Batalla por las represas: vencen prórrogas y Milei estatizará para luego reprivatizar sin intervención provincial
Vuelve la tensión entre las provincias patagónicas y la Casa Rosada. A menos de 10 días de finalizar las prórrogas establecidas por el Gobierno nacional a las concesiones hidroeléctricas de Neuquén y Río Negro, la decisión del oficialismo de definir el destino de las represas sin incluir la participación de esos distritos reaviva la posibilidad de un conflicto a gran escala en el ámbito energético. En concreto, la Secretaría de Energía anticipó que las usinas volverán a manos del estado a través de Energía Argentina (Enarsa), pero que luego se iniciará un proceso para la reprivatización de las centrales. El Gobierno definiría las pautas de las concesiones por venir en el transcurso del segundo semestre. En Neuquén y Río Negro criticaron fuerte esta postura, a la que definieron como otra muestra de "centralismo".
Las prórrogas que vencen este mes –18 de mayo– corresponden a los complejos hidroeléctricos de El Chocón, Alicurá, Arroyito y Cerros Colorados. Ya para el mes próximo está estipulado que el día 27 concluya la extensión que rige para Piedra del Águila.
Las compañías que dejarán de operar las usinas concesionadas son AES Argentina, que opera Alicurá, la firma Central Puerto, al frente de Piedra del Águila, Enel Argentina, que controla El Chocón y Arroyito, y Aconcagua Energía, concesionaria de Cerros Colorados.
Vale señalar que los contratos en cuestión se encuentran vencidos desde el 10 de julio de 2023, y se han ido extendiendo una y otra vez desde entonces. Las provincias buscan intervenir en el manejo de las hidroeléctricas en tanto dichos complejos concentran el 25% de la energía eléctrica que abastece a la Argentina.
Los gobernadores quieren participar en las decisiones sobre las usinas
El cruce entre el Ejecutivo y los territorios patagónicos por el control de estos complejos acumula meses de enfrentamientos.
A mediados de febrero, Neuquén y Río Negro emitieron cartas documento contra el Gobierno nacional intimándolo a desistir de cualquier intento por asumir el control de las hidroeléctricas, así como también señalando que impedirán todo movimiento unilateral relacionado con la concesión de los complejos.
En más de una oportunidad, Alberto Weretilneck, gobernador de Río Negro y su par de Neuquén, Rolando Figueroa, subrayaron que los recursos naturales "son potestad de las provincias".
En el último tramo de ese mes, los gobernadores incluso anticiparon la intención de crear de Energía Patagonia SA, una empresa regional que definirá los destinos de hidroeléctricas, renovables e hidrocarburos.
La idea de los mandatarios provinciales con Energía Patagonia SA será concentrar aún más el poder sobre los recursos naturales de esos territorios. Y establecer un proceso de negociación en bloque con el Ejecutivo y el resto de los distritos del país.
Oposición a la reprivatización en el Sur
En Río Negro, una de las principales críticas a la decisión de reprivatizar que llevará adelante el Gobierno nacional provino de legisladores de la oposición.
"Nuevamente el gobierno nacional atenta contra los intereses de Río Negro. Ahora vemos que se encaminan a una mesa privatización y marginarán a nuestra provincia de la gestión de las represas hidroeléctricas, claves en la generación de energía", expuso al respecto Martín Doñate, senador nacional del Justicialismo en su espacio en la red social X.
"El presidente @JMilei decidió que la estatal ENARSA (que se privatizará si se aprueba la #LeyBases) se haga cargo de las concesiones y los activos. Junto al senador @OscarParrilli presentamos en el 2022, un proyecto para que las provincias sea asociadas a ENARSA ya que son, como indica la Constitución, las propietarias del recurso hídrico", enfatizó.
Tanto Doñate como otros representantes del arco político patagónico anticiparon que, más allá de las diferencias y afinidades que se dan entre las fuerzas partidarias en esa zona del país, conformarán un frente común para reclamar de manera "formal" que la Casa Rosada modifique su postura de reprivatizar las usinas hidroeléctricas. E incluya a las provincias en todas las futuras decisiones ligadas a las centrales.