Enmarcado en un contexto de anuncios grandilocuentes y movimientos de empresas que generan polémica, el Gobierno y la oposición están pendientes de cada detalle en torno a lo que sucede en el reservorio de hidrocarburos no convencionales Vaca Muerta.

No es para menos, habida cuenta de que en esa zona están depositadas las esperanzas respecto de que la Argentina, a futuro, pueda jugar en las "grandes ligas" en cuanto a naciones con potencial energético.

Tal como diera cuenta iProfesional, recientemente se dio a conocer el nuevo mapa de energía global, que ubica al país segundo en el ranking mundial de poseedores de gas, sólo superado por China, y ubicado por encima de Estados Unidos, Canadá, México y Brasil: 

Claro que el gran problema es extraer toda esa riqueza, algo que requiere de varios miles de millones de dólares. Y, para ello, resulta clave la confianza que despierte el país para atraer dinero fresco de los inversores.

Chevron, el primero

La reciente firma del acuerdo entre YPF y Chevron -sumado a las protestas con represión incluida que despertó el pacto en la provincia de Neuquén- obligan a repasar cómo se están dando las cosas en torno de Vaca Muerta.

En primer lugar, cabe aclarar que el espacio que ocupa es tan grande (30.000 kilómetros cuadrados) que se requiere de más de una compañía para explotar el área.

La mayor parte de la riqueza se encuentra en la provincia de Neuquén. En tanto, la porción que pertenece a Mendoza es reducida y de menor calidad.

El potencial de ganancias que ofrece Vaca Muerta viene a ser nada menos que unas 10 veces el PBI argentino. Es decir, unos 4,4 billones de dólares que, por ahora, están "ocultos" bajo tierra.

El acuerdo con Chevrón le otorga injerencia a la norteamericana sobre apenas el 3% del espacio que posee YPF.

{noticias-relacionadas}Dirigentes de la oposición, como Mario Cafiero y Javier Llorens, se muestran críticos al convenio. Al respecto, señalaron que la estadounidense se hará acreedora de beneficios por más de u$s122.000 millones en una franja en la que se concretarán inversiones por apenas u$s16 millones.

"Al analizar estos siderales números, surge la vehemente sospecha sobre si el CEO de YPF, Miguel Galuccio, ex ejecutivo de la multinacional prestadora de servicios petroleros Schulemberger, está al servicio de los intereses del país o de las grandes petroleras extranjeras", dispararon los opositores.

En este contexto, conviene repasar qué otros movimientos empresarios se han venido desarrollando en torno de Vaca Muerta.

Actualmente, son cerca de una quincena de petroleras las que tienen derechos de explotación en este reservorio, si bien YPF -con concesiones sobre 12.450 kilómetros cuadrados- lleva la delantera en cuanto a exploración.La estatal ya tiene en marcha más de 90 pozos en la zona, pero la intención oficial es que a través de desembolsos como el de Chevron se alcancen unos 1.500 yacimientos operativos en menos de dos décadas.

El siguiente mapa explicita cuál es el espacio sobre el que operará YPF con "sponsoreo" de la norteamericana:

Interés grupal

Por cierto, YPF y Chevron no son las únicas petroleras con presencia en la zona. La lista es de por sí extensa e incluye a las compañías:

• De Estados Unidos: Apache, Exxon y EOG.
• De Canadá: Américas Petrogas, Azabache, Antrim Energy, Madalena Ventures.
• De Francia: Total.
• De Alemania: Wintershall.

A estas se suman la local Gas y Petróleo (de Neuquén), Pluspetrol y Tecpetrol, la anglo-holandesa Shell, la filial local de la brasileña Petrobras y Pan American Energy, de capitales británicos, argentinos y chinos.¿Por qué la presencia de este pelotón de quince empresas no levanta la polémica de YPF-Chevron? En principio, porque la asignación de estas áreas de explotación fueron previas a la confirmación del potencial del reservorio.

La riqueza en hidrocarburos no convencionales de la cuenca en cuestión fue constatada a lo largo del último lustro mientras que los espacios concesionados tienen, en muchos de los casos, una antigüedad superior a la década.

Asimismo, ninguna de estas compañías posee un espacio de explotación ni remotamente cercano al que controla YPF -cerca de la tercera parte de Vaca Muerta- ni comprometió inversiones multimillonarias.

En paralelo, las zonas otorgadas a las petroleras mencionadas tampoco se ubican dentro de la zona más "rica" del reservorio, algo que sí sucede con la firma estatal y la franja que explotará en sociedad con Chevron.Otro componente que alienta la controversia es, por supuesto, el factor político: al discurso de soberanía energética y recuperación estatal de una firma emblemática como YPF, el kirchnerismo le contrapuso un acuerdo con una empresa estadounidense y, para colmo, con graves antecedentes en materia de desastres ambientales. 

Avance de YPF

Por el lado de la petrolera estatal, YPF comenzó a desarrollar las áreas de Loma La Lata Norte y Loma Campana -de 395 kilómetros cuadrados- ambas ubicadas dentro de Vaca Muerta.

En el reservorio en cuestión la firma ya tiene unos 90 pozos perforados, aunque la inversión de Chevron permitirá aumentar fuertemente esa cifra.

Los puntos que ya generan hidrocarburos para YPF representan una producción de 10.000 barriles por día, para lo cual se debe perforar hasta llegar a los 2.500 y 3.000 metros de profundidad (crédito infografía: ML News).

