El proceso que se le sigue a siete hombres acusados de participar en la salidera bancaria que sufrió en el 2010 Carolina Píparo, la mujer embarazada que tras el hecho dio a luz un bebé que falleció una semana después, continúa este lunes.

Se trata de policías que participaron en los allanamientos que permitieron la detención de los siete acusados de "asociación ilícita, robo doblemente calificado en concurso real con homicidio triplemente calificado por haber sido perpetrado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa en grado de tentativa".

Además, declararán dos ejecutivos de ventas de la sucursal del Banco Santander Río de La Plata de la que era cliente la víctima, quienes explicarán las características de la cuenta que poseía y si debía poder acceder a dinero en dólares y pesos cuando lo necesitara.

La semana pasada quien se desempeñaba como gerenta en la sucursal de 7 y 42 de La Plata, Valeria del Valle, explicó que Carolina Píparo tenía una cuenta a la vista y reconoció que "quien tiene una cuenta a la vista debería poder presentarse y retirar el dinero cuando quiera", aunque aclaró que la disponibilidad de dólares en el tesoro del banco depende de las limitaciones del seguro.

Reconoció que "el tesorero (que estaba de cajero y atendió a Píparo, Gerardo Pereda) decidió no entregar el dinero ese día" sin consultarla a ella, pues era su atribución, motivo por el cual la mujer debió ir a retirarlo días después.

Píparo, de entonces 30 años, fue baleada el 29 de julio de 2010 cuando con su madre, María Ema, fue a retirar dinero a la sucursal del Banco Santander Río de las calles 7 y 42, en La Plata.

Tras la diligencia y cuando regresaban a su casa, en las calles 21 y 36, ambas fueron interceptadas por dos delincuentes en una moto, quienes balearon a Carolina a pesar de que ya tenían su dinero.

La mujer dio a luz por cesárea a un niño, al que llamó Isidro y que falleció una semana después como consecuencia del hecho.