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Los plazos fijos quieren darle pelea al dólar: pagan más y los depósitos tocan un nuevo récord

El billete verde sigue al alza y el Gobierno acelera la devaluación nominal. Esto obliga a los bancos a otorgar un premio mayor por las colocaciones
15/08/2013 - 18:46hs
Los plazos fijos quieren darle pelea al dólar: pagan más y los depósitos tocan un nuevo récord

Desde hace un tiempo, los bancos enfrentan un intenso cruce con el Gobierno en relación con las tasas de interés que aplican que, de continuar en alza, podría afectar el desarrollo del negocio financiero.

Las luces amarillas se encienden por el lado de la captación de los depósitos a plazo fijo. Más que nada en cuanto a que la mayor tasa que abonan para retenerlos no tenga un correlato en mayores costos para el dinero que prestan.

Según afirman los banqueros, buena parte de sus preocupaciones se sustentan en la actitud tomada por los funcionarios del Banco Central, ya que aducen que la propia entidad oficial fue la que impulsó un escenario con tipos de interés más elevados.

Más "precio" para los plazos fijos

Desde principios de año, la tasa de referencia Badlar -que es la que se paga por las colocaciones mayoristas, superiores al millón de pesos- muestra una clara tendencia al alza.

El siguiente gráfico permite apreciar cómo la misma ha ido desde un modesto 14,5% hasta el actual nivel, superior al 17 por ciento.

¿Por qué se dio esta suba? Para algunos analistas, respondió a un movimiento defensivo por parte de las entidades financieras, tendiente a contrarrestar la fuerte suba del dólar oficial y su correlato en el blue.

También, como una forma de acortar un poco la brecha entre la tasa que se abona por las colocaciones y la inflación.

En este contexto alcista, los depósitos a plazo fijo de empresas y ahorristas registraron en julio un aumento mensual récord de $10.500 millones, según informó el Banco Central de la República Argentina.

Al término del mes pasado, el saldo de estas colocaciones del sector privado en los bancos superó los $202.400 millones, precisó el BCRA.

En particular, crecieron con fuerza los depósitos mayoristas, producto del menor margen de maniobra que tienen las firmas para operar en el circuito informal y la imposibilidad para girar utilidades al exterior.

"La segunda quincena de julio explicaron más de 60% del aumento mensual", según informó el Banco Central.

Esa tendencia se verificó tras un crecimiento más pausado durante la primera parte del mes, asociado a "las mayores necesidades de liquidez de las empresas para pagar el medio aguinaldo".

El siguiente gráfico permite observar la evolución del stock del dinero colocado en bancos y su relación con la tasa de interés Badlar.

La brecha entre ambas curvas representa la captación de nuevos fondos por encima de la simple renovación de las colocaciones ya existentes.

A modo de ejemplo, si a fines de diciembre se habían colocado $100 y a julio ese dinero se convirtió en $106 (por los intereses) de existir en las entidades $120 a ese mes, significa que hubo $14 que llegaron "fresquitos" al sistema.

Este repunte sucedió por el lado de las empresas, situación que ha sido muy diferente si se compara con el dinero de los pequeños ahorristas, que aumentaron su tasa de crecimiento mensual a 4,7%.

En este caso, se observa que los saldos crecieron prácticamente en la misma proporción que la evolución de la tasa de interés. Es decir, que no se sumaron nuevos fondos al sistema por el lado de los particulares.

Este menor dinamismo se debió -entre otros factores- a que la tasa de interés no fue "tan generosa" como la Badlar (casi 3 puntos menos) y, principalmente, a las mayores posibilidades con las que cuentan los particulares para recurrir al dólar blue.

Tasas en crecimiento

La suba de las tasas de interés se hace notar en las pizarras de los principales bancos que operan en el país, no sólo a nivel mayorista, lo cual se percibe en la Badlar, sino también en los rendimientos que pagan a los pequeños inversores.

Así por ejemplo, el tipo de interés que logran vía "home banking", que es el canal con los niveles más altos para este segmento, treparon en algunos casos hasta por encima de los 3 puntos porcentuales desde que se inició el ciclo ascendente.

Para el analista Camilo Tiscornia, fue el propio BCRA el que motorizó la suba de la tasa que pagan por los depósitos, como forma de atenuar el atractivo que tiene para los ahorristas el dólar paralelo.

El imán al blue

La lógica indica que mientras más suba el blue, mayor es la tentación a dolarizarse, lo que significaría un riesgo para los bancos en cuanto a la pérdida de colocaciones.

En otras palabras, cuando el billete informal repunta serían muchas las personas que saldrían a comprar para no "quedarse afuera" de un eventual buen negocio.

Sin embargo, hay economistas -como Miguel Bein- que dan cuenta de que se da el efecto contrario.

