La Cámpora, la principal corriente interna del kirchnerismo, tomó este miércoles el control formal de las políticas gubernamentales de las telecomunicaciones, un sector que aguarda definiciones oficiales desde hace varios años, tanto por el lado de los usuarios como de los proveedores de servicios de telefonía fija y móvil y de Internet.

El titular de la cartera de Planificación Federal, Julio de Vido, puso en funciones como nuevo secretario de Comunicaciones al dirigente camporista Norberto Berner, quien reemplazó al renunciante Lisandro Salas, un hombre cercano al ministro.

Fuentes oficiales atribuyeron el recambio a un “impulso especial” del diputado nacional camporista Eduardo “Wado” de Pedro, que cuenta con el apoyo del secretario del área Legal y Técnica de la Presidencia, Carlos Zannini.

De Vido también puso en funciones al director de la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (Arsat), Matias Bianchi Villelli, durante un acto en el microcine del Palacio de Hacienda.

De esta manera, La Cámpora extiende su presencia en el entramado de la gestión nacional, donde ocupa lugares importantes en los ministerios de Economía y de Justicia, Aerolíneas Argentinas, la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca), la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) y los directorios de la Televisión Pública y la agencia oficial de noticias Télam, entre otras áreas.

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Reclamos a “telcos”Durante el acto de asunción de Berner, De Vido reclamó de nuevo a las compañías de telefonía celular que hagan las inversiones que corresponden y reiteró un proyecto del Gobierno para masificar la televisión digital abierta (TDA).

“Se viene una etapa de fuertes inversiones en materia de telefonía celular y de masificación de la televisión digital abierta”, dijo el ministro, que no precisó los montos de esos desembolsos.

Respecto de las empresas de telefonía celular, el funcionario pidió “que hagan las inversiones necesarias para la instalación de antenas que mejoren la calidad del servicio, sin poner como excusa que los intendentes (bonaerenses) son problemáticos y los que retrasan su instalación”.

“El año pasado mantuvimos reuniones con más de 1.000 intendentes y en cada encuentro Ceferino Namuncurá (el interventor de la Comisión Nacional de Comunicaciones, CNC) les dio una charla sobre la incorporación de estos artefactos. Así que no vengan a decirnos que los intendentes retrasan y si hay problemas los nuevos funcionarios estarán para solucionarlos”, afirmó De Vido.

“En materia de telefonía celular viene una etapa de fuertes inversiones y, en consecuencia vamos a exigirles a las telefónicas, que han ganando muchísimo, que reinviertan en la instalación de antenas y que vendan teléfonos con servicio de TV digital”, dijo De Vido, expresiones que ya las había manifestado en 2012 en varias ocasiones y en público.

El titular de la cartera de Planificación indicó que se han entregado “1,1 millón de decodificadores de TV Digital, aunque tenemos que llegar a los 2 millones por año y así alcanzar los 10 millones de  decodificadores distribuidos gratuitamente en los próximos cuatro años”.

De Vido elogió la gestión de Arsat, “una empresa con mayúsculas, necesaria para recuperar la posición satelital 81, porque de otra manera nos hubiéramos quedado fuera del mundo”.

En ese sentido, destacó la “construcción de un satélite, a través de (la empresa estatal) Invap, con tecnología de punta para Latinoamérica, que será lanzado durante octubre”.

Nueva etapaEn su discurso De Vido explicó que la secretaría de Comunicaciones coordinará a partir de ahora todos los proyectos vinculados con las obras de Arsat, la implementación del Servicio Universal, la TV Digital, la puesta en órbita de los satélites fabricados por Invap y proyecto futuros en el área postal.

Según informó el Grupo Convergencia, no hubo representantes de las empresas Telecom y Telefónica y de otras empresas del sector.

