En medio de los cortes de gas a industrias, el Ejecutivo negó una "crisis" del sistema

El Gobierno y la oposición se cruzaron respecto de los cortes en el suministro de gas a usuarios industriales, que desde Planificación atribuyeron a una práctica que se realiza "desde siempre" a empresas con contratos interrumpibles, en tanto el ex secretario de Energía de Raúl Alfonsín, Jorge Lapeña, alertó que "el sistema no resiste la demanda máxima" por la caída en la producción.

El ministro de Planificación, Julio de Vido, y el interventor del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS), Antonio Pronsato, negaron la existencia de una "emergencia" en el suministro del combustible.

En cambio, señalaron que los cortes se realizan a empresas con contratos interrumpibles y se efectúan "desde la época de Gas del Estado", es decir, por lo menos dos décadas.

En declaraciones formuladas en Casa de Gobierno, el ministro Julio de Vido indicó que a las empresas adheridas a ese tipo de contratos "cuando baja la temperatura" y "hay más demanda del sector residencial, tienen el suministro cerrado porque el gas va al sector residencial", algo que, aseguró, ocurre en "cualquier país del mundo".

En ese sentido, señaló que la reunión del Comité del Gas en el Ente Regulador, se realiza "todos los miércoles, durante los últimos diez años" y que las empresas a las que se le cortó el suministro, "cuando suba la temperatura van a recuperar el gas y pagarán una tarifa menor por ser clientes interrumptibles".

Por su parte, Pronsato aclaró que las "restricciones" al suministro de gas a las empresas con contrato interrumpible se realizan "desde siempre" y "programadamente".

"Hay reglamentaciones y las propias empresas hacen sus programas de mantenimiento", sostuvo Pronsato en Radio Continental, en declaraciones en las que remarcó que no ve "ninguna emergencia. No es crisis ni falta de abastecimiento".

Entre las compañías que adhieren a ese tipo de contratos, Pronsato citó a Profertil, Siderar, Acindar, Mega y Ledesma, entre otras.

En cuanto a los clientes residenciales, les recomendó que "consuman tranquilamente el gas en sus casas, que no hay ningún problema".

Por la misma radio, Lapeña advirtió que "la producción de gas está en franca declinación" desde 2004, por lo que en la actualidad "del 25 al 30% del gas que consumimos es importado", lo que determina que se esté con "un sistema que no resiste la demanda máxima".

"Algunas industrias puede hacer cortes del suministro sin afectar mayormente la producción y en otros casos puede ser que tengan una implicancia productiva", acotó en palabras citadas por DyN.