A través de un flamante informe, Moody's Investors Service, advierte que la economía argentina se viene complicando en este 2023 y se esperan problemas también para el 2024.

Asimismo, el paper señala que la caída de la actividad económica, una inflación que supera el 100%, fuertes restricciones al movimiento de capital y una creciente incertidumbre política están poniendo en peligro la salud financiera de las empresas. 

También alertan sobre la devaluación después de las elecciones primarias (PASO), que no solo ha exacerbado la subida de precios, sino que también ha endurecido las condiciones financieras y ha aumentado los costos de la deuda en dólares. Esto ha llevado a una recesión que amenaza con seguir en el corto plazo.

Según Moody's, la economía se contraerá en torno al 3,5% en 2023 y un 2,5% adicional en 2024, después de haber crecido un 5,2% en 2022.

El informe agrega que la inflación se disparará hasta el 200% en 2023 y el 350% en 2024, en comparación con el 95% en 2022. Además, señala que la sequía ha impactado negativamente en la economía, reduciendo las cosechas y afectando directamente los suministros y las exportaciones.

Según Moody's, esta situación podría llevar a un endurecimiento de las restricciones a las importaciones, lo que afectaría aún más la demanda interna y disminuiría la disponibilidad de bienes de capital, productos intermedios y de consumo.

Respecto a las elecciones 2023, Moody's señala que la eficacia de las futuras políticas para abordar los desequilibrios macroeconómicos es motivo de preocupación.

El sombrío pronóstico de JP Morgan y Moody's para Argentina

En cuanto al empleo, se espera que el poder adquisitivo de los trabajadores siga cayendo, ya que los salarios están muy por debajo de la tasa de inflación. Además, las empresas enfrentan problemas en sus resultados operativos, dificultades para obtener financiamiento en el extranjero y restricciones para acceder a divisas, lo que aumenta el riesgo de reestructuración de la deuda.

En tanto, Moody's destaca que las grandes empresas tienen más posibilidades de resistir en este entorno desafiante debido a sus modelos de negocio consolidados, su participación significativa en el mercado, su acceso al capital y su fuerte liquidez. A pesar de los desafíos, estas empresas tienen una base más sólida para enfrentar la tormenta económica.

Por otra parte, el banco de inversión JP Morgan también tiene un pronóstico preocupante sobre la situación económica del país.

En efecto, anticipa que la inflación podría alcanzar un sorprendente 190% anual para diciembre, debido a los constantes aumentos de costos y la falta de un plan efectivo de estabilización económica.

Este pronóstico se basa en la reciente devaluación y la falta de un plan claro para reducir la inflación.

JP Morgan también advierte que los riesgos de que la inflación sea aún mayor son elevados debido a la incertidumbre electoral y a la creciente inflación reprimida.

La inflación reprimida es aquella que no se refleja en los precios, pero se acumula en los costos de las empresas. Cuando estas finalmente trasladan esta inflación a los precios, puede generar un aumento brusco de los precios. Al respecto, JP Morgan estima que la inflación promedio hasta fin de año será del 12,8% mensual debido a las políticas del ministro de Economía, Sergio Massa.

Además, pronostica que los efectos de la devaluación se sentirán fuertemente en los primeros 2 meses posteriores, dada la falta de un programa de estabilización, una brecha cambiaria y la alta inercia inflacionaria.