Tal como publicó iProfesional, afirman que si el precio del blue llegase a bajar demasiado (por ejemplo hasta el hipotético caso de acercarse al del oficial) la tentación de dolarizarse sería tan grande que los bancos tendrían que pagar tasas altísimas para retener las colocaciones.

"Existe una relación no precisamente lineal entre el nivel de brecha cambiaria y tasa de interés, que hace que cuanto más bajo sea el gap mayor deberá ser la tasa ofrecida", afirma Bein.

Dado el ritmo de devaluación actual del dólar oficial, en un caso hipotético de una "desaparición de la brecha, se requeriría una tasa de interés muy alta e insostenible en el tiempo", añade.

Así, las cosas, el foco oficial está puesto más que nada en hacer atractivos los plazos fijos vía suba de los tipos de interés.

"Con el respunte de la Badlar, se observa claramente que el objetivo del Gobierno es que los pesos no vayan al dólar informal", afirma Soledad Pérez Duhalde, economista de Abeceb.

En coincidencia, Maximiliano Castillo, desde ACM, señala que "las tasas suben para que la gente no vaya tanto al blue".

El problema es que los bancos, si suben el premio por los fondos que reciben para depósitos, también elevan el costo del dinero que prestan. Y esa es la gran preocupación oficial, ya que ese encarecimiento puede afectar el consumo.

"La estrategia oficial consiste en tratar de controlar el mercado blue pero, a la vez, que no suban los préstamos, para lo cual le pone un cepo a las comisiones bancarias", agrega Castillo.

¿Seguirá al alza?

"El nivel actual de la Badlar es un piso, ya que todo hace prever que irá en alza de aquí a finales de año, al menos un par de puntos más", argumenta el gerente de un importante banco nacional.

"Pero el crecimiento va a ser gradual. Estimo que tratarán de mantenerla dentro de ciertos límites hasta octubre, con la idea de no afectar la actividad", agrega.

En tal sentido, Miguel Kiguel prevé que la tasa de referencia cerrará el 2013 en un piso del 19% anual.

Pérez Duhalde estima un porcentaje similar. Afirma que "si bien podría llegar a ese nivel hacia finales de año, en el medio registrará altibajos, más que nada por cuestiones políticas o estacionales".

Pero su estimación parece quedar corta frente a lo que prevé el Bank of America Merrill Lynch. En un reciente informe sostiene que por las condiciones en las que se desarrolla el mercado financiero local rondará el 20%.

"Esto se debe a que la tasa en pesos se está quedando atrasada con respecto al dólar y a la inflación", afirma Ezequiel Aguirre, analista de dicho banco.

Entre la emisión y los fantasmas

Otra cuestión clave es si a esta altura resulta posible para el Gobierno "convencer" al público de que el blue depende de lo que diga Moreno.

Y ya quedó atrás la idea de que el precio de $8 es un nivel lógico y estable, luego de que escaló en mayo a $10,50, se lo hizo bajar artificialmente y este bajón duró poco. De hecho, hoy ya toca casi los 9 pesos.

Y en esta discusión, la emisión de pesos adquiere un rol preponderante.

Algunos economistas alegan que, pese de las situaciones estacionales, como el turismo -o más allá incluso de la injerencia oficial en el mercado cambiario- no hay que perder de foco el factor que más fogonea la cotización.

"Lo que en su momento hizo caer al blue y lo que ahora lo está haciendo subir es el ritmo de emisión", opina Nicolás Dujovne, ex economista jefe del banco Galicia.

Para el segundo semestre, la expectativa es que la "maquinita" de imprimir billetes siga funcionando a pleno, dados los mayores compromisos.

"Ahora va a haber que emitir $10.000 millones por mes para cubrir las obligaciones fiscales. Ése es el tema de fondo", señala Dujovne, para quien el Gobierno dejará que el blue siga en ascenso.

Como contracara de la mayor cantidad de pesos, todo indica que la entrada de dólares será más escasa, dado que el momento de mayores liquidaciones de la exportación agrícola irá quedando atrás.

"Si a esta altura no se recuperaron las reservas, la soja ya no ayudará, porque en la tercera semana de julio empieza a disminuir el ingreso por la venta", observa Miguel Ángel Boggiano, CEO de Carta Financiera.

A su vez, el plan Cedin, luego de transcurrida la mitad del plazo establecido para el blanqueo de capitales, no fue la solución esperada por las autoridades para fomentar el ingreso de divisas.

Por lo pronto, Cristina Kirchner, fiel a su costumbre, comenzó a insinuar una teoría conspirativa, con los bancos como los malos de la película.

"Nos corren con algunos fantasmas blue, porque hace muy poco desde el Banco Central obligamos a los bancos a disminuir la tasa de interés", dijo la Presidenta, que piensa atacar el problema con el expediente de "correr las sábanas" a los conspiradores "para que los argentinos les vean las caras a esos fantasmas".