Primera reunión de la nueva CGT: Rechazo a la reforma laboral, con señales de diálogo con el Gobierno

La novela de la reforma laboral escribirá este lunes un nuevo capítulo, cuando la nueva conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) realice su primer encuentro para fijar una posición institucional frente a la ola de proyectos y versiones que circulan sobre la iniciativa.

En los últimos días, el nuevo triunvirato conformado por Jorge Sola (Seguro), Cristian Jerónimo (empleados del Vidrio) y Octavio Argüello (Camioneros) se encargó de dejar en claro que "defenderemos los derechos adquiridos". Sin fisuras, los tres cotitulares y otros dirigentes de peso como Gerardo Martínez (Construcción), Andrés Rodríguez (Estatales, UPCN) y Horacio Arreceygor (Televisión y flamante secretario de Prensa de la CGT) rechazaron la idea de la Casa Rosada.

Sin embargo, en mayor o menor medida, admitieron que aceptarían una convocatoria del Ejecutivo "para debatir modificaciones, en tanto y en cuanto beneficien al trabajador y la generación de empleo". Las intenciones de impulsar una mesa de negociación están plasmadas en la asistencia de Martínez en el Consejo de Mayo, quien afirmó que seguirá participando

Martínez: "Ratifican el DNU 70/23 que fue rechazado por la justicia"

Después del último encuentro oficial, el líder de la UOCRA sostuvo que "la pretendida reforma laboral que impulsa el Gobierno, como solución a todos los males que acumula nuestro país en materia económica, no es más que la ratificación del Decreto 70/23 en su capítulo laboral, decisión inconsulta y que fuera oportunamente rechazada por la CGT y judicializado con éxito por nuestra central sindical".

Como demostración del malestar "in crescendo", a pocas horas del cónclave sindical, Sola admitió que la CGT se encuentra en un virtual estado de alerta ante la posibilidad de que la reforma avance sin la participación de quienes "tendrían las consecuencias de una ley, negativas o positivas", indicó, al tiempo que insistió con la necesidad de dialogar con el Ejecutivo, ya que "ni los empleadores ni los trabajadores" fueron consultados de manera efectiva, lo que impide "un tratamiento serio del tema".

Desde la administración libertaria trataron de bajar el tono de la contienda. El nuevo ministro del Interior, Diego Santilli, tuvo un cruce casual con representantes cegetistas durante la reciente Conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA) y les aseguró que la iniciativa oficial no contendrá muchos de los puntos que trascendieron y que preocupan al sindicalismo. El funcionario guarda vínculos directos con varios de referentes gremiales, heredados a la relación directa que tenía su padre, Hugo, empresario de la construcción, presidente de River y titular del Banco Nación en 1989 hasta 1991.

Gestiones en el Congreso y reuniones con los gobernadores

Además de acelerar contactos con el oficialismo, el triunviro se movió con determinación tanto en el Congreso, de cara a un debate que amenaza con darse en las próximas extraordinarias ya convocadas por el presidente Javier Milei, como con los gobernadores, como el cordobés Martín Llaryora. Los mandatarios provinciales restablecieron los encuentros con el Ejecutivo después del contundente triunfo libertario en las últimas elecciones. Desde la CGT temen que los mandatarios provinciales negocien beneficios para sus distritos a cambio de un apoyo al proyecto de reforma laboral.

Después de los comicios, la dirigencia sindical quedó en shock, que se tradujo en el Congreso donde se renovó el consejo directivo. La lectura que se hizo fue: "Necesitamos una central renovada, con dirigentes que inviten al diálogo" reveló una fuente gremial y agregó: "Será el gobierno el que corta los derechos de los trabajadores, en un contexto donde hay suspensiones, despidos, cierre de Pymes y salarios atrasados".

Consultado sobre una posible convocatoria de la Casa Rosada, Jerónimo declaró a iProfesional que "hasta el momento no tuvimos ningún contacto, ni oficial ni extraoficial" y advirtió que "estamos dispuestos a sentarnos en una mesa a discutir la reforma, porque nosotros también tenemos propuestas".

Sola, en tanto, destacó que en la CGT "estamos fortalecidos, unidos y con una mirada proactiva. No estamos solo para oponernos Estamos para aportar soluciones que generen más trabajo, mejores condiciones y mejores salarios" y subrayó: "Representamos a todos los trabajadores, voten al peronismo o no. Los intereses de los laburantes no tienen afiliación partidaria".