Se acerca el pago de sueldos y aguinaldo y Kicillof no tiene la plata: ¿Buenos Aires tendrá un buen fin de año?
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La tensión entre el Gobierno deJavier Milei y la administración de Axel Kicillof escaló a niveles críticos tras el rechazo nacional al endeudamiento provincial. Los gremios estatales bonaerenses alertaron sobre el riesgo que corre el pago del aguinaldo de diciembre, mientras crece la incertidumbre sobre las negociaciones paritarias.
La Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) encendió las alarmas al sumarse a la lista de sindicatos que exigen la reapertura urgente de paritarias. La organización gremial planteó una demanda concreta: que el aguinaldo de diciembre se abone en tiempo y forma, sin ningún tipo de desdoblamiento.
La decisión del Gobierno libertario de no autorizar la colocación de nueva deuda, votada el jueves 4 de este mes por la Legislatura bonaerense, generó un escenario de máxima tensión. Los trabajadores estatales enfrentan ahora la posibilidad de que sus salarios complementarios se vean afectados por esta disputa política de alto voltaje.
Fabiola Mosquera, secretaria General de UPCN, fue categórica en su reclamo. La dirigente sindical solicitó que "se hagan todos los esfuerzos posibles para cumplir en tiempo y forma con el pago del aguinaldo", que debería depositarse el próximo 18 de diciembre.
Sueldo y aguinaldo: Axel Kicillof y gremios bonaerenses, en alerta
Mosquera fundamentó la urgencia del pedido en "la difícil situación económica que atraviesan todos los trabajadores del Estado". La líder gremial subrayó que resulta imprescindible preservar certezas salariales en un contexto de alta volatilidad económica.
La dirigente sindical insistió en que la Provincia debe garantizar la continuidad de la negociación paritaria correspondiente a diciembre. Estas discusiones quedaron suspendidas mientras se tramitaba la autorización del nuevo endeudamiento en el Congreso Nacional.
El reclamo de UPCN no quedó aislado. La Federación de Gremios Estatales y Particulares de la Provincia de Buenos Aires (FEGEPPBA) pidió formalmente al Ministerio de Trabajo la reactivación inmediata de la negociación salarial bajo la Ley 10.430.
Por su parte, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) recordaron que en su última reunión con el Ejecutivo kicillofista no hubo oferta salarial. Las organizaciones consideran "imprescindible" retomar la discusión para recomponer ingresos en línea con la inflación acumulada.
El trasfondo del conflicto por la deuda provincial
El escenario salarial quedó completamente atravesado por la disputa entre la administración de Kicillof y el Gobierno de Milei. El enfrentamiento se centra en el endeudamiento autorizado por la Legislatura bonaerense por hasta 3.685 millones de dólares.
Aunque el oficialismo provincial logró aprobar la solicitud de financiamiento, la Casa Rosada ya anticipó su posición. El Gobierno nacional sólo habilitará operaciones de refinanciamiento, pero no la toma de recursos frescos.
Esta restricción condiciona severamente el margen fiscal con el que la Provincia debe encarar dos desafíos cruciales: el pago del aguinaldo y la reapertura de las paritarias. Los números no cierran y la tensión social crece día a día.
La advertencia de UPCN encendió señales de alarma entre los estatales bonaerenses. La organización subrayó que la incertidumbre sobre la fecha de pago del salario anual complementario resulta particularmente crítica en un fin de año marcado por el deterioro del poder adquisitivo.
El impacto de la inflación en bienes esenciales como alimentos y medicamentos agrava la situación. Mosquera remarcó que los trabajadores esperan una respuesta inmediata y que no aceptarán demoras que comprometan su situación económica.
Los gremios presionan por una solución inmediata
Los sindicatos de estatales bonaerenses señalan que la resolución del conflicto por el endeudamiento resulta clave para destrabar la discusión salarial. Las organizaciones recordaron que acompañaron políticamente la iniciativa del Ejecutivo provincial.
Incluso movilizaron a sus afiliados hasta la Legislatura para reclamar la aprobación del proyecto de financiamiento. Ahora, esos trabajadores exigen que ese respaldo político se traduzca en garantías concretas.
