Con la publicación del dato de inflación de diciembre, el INDEC volvió a dar una mala noticia, pues anunció que la variación de precios minoristas fue del 5,1%, es decir en línea con las estimaciones del sector privado.

De esta manera, el guarismo se ubicó 0,2% por encima del máximo alcanzado en noviembre, pero está muy por encima del 3.8% alcanzado en igual mes de 2021. Entonces, la variación acumulada para 2022 fue del 94,8%, prácticamente el doble que en el año anterior, cuando alcanzó al 50,9 por ciento. A ello se suma el dato que es la más alta de los últimos 30 años. 

Dato de inflación: los rubros que más y menos subieron

Si se toma en cuenta el lapso comprendido entre enero y diciembre y si se desagrega el dato de inflación de acuerdo a los denominados "rubros", el que más sube es Prendas de vestir y calzado, que trepó un 120.8%; seguido por Restaurantes y hoteles, con el 108.8%. Un escalón más se ubicó Bienes y servicios varios, con el 97,8%; Equipamiento y funcionamiento del hogar, con el 97.2% y Alimentos y bebidas no alcohólicas, con el 95%.

En sentido inverso, los rubros que menos subieron fueron Comunicaciones, con el 67.8%; Recreación y Cultura, con el 83,2% y Educación, que subió un 86,3 por ciento.

Si se desagrega este incremento del 56.4% por regiones, las más castigadas son el Noreste, con el 96%, seguido por el Noroeste, con el 95.1% y el AMBA, con el 95,2 por ciento. Por su parte, en Cuyo el incremento fue del 94.3%, mientras que en la Patagonia fue del 94,3% y en la región pampeana del 94,2 por ciento.

En lo que hace a los productos que conforman la canasta básica, un primer análisis arroja como resultado una notable dispersión entre los diferentes rubros que conforman el indicador. En tal sentido, dentro de dicha muestra las mayores subas fueron las correspondientes al rubro verduras y hortalizas.

En sentido inverso, los que menos subieron curiosamente fueron productos de carnicería, que en conjunto crecieron a la mitad del índice general, luego de la fuerte suba registrada en 2021.

De esta manera, a lo largo del año y en particular en los últimos meses fue notorio un violento cambio de precios relativos en favor de verduras y hortalizas.

Freezer y alacena vs. tasa y dólar

En un contexto como el actual, en el que las remarcaciones están a la orden del día, suele surgir la duda de cual si almacenar productos de primera necesidad, ya sea en el freezer o la alacena puede ser una alternativa en pos de resguardar el patrimonio de la familia.

En tal sentido, el dato a tener en cuenta es que a lo largo de 2022 el dólar subió un 66%, mientras que un plazo fijo rindió en el mismo lapso un 60 por ciento. A partir de esta referencia, es interesante destacar aquellos productos que pudiendo ser almacenados, tanto respetando la cadena de frío (léase en el freezer) o en la alacena, le ganaron por mucho a cada uno de estos "drivers" a lo largo del año.

Dicho de otra manera, hay productos que subieron muy por encima del dólar, pese a que el imaginario popular sostiene que los precios vienen impulsados por ese factor. Por el lado de los productos pasibles de ser freezados, los grandes ganadores fueron los siguientes:

En cuanto a los que se pueden "stockear" en la alacena, los mayores rendimientos fueron para estos:

Finalmente, en lo que hace a los productos de limpieza y tocador, los que más subieron fueron el paquete de pañales en 10 unidades, con el 151,8%; seguidos por el Jabón de tocador, con el 147,1% y el jabón en pan para la ropa, que trepó un 145.8 por ciento.

Las proyecciones de precios para 2023

Según el REM (Relevamiento de Expectativas del Mercado) que elabora mensualmente el BCRA, la inflación estimada para el corriente año rondaría el 100%, en tanto que desde el Gobierno apuestan a que se ubique en el orden del 60 por ciento.

En búsqueda de ese objetivo, las autoridades económicas consideraban que el índice de diciembre sería clave, ya que incluso dejaron entrever en las últimas semanas que el registro de diciembre estaría en línea con el del mes anterior (4,9%), algo que la realidad terminó por desmentir.

Para los próximos meses, es bien conocido que el ministro de Economía, Sergio Massa, apunta a que el dato mensual perfore el 4% en abril, por lo que de alguna manera choca con las expectativas privadas, pues el REM se espera que la inflación se mueva hasta dicho mes en un rango que va del 5,8% al 6,2 por ciento.

De lo anterior surge que es evidente que la expectativa del Plan Massa no es compartida por la mayoría de los analistas privados, y el motivo es que la autoridad monetaria argentina tendrá que seguir emitiendo enormes cantidades de pesos por diversas vías, que le sumarán presión a una inflación que ronda los tres dígitos.