En tanto, el desarrollo por parte de YPF de la producción de gas no convencional en Vaca Muerta es más incipiente.

El primer pozo (el Orejano x2) se puso en marcha el año pasado y ya bombea gas al gasoducto del Pacífico. Así, la petrolera ya pudo dar inicio a un plan para perforar otra veintena de pozos de "shale gas".El acuerdo "tan temido"

Mientras se divulgan más y más detalles de la riqueza de Vaca Muerta, siguen elevándose las voces que cuestionan con dureza el pacto YPF Chevron.

Hace unos días, Miguel Galuccio, titular de YPF, defendió el esquema asociativo con la firma estadounidense y adelantó que antes de fin de año habrá nuevas inversiones de empresas asociadas al negocio del gas.

Todo indica que el segundo partner podría ser una compañía mexicana, sobre la cual el CEO de la petrolera estatal afirmó: "Pemex sería un buen socio", al tiempo que confirmó estar "abierto a generar todos los acuerdos necesarios para poner a producir los grandes recursos" del yacimiento no convencional.

Por lo pronto Chevron, la tercera petrolera más grande del mundo, hará un depósito de apenas u$s300 millones para pagar el 50% de las inversiones ya realizadas por YPF.

Así, continuará los trabajos en los primeros 20 kilómetros cuadrados en Loma Campana, donde se perforarán un centenar de pozos.

Según lo que publicado en el Boletín Oficial neuquino, YPF será la única operadora del área y compartirá con Chevron el costo de las inversiones en partes iguales.

El plazo otorgado es de 35 años (hasta el 2048), tiempo en el cual deberán invertirse u$s16.000 millones con el objetivo de llegar a unos 1.500 nuevos pozos perforados.

Uno de los puntos más polémicos del pacto es que los acuerdos que se firmen se regirán por ley extranjera.

Galuccio confirmó, además, que YPF pagará en dólares y que la inversión en el proyecto se recuperará recién en el noveno año.

Consultado respecto de los puntos del convenio, Alieto Guadagni, ex secretario de Energía de la Nación, afirmó a iProfesional: "Lo que se está haciendo es avanzar en cuestiones tácticas pero no estratégicas".

"Por ejemplo -añadió- no se discute la necesidad de una nueva ley para los hidrocarburos. La vigente es de 1968, de la época de Onganía, y se contradice con la constitución de 1994".

En su visión, recuperar la autonomía energética demandará inversiones por no menos de u$s150.000 millones en diez años.

El experto hizo hincapié en otro punto que ha suscitado polémica."Es ilegal cómo se están dando las concesiones en Vaca Muerta. Se prolongaron las ya vencidas y no se han quitado las empresas que incumplieron con las pautas de inversión acordadas hace unos años", aseguró.Voces en contra

En sintonía con los dichos de Guadagni, otros siete ex secretarios de Energía firmaron un documento -al que accedió iProfesional- en el que no sólo criticaron la existencia de cláusulas secretas en el acuerdo firmado entre ambas petroleras sino que, además, expusieron la irregularidad de los permisos concedidos en Neuquén.

Los ex funcionarios indicaron que en la provincia "las concesiones son temporales, duran 25 años y pueden ser extendidas una sola vez por 10 años más, siempre y cuando se hayan cumplido con todos los compromisos asumidos".

"En el caso de Loma de La Lata esa prórroga ya fue dada en el año 2000 y, por lo tanto, la concesión en esas áreas tiene plazo de caducidad improrrogable. Al vencimiento, las áreas deben ser revertidas al Estado sin cargo", añadieron.

En otro orden, los especialistas hicieron referencia al proyecto piloto de de YPF y Chevron para la explotación conjunta de un área de 390 km2.

Al respecto señalaron: "Creemos que es improcedente desglosar esas áreas y otorgar sobre las mismas nuevas concesiones a 25 años, prorrogables por 10 más. Esto estaría contrariando a la propia ley de hidrocarburos".

A tono con esta afirmación, los anteriormente citados Cafiero y Llorens repasaron en un documento la performance de Chevron en el país, previo al acuerdo con YPF.

"La producción de esta firma en Argentina se hundió en un abismo desde el 2003 en adelante. Fue un gran contribuyente al actual déficit energético, con una caída del 84%, al pasar de 4,6 millones de barriles de petróleo en 2001 a sólo 736 mil en 2012", aseguraron."En cuanto al gas natural, los registros son aun peores, ya que el descenso fue del 87% desde 2003 a la fecha", añadieron.Socios que se caen y nuevas expectativas

De cara a lo que viene tras el acuerdo con Chevron, Miguel Galuccio confesó que se cayó hace unos meses el memorando de Entendimiento con Bridas, con participación del grupo local Bulgheroni y la china CNOOC.

Como contrapartida, el ejecutivo ahora se muestra entusiasmado con Pemex y con sumar a un nuevo socio en el negocio del gas: la gigante Dow Chemical.

Asimismo, la francesa Total Austral tiene proyectado un plan piloto para el desarrollo del yacimiento Aguada Pichana en la misma formación geológica.

La inversión prevista para ese desarrollo es de u$s500 millones sobre una superficie de unos 400 kilómetros cuadrados, muy cerca de Loma La Lata Norte y Loma Campana, las áreas de YPF más desarrolladas en petróleo no convencional.

Aguada Pichana es un área operada por Total aunque está asociada con YPF y tiene también un porcentaje la empresa estatal neuquina Gas y Petróleo.