Los gremios demandan dos cosas: la garantía del pago del aguinaldo y aumentos que permitan recuperar el ingreso perdido. Sostienen que el Estado debe "dar una señal clara" de compromiso con sus empleados en medio de esta crisis.
Las organizaciones sindicales coincidieron en que la prioridad inmediata es asegurar el depósito del medio aguinaldo de diciembre sin dilaciones. También buscan retomar las negociaciones paritarias con propuestas concretas de recomposición salarial.
La amenaza gremial es explícita: si el Gobierno provincial no avanza en ese sentido, evaluarán nuevas medidas de acción sindical en las próximas semanas. La escalada del conflicto parece inevitable si no hay respuestas inmediatas.
Axel Kicillof salió al cruce de las críticas de Luis Caputo
El viernes pasado, el gobernador Axel Kicillof salió al cruce del ministro de Economía, Luis Caputo, quien había criticado duramente la aprobación del Proyecto de Financiamiento por parte de la legislatura bonaerense.
El líder peronista desestimó las críticas con una respuesta contundente y cargada de ironía: "Que lo aprueben ni bien lo mande. Rapidito Toto". La frase se viralizó inmediatamente en las redes sociales como un desafío directo al Gobierno nacional.
Kicillof fue categórico en su defensa: "Lo que yo digo es que ayer no se aprobó endeudamiento. La ley se llama refinanciamiento, y simplemente cubre los vencimientos que tiene la provincia del endeudamiento que viene de la época de Vidal".
El gobernador bonaerense no dejó lugar a medias tintas en su respuesta a las críticas nacionales. "Que apruebe todo lo que tiene que aprobar, porque ya más lío no nos pueden armar. Nos deben 13.000 millones de pesos, así que no sé ni qué hablan los libertarios", explicó con visible molestia.
Sin embargo, Kicillof parece no contemplar un aspecto crucial del conflicto. La llamada Ley Guzmán, que lleva el nombre del ex ministro de Economía, no permite a las provincias con déficit fiscal tomar endeudamiento.
Además, existe una ley del 2004 del Gobierno de Néstor Kirchner que también prohíbe ese tipo de endeudamiento. El marco legal complica severamente las aspiraciones financieras de la administración bonaerense.
Las acusaciones cruzadas entre Provincia y Nación
Según legisladores libertarios bonaerenses, lo más grave del asunto fue la negociación previa que llevó adelante Kicillof para lograr aprobar ese endeudamiento por unos 3.900 millones de dólares.
El gobernador contraatacó con dureza: "Hay legisladores libertarios de la provincia de Buenos Aires, que vayan a pedirle a sus amigos y socios que nos devuelvan la plata que le robaron a la provincia, en vez de hablar acá de qué tenemos que hacer nosotros".
Kicillof volvió a reclamar que desde el gobierno provincial continúan reclamando ante la Corte Suprema de Justicia. El mandatario confía en que el máximo tribunal le está dando la razón a todas las provincias en conflictos similares.
El gobernador espera que pronto los reciban en audiencia: "Entonces nos devuelva Milei lo que le robó, no a este gobernador, no a este gobierno, sino a los y las bonaerenses".
La discusión trasciende lo meramente financiero según Kicillof. "Esto no estamos hablando de tema financiero, estamos hablando de los móviles de la policía, que se pagaban con recursos, el fondo de seguridad que nos pasaba Nación y que Milei se robó".
El mandatario provincial acusa al Gobierno libertario de generar "ese presunto falso superávit" en base a plata que no les da a los jubilados, que no le da a la Provincia, que no hace las obras y no las termina.
Las críticas del Gobierno que desataron la controversia
Las palabras de Kicillof llegaron en respuesta directa a las críticas que formuló el ministro Caputo durante una entrevista televisiva en A24. El funcionario nacional apuntó sin medias tintas contra el gobernador bonaerense.
"Buenos Aires no está cumpliendo con la Ley de responsabilidad fiscal", lanzó Caputo, y advirtió que "técnicamente, lo que es deuda nueva hoy no debería estar sujeta a aprobación porque no está cumpliendo con la ley".
Según el diagnóstico del ministro, la provincia "está aumentando los gastos corrientes por encima de la inflación". Este desvío es algo que el equipo económico nacional viene marcando desde hace meses en las reuniones con los gobernadores.
