El plenario de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) que se realizó la semana pasada en Pilar, con el cierre a cargo de Cristina Fernández de Kirchner dejó mucho material político y gremial. Pero además significó un contundente apoyo al consejo directivo en la discusión de la reapertura de las paritarias. Antes, durante y después, una multitud gritó en ritmo futbolero: "Paga el aumento… (insultos incluidos)". La conducción gremial aprovechó ese respaldo y lo llevó a la mesa de negociación, que se desarrolló esta semana con dos audiencias que fracasaron, abriendo la posibilidad de un conflicto aunque queda una instancia más.

El gremio encabezado por Abel Furlán exige una mejora anual del 111 por ciento hasta marzo del año próximo y un bono de 50.000 pesos. Hasta el momento, habían logrado una mejora del 65 por ciento, con un básico que en noviembre llega a los 110.000 pesos, aproximadamente. Es decir, que pretenden sumar un 46 por ciento de incremento, ubicándose en los primeros puestos del ranking de las paritarias.

En plena campaña para destronar al histórico secretario General de la UOM, Antonio Caló, Furlán sostuvo que venía por una recuperación concreta de los salarios. Sin ánimo de entrar en internas, agregó: "Hasta ahora fuimos demasiado contemplativos, no quiere decir que no seamos dialoguistas; pero no vamos a firmar ningún acuerdo que signifique la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos de las compañeras y compañeros".

Metalúrgicos exigen suba de 111%: habrá nuevo encuentro el martes

Esta semana se llevaron a cabo dos encuentros entre los paritarios metalúrgicos y los representantes de las cámaras empresarias. Frente a la ratificación de la demanda, las patronales ofrecieron un 100 por ciento de aumento. Ante el estancamiento de las tratativas, pactaron pasar a un cuarto intermedio hasta el martes próximo, cuando se entre en tiempos de definiciones: Se sella un acuerdo o se disponen medidas de fuerza.

Las discusiones fueron arbitradas por funcionarios del ministerio de Trabajo, que convocaron a las partes a continuar el diálogo el martes 22 a las 13 en la sede laboral de la avenida Callao al 100. Si bien no hay medidas de fuerza, fuentes gremiales admitieron que podrían convocar a una movilización para ejercer cierta presión a los empresarios. "Somos optimistas porque en el porcentaje no estamos tan lejos; el problema es el bono" explicaron los voceros a iProfesional y agregaron que "parece mentira, pero los más reacios a otorgar una mejora a sus trabajadores y trabajadoras son los directivos de las grandes compañías".

Bono de $50.000 y reclamo al presidente Alberto Fernández

En cuanto al bono de 50.000 pesos, se podría desdoblar en dos cuotas de 25.000 pesos: Febrero y marzo. En el acto en Pilar, Furlán hizo hincapié en la necesidad de un plus salarial que compense la pérdida del poder de compra por la constante remarcación de precios. Remarcó: "Lo pedimos en privado y en público al señor Presidente", con una Cristina Fernández que no dejaba de asentir y que después usó en su discurso para señalar los estragos que está haciendo la inflación en los salarios de la clase trabajadora.

Tras el acto en Pilar, donde la vicepresidenta reapareció, la UOM se vio fortalecida de cara a la reapertura de paritarias.

Desde la UOM proponen que el 46 por ciento de aumento se abone en cuatro cuotas: 11 por ciento en diciembre, 11 en enero, 12 en febrero y 12 por ciento en marzo, para comenzar en abril con la paritaria 2023-2024. Los voceros indicaron que "en el plenario de Pilar Cristina dio una clase sobre puja distributiva, salarios y ganancias de las empresas; a su vez, los delegados están convencidos que hay que luchar para defender los ingresos, por eso estamos convencidos de que esta es la forma de recuperar ingresos".

En cuanto a la postura de las patronales, si bien no aceptaron las demandas de la UOM, el bloque empresario que conforman ADIMRA, AFAC (autopartistas), Camima (pymes), Afarte (electrónicas de Tierra del Fuego), Caiama (aluminio) y Fedehogar (electrodomésticos) consideran que el 111 por ciento de aumento es viable en el contexto inflacionario que atraviesa el país. Desde la cartera laboral que encabeza Raquel "Kelly" Olmos plantearon que "vamos a seguir alentando estas reuniones porque consideramos que hoy no están tan lejos y se pueden negociar plazos, porcentajes y hasta el monto del bono y su incorporación al salario".