Una familia fue a comer a Güerrin y reveló lo que gastó en dos pizzas: "¿Vale la pena?"
Güerrin es, sin dudas, una de las pizzerías más reconocidas y convocantes de la Ciudad de Buenos Aires. Turistas de todo el mundo que llegan a Argentina, así como los locales, suelen hacer una parada obligatoria en sus amplios salones.
De hecho, a comienzos de año la revista británica Time Out ubicó a Güerrin entre las mejores pizzerías del mundo: quedó en el puesto 17, a partir de la votación de usuarios de redes sociales y periodistas especializados en viajes y gastronomía.
"No podés visitar Buenos Aires sin probar una porción de la pizza estilo porteño. A diferencia de las pizzas napolitanas clásicas, esta belleza se cocina en una sartén, lo que significa que la masa es gruesa, suave y esponjosa. Estas pizzas al molde también tienen que ser fuertes, ya que la masa debe soportar la generosa cantidad de queso mozzarella que rebosa de los bordes", resaltaron en la publicación.
Cuánto gastó una familia para comer en Güerrin, la famosa pizzería porteña
Con estos pergaminos es que es usual ver largas filas sobre la vereda de la calle Corrientes, donde está ubicada esta emblemática pizzería. También es muy común ver en las redes sociales decenas de videos compartidos por sus comensales.
Recientemente, se viralizó uno en el que un hombre mostró cuánto gastó para comer dos pizzas en Güerrin con su familia de cuatro integrantes.
"¿Cuánto gastamos para comer una fugazzeta grande rellena, media de cantimpalo y media de muzzarella? ¿Cuánto sale en total? Con tres cocas y una soda", le preguntó un padre a su familia, luego de pedir la cuenta en la famosa pizzería.
Después de que los miembros de la familia estimaran el total, el hombre revela: "Le sumamos un tiramisú, y el total de comer pizza para cuatro, sobrando un poquito, es $90.200".
"¿Vale la pena?", le pregunta a su hijo, quien responde afirmativamente. "Según él lo vale, porque no paga", cierra.
Algunos de los precios de Güerrin en junio, son los siguientes:
- Muzzarella clásica: $25.000
- Fugazzetta con jamón y queso: $32.100
- Napolitana (con tomate y ajo): $26.400
- Panceta y muzzarella: $32.400
- Súper Guerrín (jamón, morrones y cebolla): $34.500
- Extra Guerrín (con huevo duro): $34.500
- Muzzarella y jamón: $29.100
- Cuatro quesos (provolone, roquefort y gruyere): $42.700
A estos valores, hay que sumarle lógicamente la bebida y, depende el caso, el postre.
La historia de Güerrin, la pizzería más famosa de Buenos Aires
Fundada en 1932 y ubicada en la famosa Avenida Corrientes, Güerrín es sinónimo de pizza porteña, destacándose por su masa gruesa y generosa cobertura de muzzarella.
Se transformó por completo, de lo que fue el día de su apertura, atendiendo a una única barra para comer al paso; a atender a casi 1000 personas por día. En 2024, comer en Güerrín es una experiencia que combina tradición y sabor a precios únicos.
Durante la época dorada del teatro, el local se pobló de reconocidas figuras que pasaban a degustar una pizza e iluminaban de flashes el negocio. Desde Jorge Porcel, Alberto Olmedo, Tato Bores y hasta Susana Giménez, fueron algunos de sus ilustres visitantes.
A la barra se le sumó más adelante el salón familiar y luego el segundo piso lo que le dio capacidad para atender a más de 800 personas. Y en cada jornada, en sus cinco hornos hornean a leña alrededor de 1000 pizzas.
Sus famosas pizzas al molde se amasan a mano y llevan la salsa especial de la casa, que se hace con tomate perita, orégano, ají molido, ajo y sal. Siendo la pizza de mozzarella con fainá el clásico entre los comensales. Los fines de semana la clientela se incrementa y pueden llegar a despacharse 1.500 pizzas por día.
Comer en Güerrín no es solo una cuestión de degustar una excelente pizza, sino también de sumergirse en una experiencia única. La pizzería mantiene un ambiente bullicioso, característico de la Avenida Corrientes, donde se mezclan el ajetreo de la ciudad con la calidez del servicio. Los camareros, muchos de los cuales llevan años trabajando en Güerrín, añaden un toque de familiaridad y profesionalismo que enriquece la visita.
La decoración del lugar, con sus azulejos clásicos y carteles antiguos, transporta a los comensales a una época pasada, recordándoles la rica historia de este establecimiento. Es común ver tanto a familias locales como a turistas disfrutando de sus comidas, lo que convierte a Güerrín en un punto de encuentro cultural.
Es así que, además de turistas y personalidades, son muchos los influencers o usuarios de redes sociales que se dan cita en la emblemática pizzería porteña. Y dejan, como ya es costumbre, registro de sus visitas con fotos y videos. Y contando, claro está, cuánto gastaron para comer en Güerrin.