Hasta el jueves, un día antes para que se cierren los patentamientos del mes, la venta de 0km habían alcanzado las 36.748 unidades, un número que preocupa a la industria y que anticipa un último cuatrimestre con resultados negativos.

El sector había recuperado el optimismo en junio, cuando el Gobierno junto con ADEFA habían lanzado un plan de incentivos para la venta de 0km. Esa medida logró que en ese período y en julio crezcan los patentamientos comparado con el mes anterior.

Sin embargo, después de las PASO, esta situación empezó a cambiar y el mercado volvió a entrar en un contexto de dudas, por lo cual, empezaron a caer los patentamientos nuevamente.

De esta manera, en el último día hábil del mes, se podría llegar a las 40.000 unidades, cuando muchas empresas salen a realizar el "autopatentamiento" para alcanzar los objetivos.

Este dato refleja la crisis del sector y es negativo si se compara con agosto de 2018, mes en el cual se vendieron 65.247 vehículos (el mercado ya empezaba a reflejar la crisis de la devaluación de abril). Pero también es una mala noticia comparado con julio de este año, ya que se vendieron 49.477 unidades, un 36,8% más que el nivel alcanzado en junio. Esto fue gracias al plan del Gobierno, que empezaba a tomar auge y que ahora se frenó nuevamente tras las PASO.

Para fin de año, en este contexto donde vuelve a instalarse la incertidumbre, se pronostican ventas por 450.000 unidades, un resultado más que preocupante para un sector que esperaba llegar al millón de unidades.

Además, antes de las elecciones primarias, se esperaba llegar a las 500.000 unidades, pero el clima político alejó también esta posibilidad.