El sueldo de los ejecutivos perderá frente a la inflación: cómo será la proyección para este año
A pesar de que el nivel de inflación parece haber comenzado un proceso de lento retroceso, el costo de vida sigue siendo alto en comparación con los salarios que pagan las empresas a su personal, aun teniendo en cuenta las negociaciones paritarias.
En el acumulado de los primeros tres meses del año, la inflación llega al 51,6%, con la última medición de marzo en torno al 11% y una proyección para este mes de abril de un dígito.
Sin embargo, la mayoría de las empresas saben que deberán otorgar aumentos salariales cercanos o en sintonía con la inflación del 2024 que, más allá de la desaceleración, se seguirá ubicando en las tres cifras según lo pronostican los expertos que habitualmente consulta el Banco Central para elaborar su tradicional Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM).
De acuerdo al informe, la inflación llegará a 210% interanual en diciembre próximo que, si bien sigue siendo preocupante, muestra una mejora en el análisis del 16,9 puntos porcentuales con respecto al diagnóstico previo.
En este contexto, la mayoría de las empresas planea otorgar durante el año incrementos salariales que, a fines del 2024, marcarán una pauta de subas del 198%, con subas en el segundo semestre de entre un 23% y 44%.
La proyección de incrementos del primer trimestre no presenta grandes variaciones, ubicándose en torno al 52%, en tanto los trimestres posteriores se mantienen estables, sin grandes cambios.
Costos más altos
En cuanto a la cantidad de aumentos, el 34% de las empresas prevé seis y el 22% cree que otorgarán ocho incrementos o más en el año, aunque se observa una gran dispersión en las previsiones de incrementos por industria.
Los datos surgen de la última edición de la encuesta TISA de Mercer, consultora global líder en recursos humanos, que advierte que el acumulado para este año de retoques salariales no llegará a emparejar las proyecciones inflacionarias.
La consulta se llevó a cabo desde el 11 al 18 de marzo 2024; 506 compañías con operaciones en el mercado argentino con estimaciones salariales de las empresas en el país.
Es decir, como suele ocurrir de manera habitual, otra vez los salarios perderán poder adquisitivo y no llegarán a cubrir los costos que estarán por encima de lo proyectado por los ejecutivos.
De acuerdo al documento, "el valor muestra una brecha inferior a las expectativas de inflación anual reportadas por las mismas compañías, que rondan el 210%". De la encuesta, que recibe la opinión del personal fuera de convenio o de ejecutivos empresarios, participaron cerca de 500 compañías de distintos segmentos del mercado.
Nacionales versus multinacionales
El panorama macroeconómico actual y el contexto de relativa incertidumbre continúa representando un reto para las compañías a la hora de ofrecer proyecciones para el año, aclara el paper de Mercer.
En este contexto, y siempre de acuerdo al relevamiento, las empresas con casa matriz en Argentina han reaccionado de manera más ágil al contexto, garantizando para el mercado general una cantidad de incrementos superiores a las compañías subsidiarias de multinacionales.
Por otro lado, el porcentaje a otorgar ha subido para las multinacionales y solo presenta una brecha de 2% respecto de las casas matrices nacionales.
Cuando se preguntó cuál es el criterio para definir los aumentos salariales, el 51% respondió que utilizaba una combinación de varios factores, mientras que un 20% lo hace a través del mercado.
No obstante, hay un grupo de alrededor del 15% que aplica directamente la inflación a la hora de definir estos incrementos.
Al respecto, Marcelo Jalil, gerente de Career y Rewards en Mercer Argentina, Uruguay, destaca que las proyecciones de subas salariales para este año no son diferentes a las del anterior reporte que fue presentado en enero pasado.
"Esto es una buena noticia, ya que hace mucho tiempo no veíamos estabilidad entre las estimaciones del mercado entre una edición y la otra", afirmó el ejecutivo.
Amplitud muy alta de los aumentos
Lo que sigue llamando la atención a los autores del reporte es la dispersión de los aumentos a otorgar por el mercado en este año. Más allá de que la mediana se sitúe en 198%, es interesante remarcar que el 25 y 75 porcentuales son 170% y 226% respectivamente.
Es decir, la muestra refleja una amplitud muy alta entre los valores que se explica, principalmente por las diferentes realidades que están atravesando las empresas.
En relación con esto, los rubros que siguen liderando el ranking son logística (241%), servicios financieros (239%), minería (216%), algunas compañías del rubro energético (215%) e ingeniería y construcción (214%).
En cuanto a la cantidad de incrementos, sigue siendo un tema muy relevante para los trabajadores de las compañías, al mismo nivel que el porcentaje otorgado.
Con una frecuencia alta de instancias de aumentos, cada compañía se asegura que el empleado no perciba la pérdida de poder adquisitivo y por consecuencia, no afecte su compromiso ni rendimiento respecto a sus responsabilidades.
Actualmente, la prevalencia es de seis incrementos (34%), es decir, uno cada dos meses; y en segundo lugar, de ocho o más (22%).
"Vale la pena remarcar, también, que solo el 18% del mercado analizado ofrece a sus colegas cuatro o menos instancias de ajuste salarial", aseguró Jalil.
Disyuntivas y salud
Desde el punto de vista del ejecutivo de Mercer, los equipos de recursos humanos están gestionando el corto plazo, sin perder el foco en el largo plazo.
La disyuntiva principal radica en las estimaciones de inflación y actividad económica del 2024, lo que invita a preguntarse si:
- ¿Podrán los negocios acompañar estos valores de inflación e incrementos salariales si sigue cayendo su facturación?
- Si la inflación disminuye como está planificado, ¿tiene sentido mantener esta frecuencia de ajustes?
Pero, además del tema estrictamente salarial, gran parte de las empresas están revisando su política y oferta relacionada con salud.
Al respecto, opinó Jalil que "los incrementos de precios planteados por las prepagas y otras dinámicas generadas por los cambios propuestos por el Gobierno hicieron de los beneficios relacionados con la salud un costo significativo para el presupuesto y, además, no previsto a fines del año pasado".
El ejecutivo de Mercer considera que este contexto obliga a las compañías a profundizar en el análisis de costos, planes y alcance de este beneficio, y a utilizar eficientemente sus recursos para seguir ofreciéndole a sus empleados el beneficio, por lejos, más valorado.
Incrementos por industrias
Según los resultados de la encuesta TISA#3, las industrias que prevén otorgar incrementos por encima del mercado general son Logística, Servicios Financieros, Minería, Energía, Ingeniería y Construcción, High Tech (Servicios y Soluciones de asesoría de TI), Dispositivos y equipos médicos, Retail, Química, Consumo Masivo, Biotecnología, Farmacéutica y Packaging. Por el otro lado, High Tech (servicios de telecomunicaciones y productos Hardware y Software), Automotriz, Fintech y Medios y Entretenimiento son las industrias que menor aumento pronostican dar.