Toyota sigue adelante con sus planes de producción e innovación de productos, y presentó su última gran novedad: el nuevo Yaris SUV.

Se trata de una versión con nueva estética del conocido modelo de la marca, que también se comercializa en la Argentina.

El Toyota Yaris Cross llegará a los concesionarios de Europa en 2021. Es un SUV chico, del segmento B, que se caracteriza por tener motor híbrido.

La propuesta de la marca está pensada para enfrentar a vehículos como el Renault Captur, que se vende en la Argentina, y otros dos modelos que son líderes en varios mercados pero no llegaron al país: el Nissan Juke y el Skoda Kamiq.

Un Yaris hecho "Cross"

El Toyota Yaris Cross 2021 mide 4.180 milímetros de largo, 1.765 milímetros de ancho y 1.560 milímetros de alto, con una distdncia entre ejes de 2.560 milímetros. Es muy parecido al Yaris, solo que suma 240 mm de largo, 20 mm más ancho y 70 mm de alto.

Como el Yaris, también está construido sobre la plataforma GA-B, siendo el segundo modelo que usa esta arquitectura.

 

Según definen en Toyota, se diseñó teniendo en cuenta dos elementos claves: robustez y minimalismo. De esta manera, sigue el estilo de su "hermano", pero suma líneas más marcadas en el tren trasero y las llantas son de 18 pulgadas, haciéndolo más deportivo. 

Por dentro, continúa con la estética del Yaris, pero es más amplio por el espacio sumado a sus dimensiones.En tecnología, tiene sistemas activos que conforman el Toyota Safety Sense, con intervención automática en los frenos y la dirección en caso de detectar una emergencia.

Motor híbrido

El Toyota Yaris Cross 2021 se ofrecerá, por ahora, con un solo motor. Es el híbrido de 1.5 litros que entrega 116 caballos de potencia, con una eficiencia térmica del 40% que se sitúa por encima de la media. Lo comparte con el Yaris original.

Como un plus importante, ya que muchos rivales no lo ofrecen, está disponible con tracción 4x4 inteligente eléctrica y más ligera que las soluciones mecánicas convencionales.

 

La diferencia con otras opciones de tracción integral es que en condiciones de baja estabilidad, juega con la entrega de energía al eje trasero para proporcionar al conductor un plus de control. Si la situación no lo requiere, el coche se limita a la tracción delantera.