El presidente Javier Milei está convencido de que su plan de ajuste tiene apoyo social porque así se lo mostraron las urnas y algunas encuestas recientes, pero un nuevo sondeo arrojó que el tiempo en el que se espera la prometida mejora económica, de dos años, y los aumentos en alimentos y energía pueden ser "líneas rojas" difíciles de cruzar sin empezar a pagar un costo político.

La encuesta se llevó a cabo entre el 10 y el 14 de enero sobre 2.542 casos efectivos y corresponde a la consultora Analogías, una firma que ha realizado durante la pasada campaña electoral varios estudios para el kirchnerismo. Por ello los resultados de este nuevo relevamiento son mirados con interés en el Instituto Patria de la ex vicepresidenta Cristina Kirchner.

Y es que el nivel de desaprobación que marcó el estudio respecto de la eventual eliminación de leyes laborales, la suba de precios en alimentos o los recortes en la obra pública -ejes y/o consecuencias del plan del Gobierno- alimenta la hipótesis de la ex mandataria de que el apoyo social del que goza Milei tiene fecha de vencimiento y que el peronismo debe esperar.

Esa mirada es la que motiva el silencio que guarda desde hace meses tanto ella y como el ex ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa, quien días atrás le hizo saber a la CGT su opinión de que el paro del 24 de enero es apresurado y que había que esperar a que los reclamos al Gobierno crezcan desde abajo antes de entablar una pelea frontal.

La encuesta de Analogías arrojó números que le dan cierta lógica a esa estrategia y también encienden una luz de alerta para Milei y su ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, encargado de llevar a buen puerto el ajuste fiscal y de mostrar eventualmente la prometida mejora económica tras el esfuerzo.

Cuáles son las posibles "líneas rojas" del ajuste de Milei, según la encuesta

La consultora interrogó a los encuestados sobre cómo creen que va a ser la situación económica "en los próximos dos años" y un 38,9% afirmó que será "mucho mejor" (16,8%) o "mejor" (22,1%), contra el 34,4% que respondió que será "mucho peor" (22%) o "peor" (12,4%).

La encuesta mostró potenciales límites al apoyo con el que cuenta Javier Milei para avanzar con el ajuste

Este número indica que Milei todavía goza de una relativa confianza por parte de la sociedad en que su plan funcionará, algo que naturalmente también piensan él y Caputo. Incluso están convencidos de que, luego de algunos meses de inflación alta, el descenso empezará en un plazo menor a esos dos años que puso como parámetro la encuesta.

Como contó iProfesional, los analistas empiezan a vislumbrar que ya a partir de febrero podría empezar a bajar la inflación desde el 25% que marcó en diciembre, pero aquí entra a jugar el interrogante sobre las otras posibles "líneas rojas" que enfrenta el plan del Presidente, como por ejemplo el nivel en el que finalmente quedarán los precios de los alimentos y las tarifas.

La consultora preguntó si creen que se deben "pagar los alimentos y la energía que producimos en el país a precios internacionales en dólares" y el 63,4% respondió que no mientras solo un 23,6% dijo que sí y el 13% respondió que "no sabe".

En tanto, frente a la pregunta sobre si "hay que eliminar la obra pública para reducir el déficit fiscal" el 46,9% respondió que no y el 41,1% que sí, con 12% de indefinidos y sobre la eventual privatización de las empresas del Estado el 48,4% se expresó en contra y el 39,6% a favor.

También hubo en la encuesta más opiniones en contra que a favor de la idea de "eliminar la obra pública para reducir el déficit", con un 46,9% de rechazo y 41,1% de aprobación. Por último, al preguntar si "hay que eliminar leyes laborales" el 56,5% se mostró en contra y apenas el 25,7% a favor.

¿Dolarización sí o no?: el resultado de la encuesta

Todos esos temas forman parte de los ítems más importantes del plan que presentó Milei pero según el sondeo de Analogías podrían tener menos apoyo del que espera el Gobierno al ser puestos en marcha, aunque en muchos casos todavía están en pausa: la reforma laboral espera resolución judicial, las privatizaciones dependen de lo que haga el Congreso con la ley ómnibus y la obra pública de la relación entre la Rosada y las provincias.

La idea de dolarizar nunca quedó del todo descartada en el tiempo pero no tiene una gran adhesión 

En cualquier caso, todo es potencial porque solo el tiempo determinará si un eventual descenso de la inflación pesará más o menos en la consideración pública que las consecuencias de la recesión y la estabilización de precios o las medidas puntuales como las privatizaciones y los recortes en obras de infraestructura.

No obstante, la encuesta arrojó otro dato que puede ser importante para el plan de Milei al medir las opiniones respecto de la posible dolarización de la economía argentina. Sobre esto, el 53,3% se expresó en contra y solo el 30,9% a favor, con un 15,8% de indefinidos.

Esta puede ser otra "línea roja" para el programa que tiene en mente el jefe de Estado porque según deslizan fuentes del oficialismo la idea de la dolarización no deja de estar presente como posible broche final de una eventual estabilización de la economía, a pesar de haber perdido terreno en el discurso público del mandatario.

Un punto en contra y dos a favor de Milei

La encuesta marcó así cuáles son los posibles límites que enfrentaría el plan de Milei y que referentes de peso en el peronismo como Cristina Kirchner y Massa esperan a que cruce para capitalizar el eventual descontento social. En ese horizonte, no les pasa desapercibido que además un 52,1% cree que el ajuste recae princinpalmente en "los trabajadores y los jubilados", según el sondeo.

Otro de los puntos potencialmente en contra del Presidente, siempre según este sondeo, fue que al preguntar si "el Gobierno de Javier Milei tiene actitudes autoritarias" el 46,4% respondió que sí contra un 46,4% que dijo que no y un 12% de indefinidos. 

Pero el Presidente todavía cuenta con algunos puntos a favor. Uno es que su imagen positiva es alta, en el orden del 49,4% egún Analogías, contra un 44,8% de negativa. En eso coinciden casi todos los sondeos sobre el primer mes de gestión.

Milei goza de una alta imagen positiva que le sirve para avanzar con su programa y pulsear con la oposición 

Otro punto a favor e incluso una ventaja es la pésima opinión que dejó la administración anterior en la que Massa y la ex vicepresidenta jugaron un rol fundamental. Según este sondeo el 44,4% de los consultados cree que "el gobierno anterior" es el que tiene "más responsabilidad en la escalada actual de los precios" contra el 29,5% que la atribuye a Milei.

Ese descrédito del gobierno que encabezó Alberto Fernández con Cristina y Massa como socios es otra razón lógica para el silencio de esos actores y la distancia que toman frente a la movilización de la CGT a título personal (no así de otros dirigentes y sectores relacionados con ellos).

En este factor el plan de ajuste de Javier Milei tiene un ancla social importante a la hora de enfrentar esas "líneas rojas" que marca la encuesta. Con una base de apoyo todavía fuerte, el Presidente es optimista mientras los opositores más férreos, con la excepción de la CGT, parecen decididos a esperar que cruce alguno de los posibles límites.