La posibilidad concreta de que el DNU fijado por Javier Milei se caiga, mantiene inquietas a las inmobiliarias. Ocurre que, de imponerse la oposición al decreto, el traslado de la discusión a Diputados abriría la opción de un nuevo revés para el Ejecutivo que volvería a cambiar las reglas para el mercado locativo residencial. En concreto, reconocen los comercializadores, una eventual "caída" del DNU colocaría en el status de vigente a la ley de alquileres "dada de baja" a fines de diciembre. Es decir, volverían a celebrarse contratos por tres años y con ajuste anual por ICL. En el sector del ladrillo dan por descontado que un retorno a ese régimen legal afectará la recuperación que viene exhibiendo la oferta, y que aplicará más presión a los precios vigentes.

Si bien la única forma de derogar el DNU establecido por Milei es que sea rechazado en ambas cámaras del Congreso, el revés en el Senado traslada toda la presión política y social a Diputados, que aún no estableció cuándo tratará el decreto. En las inmobiliarias temen que lo que ocurra entre los senadores encuentre eco, a partir del malhumor social derivado de los ajustes aplicados por el Gobierno, en los legisladores de la cámara restante y se derriben todos los cambios aplicados.

"Nuestro planteo respecto de la ley de alquileres, la posibilidad de la derogación, tenemos para decir que el mercado se está recuperando, está funcionando bien. Le estamos dando solución habitacional a los potenciales inquilinos que se acercan", comentó a iProfesional Marta Liotto, expresidenta del Colegio Profesional Inmobiliario (CPI).

"Sería un retroceso importante que se caiga la derogación de la ley de alquileres", añadió. La experta señaló que el sector "está tratando de llegar a los senadores explicándoles este tema y les hemos enviado notas indicando el éxito que estamos teniendo".

"Poco a poco se van acomodando los alquileres en Capital Federal. Queremos que los senadores lo tengan en cuenta, por las dudas de que esto se caiga definitivamente. Y después podamos dar un revés desde otro lugar", dijo.

Liotto dijo que las inmobiliarias buscan "plantar esta posición", de ahí que los comercializadores les están "haciendo llegar a los senadores, a sus despachos, detalles del funcionamiento y el acomodamiento paulatino de lo que es el tema habitacional en cuanto al alquiler de viviendas".

Las inmobiliarias señalan que la eventual derogación del DNU afectará la oferta.

Qué pasará con los contratos firmados tras el DNU

Dada la posibilidad cierta del retorno de la ley, un interrogante que cobra fuerza ya en el segmento de los inquilinos corresponde a la duda respecto de la vigencia de los contratos que se cerraron bajo el paraguas del DNU.

En ese sentido, desde la Cámara de Propietarios de la Argentina se aclaró que, de caerse el DNU, no habría una aplicación retroactiva del nuevo régimen, por lo que los acuerdos establecidos en estos meses continuarán rigiéndose según lo pactado hasta el final de cada contrato en curso.

De ocurrir la derogación, el escenario de alquileres quedará conformado por inquilinos con contratos establecidos bajo la ley de 2020, personas que cerraron acuerdos a partir de los cambios al marco aplicados en 2023, y contratos concertados a partir del DNU.

La oferta, con un incremento inédito

La derogación de la ley de alquileres promovió cambios en el mapa inmobiliario porteño y se multiplican los actores que dan cuenta de la ampliación que atraviesa la oferta de departamentos. Solo en lo que va del año el stock de inmuebles que se ofrecen creció casi 200% y la perspectiva es de un aumento mayor durante la primera mitad del año.

En la vereda de enfrente se ubican los valores, que no dejan de subir, aunque, señalan actores de la comercialización, a un menor ritmo producto del impacto negativo en los bolsillos que viene originando la crisis económica. Para quienes alquilan bajo el paraguas de la ley anterior, marzo inició con una suba del orden del 165,51%.

Según un monitoreo de Reporte Inmobiliario al que accedió iProfesional, el volumen de unidades disponibles para alquilar en Capital Federal pasó de 1.169 departamentos a 1.569 solo en las últimas semanas. El número triplica el stock constatado en diciembre pasado.