Enfocada en avanzar con la desarticulación de la operación local, la cúpula de LATAM informó que no se quedará de brazos cruzados ante la decisión del Gobierno de rechazar el pedido de Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC). Desde la aerolínea confirmaron la decisión de apelar el revés propinado por la cartera de Trabajo, que en lo legal destierra la posibilidad de imponer despidos, abonar indemnizaciones reducidas, y obliga a la empresa a sostener las relaciones laborales sin cambios además de continuar pagando los salarios.

Durante la tarde del martes, el ministerio que encabeza Claudio Moroni emitió un breve comunicado dando cuenta de la respuesta negativa a la solicitud de la aérea.

"Visto el Dictamen que antecede, que esta Dirección Nacional comparte con criterio resolutivo y cuyos fundamentos remite, corresponde rechazar la apertura del Procedimiento Preventivo de Crisis presentado por la empresa LAN Argentina Sociedad Anónima", se notificó desde la dependencia oficial.

Del lado de LATAM la respuesta no se hizo esperar. "Esta determinación será apelada por la compañía entendiendo que la presentación original constituye un caso claro de fuerza mayor. (...) La compañía ratifica que ha cumplido cada uno de los procedimientos legales y administrativos que corresponden a esta situación y reafirma su voluntad de apelar la decisión del Ministerio de Trabajo, en tanto la solicitud del PPC está claramente justificada por una causa de fuerza mayor, constituida por el brutal impacto de la pandemia Covid-19 en las operaciones aéreas", replicó vía un comunicado al que accedió este medio.

Ante la consulta de iProfesional, fuentes vinculadas a la aerolínea señalaron que LATAM ya comenzó a desmontar sus oficinas comerciales en la Argentina, incluida la devolución de los locales que ocupaba. La firma también avanza con la entrega de los espacios que explotaba en los distintos aeropuertos del país.

En concreto, indicaron desde la empresa, LATAM ya "levantó" el grueso de su estructura operativa en Buenos Aires, Iguazú, Bariloche, Salta, Tucumán, Mendoza, Córdoba, Neuquén, Comodoro Rivadavia, El Calafate, Ushuaia y Río Gallegos.

El rechazo al pedido de PPC llega de la mano del fracaso de la compañía en su intento por alcanzar un cierre económico con su plantel de empleados para, justamente, hacer efectivo el cese de operaciones comunicado en junio.

"Luego de siete audiencias en el ámbito de la cartera laboral no se pudo lograr un acuerdo" con los trabajadores, se reconoció desde la empresa. Aunque, aclararon desde LATAM, "el 50% de los colaboradores -empleados- de la compañía procedió a la firma de un acuerdo individual de reducción voluntaria de salario".

La firma reconoció que no pudo llegar a un acuerdo luego de siete audiencias con los trabajadores.

Meoni dice que no se va del todo

La decisión oficial de no otorgar el PPC solicitado por LATAM ocurre muy pocas horas después de que Mario Meoni, titular de la cartera de Transporte, asegurara que la aerolínea mantiene hasta ahora sus rutas y que, eventualmente, "en cualquier momento podría volver a retomar" los vuelos.

Los dichos de Meoni llegaron en un momento de extrema tensión en torno a la decisión de la compañía de desarticular su operación local. En ese marco, trabajadores de la aerolínea cumplen una semana de instalados en el hangar que la empresa posee en Aeroparque con el fin de evitar que LATAM mueva sus aviones con dirección a Santiago.

"La empresa no está pidiendo el cierre de la actividad, sino la suspensión. A diferencia del cierre, no pierde las rutas por una determinada cantidad de tiempo", reafirmaron desde Transporte ante la consulta de iProfesional.

Durante la mañana del lunes, el ministro pronunció palabras en igual dirección. "Cesar actividades no es cerrar actividades: en términos aeronáuticos significa una suspensión de las rutas y la empresa las puede retomar u operar en cualquier momento. Las rutas no las pierde, siguen siendo de LATAM Argentina", declaró.

Según Transporte, la aerolínea perdió cerca de 250 millones de dólares sólo en los últimos dos años.

Acampe en Aeroparque

A la par de la posición de Transporte, los más de 1.700 empleados de la compañía siguen en pie de guerra con vistas a garantizar la continuidad de los puestos de trabajo.

En ese tren, y desde hace una semana, una veintena de mecánicos permanece en el hangar de la compañía en la terminal porteña con el objetivo de evitar que LATAM mueva hacia Santiago de Chile la media docena de aviones que mantiene en tierra en esta parte del país.

Según pudo saber iProfesional de fuentes gremiales, las instalaciones de la compañía en el Aeroparque cuentan con guardia permanente de Gendarmería Nacional y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

"Los mecánicos metieron un amparo para que la empresa no se lleve los aviones. La cautelar todavía no salió. Se viene un acampe. Está en el plan", anticiparon las voces interpeladas.

"Somos unos 300 afuera, cortando Costanera, desde hace una semana. Vamos a estar un mes, un año, lo que sea, si hace falta", concluyeron.