Tildada de "defaulteador serial" por Wall Street, la Argentina debe afrontar permanentes cimbronazos financieros, porque viene gastando por encima de sus posibilidades desde hace décadas.

La sequía, que derrumbó el ingreso de unos u$s21.000 millones en exportaciones del agro este año, fue un golpe mucho más duro de lo que esperaba el Gobierno, y también los acreedores, que siempre tienen ubicado al país en el radar de los incumplidores.

Deuda argentina: los últimos datos

De acuerdo con un reporte divulgado este miércoles por la Secretaría de Finanzas, la deuda pública alcanzó en julio los u$s405.594 millones, un récord por donde se lo mire. El lado alentador es que, de ese total, u$s403.081 millones se encuentran en "situación de pago normal".

Pero según pudo saber iProfesional, estas cifras no incluyen la deuda de las provincias y municipios, ni los compromisos del Banco Central, por ejemplo en Leliq, cada vez más voluminosos.

Para tener una idea de la magnitud del problema, la deuda remunerada del Banco Central (BCRA), a la que los operadores denominan ya una "Bola de Leliq", supera los $15 billones.

Se trata un volumen récord en relación con el tamaño de la economía o de la base monetaria (BM), en medio de una tembladeral que obligó al Gobierno a resignarse y devaluar un 22%, mientras el dólar blue se disparada a niveles de 790 pesos.

En medio de la devaluación, hiperinflación y disparada del dólar, los acreedores temen que Argentina entre en "default".

Es un pasivo muy oneroso (mantenerlo costó unos $940.000 millones durante mayo, por ejemplo).

A pesar de la promesa de Alberto Fernández de reducirlo, el monto de las Leliq se multiplicó por 13,6 durante su gestión, que fue golpeada por la pandemia. Cuando Fernández asumió el Gobierno, el monto de la deuda en Leliq estaba en $1,09 billones, es decir, se multiplicó más de 12 veces.

En este escenario delicado, durante los últimos meses se produjo un cambio en la asistencia del BCRA al Tesoro. Entre mayo y agosto de este año, el Tesoro recibió el 89% de la asistencia directa acumulada en 2023 ($1,97 billones).

Desde junio, la emisión se mantuvo relativamente baja ($645 millones), pero la menor utilización de ese mecanismo de financiamiento indirecto fue complementado por asistencia directa al Tesoro, con un acumulado de $2,24 billones en el período.

Pero las compras de deuda del Tesoro que hizo en el mercado secundario fueron relativamente menores, equivalentes al 37% del total de las compras realizadas en 2023, según la consultora Quantum, que dirige el exsecretario de Finanzas, Daniel Marx.

Esa emisión se inició en marzo de este año, ya que entre agosto del 2022 y febrero de 2023 el BCRA no había asistido al Tesoro en forma directa, aunque sí hubo compra de títulos en el mercado secundario de deuda.

Aunque la emisión monetaria fue relativamente baja, fue complementada por la asistencia directa al Tesoro

A valores de hoy, entre agosto y febrero la autoridad monetaria emitió por $1,14 billones. Durante los últimos doce meses, el stock de deuda bruta en situación de pago normal se incrementó por el equivalente a u$s24.761 millones.

Fue como consecuencia del incremento de la deuda en moneda extranjera en u$s4.846 millones y al incremento en la deuda en moneda local por un monto equivalente a u$s19.915 millones.

En tanto, el mes pasado las reservas brutas del Banco Central cayeron en u$s3.834 millones.

Con relación a junio, "la deuda en situación de pago normal aumentó en el equivalente a u$s1.778 millones. La variación se explica por el crecimiento de la deuda en moneda extranjera en u$s452 millones y el aumento de la deuda en moneda local por un monto equivalente en dólares de u$s1.326 millones".

El 36% de la deuda en situación de pago normal está contraída en moneda local (equivalente a u$s143.955 millones).

En tanto, el 64% restante son obligaciones en moneda extranjera (u$s259.125 millones). Cuánto se adeuda en bonos y con organismos multilaterales. El 77% de la deuda bruta en situación de pago normal corresponde a Títulos y Letras del Tesoro Nacional.

Si el FMI confirma un nuevo desembolso, por u$s7.500 millones, la deuda con el organismo será de unos u$s45.450 millones.

A su vez, el 18% constituyen obligaciones con Acreedores Externos Oficiales, el 4% a Adelantos Transitorios y el 1% restante a otros instrumentos.

Con los organismos multilaterales, la deuda asciende a u$s69.006 millones, de los cuales u$s37.957 millones son con el FMI y u$s15.925 millones con el BID y u$s9.418 millones con el Banco Mundial, entre los principales.

Con el Banco Central, la deuda en moneda extranjera aumentó en u$s2.819 millones en Letras Intransferibles, mientras por adelantos transitorios extraordinarios creció en el equivalente a u$s1.105 millones.

Deuda argentina: ¿cómo se está financiando el Tesoro?

Según un reporte de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), de los u$s2.819 millones adeudado en Letras, el Tesoro utilizó u$s2.652 millones para hacer frente a los compromisos asumidos con el FMI del 31 de julio.

El resto, u$s166 millones, fueron emitidos para refinanciar los servicios de intereses de otras letras similares en poder de dicho organismo". Además, se registraron colocaciones netas de Adelantos Transitorios (AT) por $440.000 millones, con lo cual el stock aumentó a $ 4,59 billones. Así, el financiamiento del Banco Central al Tesoro acumuló $1,80 billones en 2023.

Si la próxima semana el Fondo concreta los desembolsos por u$s7.500 millones, la deuda con el organismo aumentaría a unos u$s45.450 millones.

Por otro lado, según la OPC, "se cancelaron intereses por el equivalente a u$s1.411 millones, de los cuales 94% fueron en moneda extranjera. Se destacan los pagos por bonos en dólares y euros emitidos en el marco del proceso de reestructuración de la deuda extranjera de septiembre de 2020, por u$s1.023 millones".