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Automotrices, contra las cuerdas: enfrentan el peor enero en 10 años por derrumbe en ventas y falta de dólares

La caída del poder adquisitivo y las subas de precios que vienen experimentando los 0Km están impactando de lleno en el nivel de patentamientos
30/01/2015 - 10:00hs
Automotrices, contra las cuerdas: enfrentan el peor enero en 10 años por derrumbe en ventas y falta de dólares

Tras cerrar un 2014 para el olvido, la industria automotriz no termina de recuperarse y se encamina a concluir este primer mes del año con una caída récord. 

Históricamente, enero es un mes fuerte en materia de ventas. Sucede que en diciembre muchos compradores comienzan a realizar los trámites y esperan hasta el cambio de calendario para patentar la unidad y así poder "ganarle" un año al vehículo.

Este comportamiento, muy característico en el negocio de los 0Km, se dio hasta diciembre de 2013, cuando la inminencia de una devaluación -que finalmente ocurrió- hacía presagiar una disparada de precios. Fue justamente este nerviosismo el que empujó a muchos compradores a hacerse de un vehículo.

Así, enero de 2014 había cerrado con casi 108.000 unidades vendidas, lo que lo posicionó como el tercer mejor arranque de año de la historia.

Sin embargo, la contracción del poder adquisitivo que afecta a los argentinos y la falta de dólares para poder reponer stock, generaron que este enero esté a un paso de convertirse en el más flojo en diez años.

Todo un símbolo para un sector que supo ser el "estandarte" y el "alumno ejemplar" del plan de reindustrialización que viene pregonando el Gobierno.

Según datos de la Asociación de Concesionarios (ACARA), el promedio diario de ventas durante los primeros veinte días fue de unas 3.690 unidades, lo que implica un derrumbe del 40% frente a las 6.000 que se habían alcanzado durante mismo período del año pasado.

En este contexto, el economista Gonzalo Dalmasso, de la consultora Abeceb, estimó que "los patentamientos a lo largo de este mes alcanzarán las 65.000 unidades. Sin dudas, un dato muy malo para la industria".

No es para menos: de confirmarse esta cifra, implicará la peor performance desde el año 2005, cuando se habían comercializado casi 52.500 vehículos (ver gráfico).

En buen romance, el mercado se está achicando y está retrocediendo a los niveles de hace una década, pese a los esfuerzos oficiales por hacer del ProCreAuto la "tabla de salvación" de la industria.

La preocupación entre los directivos de terminales es que enero marca el "termómetro" con el que se regirá la industria en los meses siguientes, dado que es el de mayor volumen de ventas de todo el año.

Sucede que, a lo largo de enero se suele acumular el 15% de todos los patentamientos.

En este contexto, Dalmasso planteó que a la industria y a los concesionarios les espera un muy duro primer trimestre, "porque los salarios se fueron atrasando respecto de los valores de los vehículos. Por eso, hasta que no comiencen a verse plasmadas las mejoras en las remuneraciones, los patentamientos de autos no se van a recuperar".

En este sentido, el experto hizo hincapié en la variable precios como uno de los principales desincentivos de la demanda.

Sucede que, hasta 2013, los valores de los vehículos venían ajustándose por debajo del índice de inflación real y de los ajustes salariales. Esto provocó que, durante varios años, el precio relativo de los vehículos se achicara, lo que permitió incrementar con fuerza las ventas. De hecho, fue en 2013 cuando se alcanzó el récord, con 955.000 unidades comercializadas.

Sin embargo, en 2014, producto de la devaluación y del impuestazo, los precios de los vehículos se dispararon, en promedio, un 50%, una tasa de variación que se ubicó unos 20 puntos por encima de la actualización de las remuneraciones.

Y, en lo que va del año, los ajustes continuaron: luego de que el Gobierno elevara el piso de la base imponible a partir de la cual comienza a regir el impuesto a los 0Km, las terminales ajustaron al alza los precios de numerosos modelos que habían quedado "freezados" durante meses.

Tal fue el caso de Peugeot, que dispuso una suba del 15% en los valores de modelos como el 308 o el 408. En tanto, algunas versiones del C4 Lounge de Citroën sufrieron un incremento del 12,5%.

Falta de dólares y baja de stockPara Dalmasso, el otro factor gravitante es la falta de dólares que afecta a las terminales automotrices.

"Además de la demanda, que viene muy floja, hay un problema muy importante dado por la escasez de vehículos. Algunas marcas decidieron discontinuar algunas versiones, lo que achicó la oferta. A esto se suma una fuerte caída en los volúmenes, lo que está generando un estiramiento de los plazos de entrega", aseguró el economista.

Esto está vinculado con la falta de dólares, que empujó al Banco Central a imponerle a la industria un sistema de cupos para el pago de importaciones. En la actualidad, todo el sector en su conjunto está recibiendo apenas u$s100 millones mensuales para el pago de compromisos a proveedores y casas matrices.