Sólo se registró la presencia de Antonio Roncoroni, presidente de la federación de cooperativas, Fecosur; Pablo Bressano, director de la compañía Infracom y titular del Área de Telecomunicaciones de la Confederación General Económica (CGE); Enrique Alonso, gerente de la empresa Nuestro, y Adrián Zamel, director de Technology Bureau.

También estuvieron el director de Invap, Héctor Otheguy; el secretario técnico de Argentina Conectada, Emmanuel Jaffrot, el secretario general del sindicato telefónico (FOETRA), Osvaldo Iadarola; Namuncurá; el viceministro de Economía, Axel Kicillof, Salas; y el ex presidente de Arsat, Pablo Tognetti.

Sobre Berner y Bianchi Villelli, De Vido advirtió: “Ambos funcionarios tienen la enorme tarea de llevar adelante las políticas comunicacionales que comenzó con este proyecto: la expansión de la TDA (televisión digital abierta), la construcción de satélites argentinos, la recuperación de la posición satelital 81º, el despliegue de Argentina Conectada. Los nuevos compañeros deberán articular todos estos proyectos”, indicó De Vido. 

También observó que deberán poner en marcha Libre.ar, el operador móvil del Estado nacional: “Este año la vamos a llevar adelante sin lugar a duda, tenemos varias alternativas y contamos con propuestas de empresas extranjeras. Además las compañías provinciales de telefonía participarán de esta puesta en marcha”, dijo el ministro.

Aquí están, estos sonSegún pronosticó el Grupo Convergencia, Berner romperá con la inmovilidad de su antecesor Salas, quien “por acción u omisión permitió que se acentuaran asimetrías en el mercado que desvirtuaron la competencia y favorecieron la concentración de las ‘telcos’ y los operadores móviles”.

Berner conoce de cerca a los operadores grandes, porque estuvo en el directorio de Telecom en representación del Estado. 

Bianchi Villelli es ingeniero, tiene 41 años y fue director de Edesa Holding, empresa de distribuidora de electricidad, cargo que asumió a fines de 2012 propuesto por la Anses, pertenece a La Cámpora y es cercano a Kicillof.

El sector de las telecomunicaciones tiene otros dos funcionarios de La Cámpora: el vicepresidente de Arsat, Guillermo Rus, y el vicepresidente de la Afsca Ignacio Saavedra. 

En cambio, la Dirección de Defensa de la Competencia está fuera del control de esa corriente kirchnerista, porque al frente de ella está Humberto Guardia Mendonça, bajo la órbita del  secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien fue el primer secretario de Comunicaciones del ex presidente Néstor Kirchner.

Justamente Moreno venía de ser asesor de organismos internacionales del cooperativismo cuando asumió hace casi 10 años. Pero hasta ahora las empresas de la economía social no tuvieron medidas concretas del Gobierno en su favor, salvo un par de excepciones. 

Por ejemplo, la posibilidad de ser operadores de última milla, a partir del plan Argentina Conectada, se espera con optimismo entre los cooperativistas pero es poca la información que llega desde la administración pública, pese a que hay una decena de cooperativas que completaron sus trámites con vistas a ser parte de esa red. 

DesafíosBerner deberá desarrollar el Servicio Universal, tras años de marchas y contramarchas. Hace casi dos años se debería haber iniciado el proceso de invertir parte de los fondos de ese servicio para llevar servicios a 400 poblaciones de menos de 500 habitantes.

Para este plan, según el Grupo Convergencia, hay más de 25 empresas o sociedades transitorias, entre incumbentes, pymes y cooperativas que aspiran a participar.

También existen demoras de larga data en asignaciones del espectro de frecuencias, para que las “telcos” puedan ofrecer servicios de telefonía móvil de cuarta generación (4G).

No se descarta que Berner, quien estuvo al frente de la Inspección General de Justicia (IGJ), trabaje y proponga una nueva Ley de Telecomunicaciones, una norma que tendría sentido ante la participación del Estado en el sector a través de Arsat y Libre.ar.