La primera dama uruguaya y senadora oficialista, Lucía Topolansky, calificó como "doloroso" el conflicto planteado entre Argentina y Uruguay por la instalación de UPM (ex Botnia) en Fray Bentos, frente a Gualeguaychú. Sobre las críticas de la oposición a la entrega de las Llaves de Montevideo a la presidenta Cristina Kirchner, consideró que se trató de una "postura que tiene una mirada muy cortita".

La legisladora del país vecino desmintió que exista un proyecto para instalar una nueva pastera sobre el Río Uruguay y precisó que sí habrá una planta de este tipo, pero "en la zona este" del territorio uruguayo, el cual no es limítrofe con Argentina.

Además, afirmó que "los científicos argentinos y uruguayos están siempre monitoreando lo que pasa en Botnia (actual UPM). Hay que confiar en ellos, son los que saben. El conflicto tuvo muchos más componentes que los ambientales".

"La gente de Gualeguaychú, con el tiempo, lo va a entender. La cantidad de uruguayos que tienen familiares o viven en Gualeguaychú es imponente. Para nosotros, fue como pelearse con un hermano, por eso fue tan doloroso", aseveró y agregó que "el hecho doloroso con Argentina es que es medio como pelearse con uno mismo. Por eso nos impactó de esa manera. Se trabajó para que eso se acabara y creo que se ha mejorado".

Llaves a Cristina

Topolansky también fue consultada por la polémica que rodeó la entrega de las Llaves de Montevideo a la presidenta Cristina Fernández. En ese sentido aseguró que se trató de "la postura de la oposición".

"Es una postura que tiene una mirada muy cortita. Los países no se mudan de donde están. Nosotros, con los vecinos, siempre tenemos que tener un vínculo y lo más fraterno posible. La oposición no comparte lo de la Patria Grande", lamentó.

"Ellos fueron los artífices de transformar al Uruguay en la patria financiera, el lugar de lavado de lo que fuera. Eso fue lo que derrumbó al Uruguay en 2002 (en referencia a la crisis financiera). Trabajosamente se ha venido desarmando y se ha venido optando por la integración. Pero ellos tienen libertad, por suerte: patean y opinan", finalizó en declaraciones consignadas por La Nación. 

Mujica también hizo referencia a la polémica generada por este tema y consideró que se trató de una "pavada" y una "pérdida de tiempo inútil".