La inflación de 5,1% de diciembre es un motivo lógico de preocupación para el Gobierno, pero también tiene un impacto político que amenaza los planes que ya empezaban a realizar en el Frente de Todos de cara a las elecciones presidenciales, en los que el ministro de Economía, Sergio Massa, empezaba a erigirse como una pieza fundamental.

El problema adicional que le planetea el último índice de precios al oficialismo es que llevó a Massa a despegarse inmediata y públicamente de las versiones sobre una eventual candidatura presidencial, justo en momentos en que todas las encuestas que empezaron a publicarse en el último mes lo ubican como la figura más competitiva del Frente de Todos.

Los sondeos de intención de voto le dan la razón al grupo de gobernadores, intendentes bonaerenses, sindicalistas y hasta una parte del kirchnerismo que empezaban a ver en Massa una esperanza de llenar el vacío generado por la derrumbada imagen del presidente Alberto Fernández y el "renunciamiento" de la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Sin embargo, el ministro le puso un límite a las especulaciones: "No me suban a otra carrera, porque la nuestra es una carrera para bajar la inflación", afirmó durante el acto que encabezó el pasado jueves en Entre Ríos, donde incluso retó a su secretario de Industria, José De Mendiguren, por haber alentado su candidatura. Un mensaje hacia dentro del propio oficialismo.

La inflación y el problema electoral para el oficialismo

En rigor, cerca de Massa no cambió nada. Por el contrario, ratifican lo que sostienen hace meses: que "no está pensando en una candidatura" y solo se concentra "en la gestión". Meses atrás, trascendió que el ministro afirmaba incluso en privado que no jugaría en este turno electoral, lo que se sumaba a las razones familiares que adujo en público.

Pero otras fuentes del oficialismo consultadas por iProfesional acusaron recibo y evalúan que si no logra consolidar la baja de la inflación es posible que decida mantenerse al margen de la campaña electoral y ver qué pasa de cara a 2027, a pesar de que distintos actores ya habían empezado a ponerle fichas.

Massa se despegó de las especulaciones electorales y puso en dudas los planes de un sector del oficialismo 

Si bien Massa afirmó que con el número de diciembre "se continúa con el camino descendente", el 5,1% (que macó un 94,8% acumulado en 2022) no es lo que esperaba y, en comparación con el 4,9% de noviembre, lo muestra un poco más lejos del objetivo de lograr un 3% para abril, que es cuando empezarán a definirse las candidaturas del oficialismo y de la oposición.

Con un dólar paralelo que le mete todavía más presión a su gestión, al experimentar una suba del 6% solo en lo que va de enero, el ministro se apura a bajarle el tono a las especulaciones electorales que surgen desde el propio oficialismo pero, en medio de su intento, aparece una nueva encuesta que ratifica el problema electoral que esto engendra.

Se trata de un sondeo de Raúl Aragón & Asociados sobre 1.500 consultados y muy reciente, del 5 de enero. El estudio le dio a Massa una intención de voto de 24,8% y lo ubicó en el segundo lugar de las preferencias detrás del jefe de Gobierno porteño y referente de Juntos por el Cambio, Rodríguez Larreta, con 29,1%.

Nueva encuesta a favor de un Massa en duda

Ante la pregunta "Si mañana fueran las elecciones generales para elegir presidente ¿a quién votaría entre los siguientes candidatos?", la encuesta de Aragón mostró a Rodríguez Larreta primero, a Massa segundo y al libertario Javier Milei tercero, con 18,3%.

Al cambiar las opciones y poner a Patricia Bullrich en lugar de Larreta, la presidenta del PRO también sale primera (incluso mejor que el alcalde porteño) con 34,3% y, nuevamente, Massa quedó segundo con 23,5%.

El dato central es que ese orden coincide con el que exhiben otros trabajos recientes sobre intención de voto como el de la consultora Zuban Córdoba, que lo midió incluso para un posible balotaje y, tanto contra Larreta como contra Bullrich, consiguió mejores números que otras figuras del oficialismo.

El ministro aparece en todas las encuestas mejor posicionado que otros "presidenciables" del Frente de Todos

En el sondeo de Raúl Aragón, Massa mostró una intención de voto, entre seguro y posible, de 37,6% y un 45,4% que nunca lo votaría, mientras que Alberto Fernández obtuvo un 32,1% contra un 58,8% y Cristina Kirchner un 30,1% contra un 60,9%.

El Frente de Todos y el desafío de la competitividad electoral

A pesar de tener un nivel alto de imagen negativa, los números del ministro en ese aspecto también son mejores que los del Presidente y la vice. Un reciente sondeo de Management & Fit le dio un 24% de positiva y un 57% de negativa, mientras que Cristina Kirchner tuvo un 26,8% de positiva y un 64,6% de negativa. En el diferencial, Massa salió mejor. El Presidente, en tanto, quedó muy por debajo de ambos.

Si bien todas las encuestas son muy preliminares cuando faltan 7 meses para las primarias (PASO), se advierte un patrón: Massa corre con ventaja frente a sus socios del Frente de Todos y otras figuras "presidenciables" como Daniel Scioli, por el centro, o el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, por el kirchnerismo más puro.

Además, el solo hecho de aparecer en las encuestas sirve -tanto al titular de la cartera económica como a cualquier otro dirigente político- como "instalación", es decir, se genera una expectativa sobre la eventual candidatura y se eleva el nivel de conocimiento y consideración de la figura en cuestión independientemente de cuál sea su intención.

En este sentido, el dato de inflación y la rápida salida de Massa para desmentir versiones periodísticas y marcar límites al sector del propio oficialismo que agita su candidatura plantea un desafío para el Frente de Todos.

Y es que el oficialismo busca candidatos competitivos que le otorguen, si no una victoria, al menos una derrota en la que pueda preservar la mayor cuota de poder posible para ser oposición en el futuro. Además, Massa es considerado por en algunos sectores del Frente de Todos como un posible candidato de unidad. Según versiones que circularon en las últimas semanas, ambas cosas serían tenidas en cuenta por Cristina Kirchner, inevitable elctora.

El ministro sigue apostando a lograr una baja sensible para abril, un mes clave de cara a las elecciones 

¿Qué dijo Massa tras conocer el dato de inflación?

Cuando el INDEC informó el último jueves que la inflación acumulada de 2022 fue 94,8% Massa se encontraba en Entre Ríos para participar de un acto de gestión junto al gobernador Gustavo Bordet. Allí reiteró que no está en una "carrera" electoral y contradijo a propios y extraños.

"Mi carrera en este momento, con la responsabilidad que tengo, es una carrera para bajar la inflación, para hacer crecer a la Argentina. Porque bajar la inflación no puede suponer enfriar la economía y es una carrera para seguir ese camino de 22 meses consecutivos de generación de empleo", sostuvo Massa.

Para agregarle contundencia al mensaje, aprovechó la presencia de De Mendiguren, que también había hablado sobre su potencialidad como eventual candidato y señaló: "Hasta vos, vasquito, perdón que te lo reproche, opinaste sobre el tema de la carrer".

"Te suben a lugares que, por ahí, es para aquellos que tienen tiempo para pasearse por las playas en lugar de estar trabajando por sus ciudades y sus provincias, y de toda la Argentina", lanzó además el ministro en lo que pareció una alusión a los numerosos dirigentes que recorrieron Mar del Plata en los últimos días. Scioli y Larreta estuvieron entre ellos.