A esto se suma que la industria registra una deuda impaga de u$s2.500 millones por operaciones aduaneras realizadas mayormente durante el primer semestre del 2014 y para las cuales el BCRA -en ese entonces conducido por Juan Carlos Fábrega-, nunca les autorizó divisas, lo que obligó a las compañías a operar con crédito de las filiales brasileñas.

"Las importaciones se están desplomando mes a mes y esto está llevando a un fuerte achicamiento del stock de la industria automotriz", recalcó Dalmasso.

El experto advirtió que en octubre último, las compras de vehículos habían registrado un derrumbe del 66% en volúmenes, respecto al mismo mes de 2013. En noviembre, en tanto, el desplome había llegado al 65%.

Diciembre tampoco fue positivo: las terminales importaron un 52% menos. Y el escenario, en lo que va de enero, se está repitiendo. 

De acuerdo con datos de ADEFA, cámara que nuclea a las terminales, a lo largo de 2014, la industria envió a los concesionarios unas 614.000 unidades. Esta cifra se ubicó por debajo de los 684.000 autos patentados. Esa diferencia se cubrió con stocks.

Según Dalmasso, "entre las fábricas y las agencias, se ´comieron´ un inventario cercano a los 115.000 vehículos".

La variable cambiaria, clave

Hacia el cierre del 2014, desde la consultora Abeceb estimaban que este año se iban a terminar patentando unas 630.000 unidades.

Pero el mal arranque que está dejando este enero obligó a los analistas a rever sus pronósticos a la baja.

Actualmente, desde la consultora estiman que el mercado de los 0Km podría retroceder hasta los 615.000 vehículos. Sin dudas, una cifra crítica considerando que la industria dispone de una capacidad instalada para producir 1,2 millones de unidades cada año.

Sin embargo, incluso para llegar a ese nivel -de por sí bajo-, las terminales necesitarán contar con una mayor cantidad de dólares para poder incrementar sus importaciones.

Dalmasso marcó un punto no menor: tras haberse "comido" gran parte del stock de 0Km, la industria asiste a un fuerte racionamiento de divisas por parte del Banco Central.

"Si no se introduce ningún cambio en la política oficial hacia el sector automotriz, entonces tampoco consideramos posible alcanzar ese nivel de patentamientos, porque la demanda se volverá a enfrentar con los problemas de oferta", advirtió Dalmasso.

Según trascendió en los últimos días, en el Gobierno hay intensiones de incrementar el cupo de u$s100 millones mensuales que están recibiendo las terminales.

En concreto, fuentes empresarias aseguran que se está negociando para llevarlo a u$s240 o u$s250 millones por mes.

Si bien implicaría una mejora importante, en el sector argumentan que, como mínimo, será necesario contar con un cupo de u$s300 millones para comenzar a normalizar la producción.

Según Dalmasso , si la disponibilidad de dólares no mejora, entonces no será viable pensar en un incremento en la producción de vehículos.

Además, el experto recordó que las filiales y proveedores de autopartes, mayormente ubicados en Brasil, ya no están dispuestas a seguir financiando las importaciones de las terminales radicadas en la Argentina, luego de que a lo largo de 2014 acumularan una deuda cercana a los u$s2.500 millones.

Por este hecho, las filiales brasileñas de General Motors y Renault habían dispuesto, hacia el último trimestre del año pasado, frenar todos los envíos hacia el país por falta de pago.

Un año difícil para el BCRA

El problema de incrementar el cupo de dólares para cubrir importaciones es que el BCRA enfrenta una agenda cargada de vencimientos, en momentos en que el superávit comercial sigue flaqueando

Tal como destaca la consultora Ecolatina, "el 2015 será un año difícil para la Argentina. La restricción externa estará nuevamente operativa y el atraso cambiario impedirá recomponer el saldo comercial, por lo que acceder al financiamiento externo será un elemento clave para dinamizar el nivel de actividad".

Cabe destacar que el saldo entre exportaciones e importaciones de 2014 fijó un punto de partida preocupante para este año: con menos de u$s6.700 millones, fue el peor resultado desde el 2001.

El problema es que, tal como señalan desde Ecolatina, a diferencia de períodos anteriores, en 2015 no sólo serán necesarias más divisas para financiar el gasto electoral y la cuenta corriente, sino que también serán necesarios dólares frescos para cubrir los requerimientos de la cuenta capital.

"Este año hay fuertes vencimientos de deuda pública en moneda extranjera: los pagos netos dentro del sector público ascienden a u$s16.000 millones y, además, se estima que hay u$s5.000 millones pendientes con importadores", destacaron.

En este marco, recalcaron que "si el Gobierno pretende evitar una suba del tipo de cambio oficial, afrontar los servicios de deuda y llevar a cabo una política electoral expansiva, deberá conseguir financiamiento externo".

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