Caputo enmarcó el conflicto dentro de la discusión más amplia sobre el "costo argentino". El funcionario sostiene que parte de esa carga se concentra en los niveles subnacionales, no en la Nación.
"Este es uno de los problemas cuando hablamos del costo argentino, que está mucho más concentrado hoy en municipios y provincias que en Nación. Nosotros bajamos impuestos y estabilizamos la macro", explicó el ministro.
La situación de Kicillof se complica aún más para acceder a los mercados financieros. La administración bonaerense necesita conseguir los avales de la Nación, que en el último tiempo le permitió a la Ciudad de Buenos Aires, a Córdoba y a Santa Fe tomar nueva deuda en los mercados internacionales.
El Gobierno ratifica su postura de no autorizar nueva deuda
Manuel Adorni, ahora como Jefe de Gabinete de ministros, volvió a reiterar ayer en su conferencia de prensa habitual que el Gobierno de Milei no autorizará a Kicillof a tomar nueva deuda en los mercados porque no cumple con los requisitos necesarios.
El sábado pasado, el ministro Caputo había sido contundente al afirmar que no convalidarán la deuda que pretende tomar el gobernador bonaerense. La posición del Gobierno nacional es inflexible en este aspecto.
"En la ley de responsabilidad fiscal de 2004 las provincias se comprometen a no tomar deuda siempre y cuando los gastos corrientes superen la inflación", explicó Caputo.
El funcionario agregó que "Buenos Aires no está cumpliendo", por lo que la deuda nueva no debería estar sujeta a aprobación. La provincia está aumentando los gastos corrientes por encima de la inflación, violando los compromisos asumidos.
La reciente modificación aprobada por la legislatura provincial incumple con los lineamientos de la Ley Nacional 25.917 de Responsabilidad Fiscal. Esta normativa recomienda evitar el aumento permanente del gasto corriente sin correlato en la mejora de los servicios públicos.
Además, la ampliación del directorio del Banco Provincia de Buenos Aires de 8 a 14 directores incrementa el gasto público sin aportar eficiencia ni mayor cobertura territorial. Esta medida se aparta de los compromisos provinciales con la austeridad y la buena administración.
La defensa provincial ante las acusaciones nacionales
Desde la Provincia afirman que el objetivo del endeudamiento es refinanciar pasivos e invertir en obra pública. Niegan categóricamente que se busque cubrir gastos corrientes y advierten que cumplen con los requisitos de la Ley de Responsabilidad Fiscal.
"Si el gobierno nacional dice 'no le autorizo el endeudamiento porque no me gusta lo que piensa el gobernador', habrá que denunciarlo", afirmó el Jefe de Gabinete provincial, Carlos Bianco.
Bianco explicó que el déficit de la provincia se justifica por las obras públicas que están ejecutando. "Si nosotros dejáramos de hacer obra pública, podríamos tener superávit primario o financiero, pero no estamos de acuerdo", sentenció el funcionario.
El jefe de Gabinete bonaerense defendió la gestión provincial: "Nosotros trabajamos para lo que la gente nos pide". Criticó la falta de colaboración del Gobierno nacional en temas como la adhesión a leyes como la ley antimafia.
Bianco lanzó una dura acusación contra los legisladores libertarios: que lo único que les importa es que al Gobierno provincial le vaya mal y a los bonaerenses les vaya mal. La grieta política se profundiza día a día.
El primero en anticipar la posición nacional fue Sebastián Pareja, titular de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires. El dirigente reveló que Milei no acompañaría el nuevo endeudamiento un día después de la sesión legislativa.
"Kicillof puso toda la carne en el asador para tener una Provincia endeudada por dos años y tener su carrera presidencial. Acaban de tirarle un litro de nafta a una casa que estaba prendida fuego", sentenció Pareja sin contemplaciones.
La crisis entre la Provincia de Buenos Aires y la Nación se profundiza mientras los trabajadores estatales observan con creciente preocupación si cobrarán sus aguinaldos. El conflicto político de alto voltaje entre Kicillof y Milei pone en riesgo los ingresos de miles de familias bonaerenses que dependen del Estado provincial para subsistir.