Fuerte aumento de las multas de tránsito en uno de los principales destinos turísticos de Argentina

Con la cercanía de la temporada alta de verano y el intenso flujo de turistas que se moviliza por las rutas nacionales y provinciales, una noticia de alto impacto económico genera alerta en el sector de viajes: la provincia de Córdoba, uno de los principales destinos turísticos de Argentina, acaba de aplicar un nuevo y significativo aumento a los valores de las multas de tránsito del 10,2% en relación al mes previo. La actualización, impulsada por la Dirección General de Prevención de Accidentes de Tránsito, lleva el costo de las infracciones más graves a cifras récord, que superan ampliamente los tres millones de pesos.

Este ajuste tarifario impacta directamente en el bolsillo de miles de conductores que utilizan los más de 7.000 kilómetros de rutas que atraviesan la provincia, ya sea por motivos laborales o, fundamentalmente, por turismo hacia las sierras, los valles o la capital. La rigurosidad de la Policía Caminera de Córdoba es reconocida a nivel nacional, y con los nuevos valores de la Unidad Fija (UF), una simple distracción o un error de cálculo en la velocidad máxima puede traducirse en una deuda millonaria y consecuencias administrativas severas.

La finalidad de estos incrementos, que se mantienen en constante actualización, es clara: reducir drásticamente la siniestralidad vial en el territorio provincial, penalizando de forma contundente las conductas más peligrosas, como la alcoholemia positiva o el exceso de velocidad. A continuación, el detalle completo de cuánto vale la nueva Unidad Fija, cuáles son las infracciones más caras que acechan al turista y cómo evitar caer en la categoría de falta máxima.

El nuevo valor de la Unidad Fija y su impacto directo en el bolsillo

El sistema de multas se basa en la Unidad Fija, cuyo valor se ajusta de manera periódica y automática en función del precio del litro de nafta súper en las estaciones de servicio de YPF. Este mecanismo indexatorio provoca que, ante cada variación en el precio de los combustibles, el costo de las infracciones se mueva al alza.

En la última actualización, oficializada en el Boletín Oficial en diciembre de 2025, el valor de la UF experimentó un nuevo salto, situándose en $1.696. Este monto es el que rige para la temporada de verano y define la escala de penalizaciones, que se clasifican en leves, graves, muy graves y máximas, dependiendo de la amenaza que representen para la seguridad vial.

Con la UF en este nuevo nivel, las multas más económicas comienzan en el entorno de los $33.920, mientras que las sanciones más severas alcanzan su máximo histórico, convirtiéndose en algunas de las penalizaciones de tránsito más caras de Argentina.

Multas máximas: la sanción que supera los $3.300.000

El principal foco de preocupación para los turistas y locales se concentra en el grupo de infracciones máximas, que es el que aplica las penalizaciones más elevadas y que, tras la última actualización, ya supera la barrera de los $3.300.000.

Este tipo de faltas se reserva para las conductas que demuestran una total irresponsabilidad y un riesgo extremo para la vida. La sanción económica por una Infracción Máxima se establece entre 1.200 y 2.000 UF, lo que se traduce en un rango de entre $2.035.200 y $3.392.000 al valor actual.

Entre las faltas más costosas que integran esta categoría se encuentran:

• Alcoholemia positiva: Conducir con un nivel de alcohol en sangre superior al máximo permitido (o la negativa a someterse al control).

• Adulteración de documentos: Alterar licencias, cédulas o cualquier documentación vehicular obligatoria.

• Destrucción de infraestructura vial: Dañar cartelería, barreras o cualquier elemento de la ruta.

Además de la fuerte sanción económica, estas faltas conllevan severas consecuencias administrativas, como la retención inmediata de la licencia de conducir y, en los casos más graves, la inhabilitación para manejar por un tiempo determinado, junto con la posible elevación a la Justicia de Faltas.

Las multas más comunes que afectan al turista y cómo evitarlas

Más allá de las infracciones máximas, el turista debe prestar especial atención a las faltas clasificadas como leves y graves, ya que son las más comunes y aquellas que la Policía Caminera controla de forma rutinaria en rutas y accesos.

• Infracciones leves (20 a 100 UF): Las multas oscilan entre $33.920 y $169.600. En esta categoría entran faltas menores como conducir fumando o manipulando objetos que distraigan como puede ser un mate.

• Infracciones graves (100 a 200 UF): El costo varía entre $169.600 y $339.200. El ejemplo más representativo y común es circular sin las luces reglamentarias encendidas en ruta, una regla fundamental que el turista suele olvidar.

Especial atención merecen las infracciones muy graves (200 a 400 UF), que alcanzan hasta $678.400. En este grupo se encuentran el cruce de semáforos en rojo, circular a contramano, y el exceso de velocidad considerable, una de las faltas más frecuentes que registran los controles de la Caminera en las autovías con límites estrictos.

El beneficio del pago voluntario y la pérdida de puntos en la licencia

Para mitigar el impacto del aumento de multas, la normativa provincial mantiene un mecanismo de descuento por pago anticipado. Si el conductor reconoce la infracción y opta por realizar el pago voluntario dentro de los 10 días hábiles desde la notificación, puede acceder a una reducción del 50% del monto total de la sanción.

No obstante, las multas más graves no solo implican un costo económico, sino también un castigo administrativo a través del sistema de scoring o quita de puntos de la licencia de conducir. Las faltas leves restan hasta 2 puntos, mientras que las graves pueden suponer la pérdida de hasta 5 puntos. Las infracciones muy graves y máximas implican la pérdida de puntos más severa, lo que en el largo plazo puede llevar a la inhabilitación temporal o definitiva para conducir en todo el territorio nacional, una penalización que trasciende la jurisdicción cordobesa.