacionales, nombró a Maximiliano Hernández Toso como nuevo presidente. 

Se trata de su primer período al frente de la organización hasta entonces liderada por Alberto Arizu. A su vez, desde WOfA informaron que se renovó el cargo de Guillermo Barzi como vicepresidente.

El vino argentino está ante un gran desafío, en un contexto marcado por la pandemia

Hernández Toso es cofundador y director de WHT Partners, grupo económico argentino dedicado a invertir en la industria vitivinícola de alta gama, propietarios de las bodegas Riglos y Huarpe. 

Además, es ingeniero Industrial de la Universidad Nacional de Cuyo, con un MBA en IDEA y en la London Business School y un Máster en Políticas Públicas en Carnegie Mellon University. Fue profesor y director del programa de gestión vitivinícola de ADEN Business School y trabajó como consultor privado e independiente de emprendedores, inversores y organismos multilaterales. Desde el 2015 forma parte de la Comisión Directiva de Wines of Argentina, habiéndose desempeñado como tesorero de la entidad el último período.

Toso dijo que "tenemos muchos desafíos por delante, pero también grandes oportunidades para innovar y continuar acercando el vino argentino al mundo, elevando la percepción de Argentina como país vitivinícola moderno gracias a la enorme riqueza y diversidad de nuestros terroirs". 

Vino argentino en el mundo: oportunidades 

La pregunta que se hacen las bodegas exportadoras hoy es: ¿hay chances de vender vino en un mundo azotado por la pandemia?

iProfesional dialogó días atrás con Arizu, cuando ejercía como presidente de WOfA, quien señaló que "el mercado exportador es fundamental para las bodegas, porque la demanda doméstica se está viendo muy golpeada. Es un gran desafío que tenemos por delante, luego de dos meses y con la economía global paralizada. Y todo esto lógicamente repercutirá en el negocio: todo el sector de restaurantes y hotelería va a tardar mucho en recuperarse. La salida de la pandemia va a ser gradual y la gente va a tardar en volver a viajar, en reunirse. Va a llevar tiempo a que todo retome su ritmo habitual y esto, claramente implicará una recuperación más lenta para el negocio del vino en esos canales". 

El entonces titular de la entidad consideró que hay oportunidades para las bodegas locales: "Estamos viendo que se están activando algunas órdenes de compra. Da la sensación de que Europa ya llegó a su piso en términos comerciales y Estados Unidos y Canadá, dos mercados muy fuertes para nosotros, no bajaron tanto su ritmo. En el caso de Estados Unidos, depende mucho de dónde esté ubicado el importador y en algunos casos aminoró un poco la demanda, pero no dejó de comprar".

"Nos preocupa más América Latina, especialmente Brasil, que venía recuperándose desde el año pasado, pero ahora creemos que va a salir golpeado de esta crisis. Lo mismo que México", agregó.

VINOS | Desde Wines of Argentina destacan que se abren oportunidades en supermercados y vinotecas del exterior.

¿Y en qué canales están las mayores oportunidades? Según planteó Arizu, en el segmento de supermercados y vinotecas estará concentrada la mayor demanda.

"Ahí sin dudas vamos a ver una recuperación más rápida. Es más: Estados Unidos y el Reino Unido cerraron marzo con niveles de ventas mayores que igual mes del año pasado. Básicamente porque hubo buenas ventas en supermercados y porque las vinotecas fueron declaradas esenciales durante la cuarentena", detalló.

Y, bajo su óptica, la Argentina, así como en la crisis de 2008 pudo capitalizar la coyuntura y crecer, "este año también tiene oportunidades, porque seguimos siendo competitivos en el segmento de precios de 15 a 25 dólares la botella".

"Los vinos argentinos tienen una calidad superior a la media mundial en ese nivel de precios y esto es clave como herramienta de competitividad. Además, venimos de dos excelentes cosechas, como fueron la 2017 y la 2018 y la que está entrando, la 2019, también fue estupenda. Entonces, hoy estamos en condiciones de ofrecer muy buena calidad a un buen precio, así que estamos preparados para competir en este contexto", recalcó, para luego agregar: "La clave está en entender cómo va a ser el mundo a partir de ahora y trabajar y pensar en función de eso; es decir, cómo vamos a salir a capturar las oportunidades que vamos a tener".

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