Desde que a mediados de 2016, el Bitcoin comenzó a ser conocido por el público, se elaboraron todo tipo de análisis y pronósticos sobre su presente y futuro. En esa primera instancia, un punto culminante se registró en diciembre de 2017 cuando su cotización trepó prácticamente de la nada a los 20.000 dólares. En ese momento su creador Satoshi Nakamoto se convirtió en una celebridad mundial, aunque nadie supo y en la actualidad tampoco se sabe cual es su verdadera identidad.

Por aquel entonces, en la medida que su precio se movía al alza o a la baja, el Bitcoin pasó a ser mencionado casi a diario por la prensa de todo el mundo, al igual que la increíble tecnología que lo respaldaba y que iba a revolucionar el sistema financiero mundial.

Pero luego de tocar ese techo, la criptomoneda ingresó en un período de relativa calma aunque a precios mucho mas bajos, ya que oscilaron entre los u$s3.500 y 12.000 dólares, con lo cual lejos de convertirse en una reserva de valor, pasó a ser un activo muy demandado por quienes realizan operaciones cada vez más especulativas de corto plazo.

Ese amplio "canal" horizontal se rompió a fines de septiembre de 2020, cuando de improviso su precio comenzó a crecer en forma exponencial para alcanzar hacia abril de 2021 los u$s61.000 para luego caer en cuestión de semanas hasta los 39.000 dólares.

Sin embargo, esta corrección bajista también fue de corta duración, ya que en las siguientes semanas la reacción fue también muy importante para llegar a su precio récord, que se registró el 9 de noviembre del año pasado cuando rozó los 69.000 dólares.

Bitcoin llegó a rozar los u$s70.000. Actualmente llegó a registrar un precio de u$s16.000.

Todo esto en un contexto en el que el denominado Índice de Miedo o Avaricia del Bitcoin se ubica en torno de los 25 puntos, lo que representa una situación de miedo extremo y predice un mercado "bearish" para el futuro cercano.

La eterna discusión parece tener una respuesta

A lo largo de su vida el Bitcoin fue fuente de grandes discusiones, pues por un lado sus defensores argumentan que es el instrumento más idóneo para operar en el mundo de las finanzas lejos de las regulaciones que pueden imponer los bancos centrales. En tanto que sus detractores afirman que se trata de una clásica burbuja financiera cuyas consecuencias son muy difíciles de evaluar.

Sobre este punto, para Bill Gates se trata de un producto que no genera ningún tipo de resultado valioso o aporte al desarrollo tecnológico mientras que su alto valor especulativo lo vuelven extremadamente peligroso.

"El valor de una empresa se basa en el producto que fabrica, pero en el caso de las criptomonedas solo importa cuanto están dispuestos a pagarte por ese criptoactivo", criticó el magnate.

Quienes sostienen que se trata de una burbuja apelan por lo general a un gráfico en el que se describe en forma visual cómo se desarrolla una burbuja financiera y cual es el futuro de la misma, al menos en el corto o mediano plazo. El gráfico en cuestión es el siguiente:

Este es el proceso por el cual se desarrolla una burbuja financiera.

Si se observan ambas infografías, se puede concluir que existe una marcada correlación entre ambas, según la cual, desde el punto de vista de teórico, en la actualidad se estaría atravesando un periodo que se denomina de "capitulación".

De ser así, para los próximos meses cabría esperarse que continúen las bajas, sin que ello deje abierta la posibilidad de que en algún momento el precio comience a recuperarse y se estabilice en línea con lo que se denomina el "regreso a la media", que podría ubicarse en torno de los 13.000 a 15.000 dólares.

Sobre este punto, quienes analizan el mercado desde el punto de vista técnico sostienen que "una vez perforado el nivel de los u$s18.200 iríamos a un Bitcoin en u$s13.800". Ya pensando en el largo plazo, para un conocido trader a partir de este piso su precio superará los 100.000 dólares el próximo año, pero le seguirá un mercado bajista que batirá récords.

En una discusión en Twitter, Credible Crypto respaldó la teoría de que el próximo "halving" de Bitcoin también verá macro mínimos de solo 10,000 dólares.

Siguiendo en materia de predicciones, desde ya que hay para todos los gustos. Por ejemplo, Tim Draper, que es un reconocido capitalista de riesgo de Silicon Valley, pues es un inversor temprano en compañías como Skype, Tesla, SpaceX, Twitter, Coinbase y Robinhood, entre otras, sostuvo en medio de esta contracción de los precios que "a mediados de 2023, espero ver que Bitcoin alcance los $250,000".