El titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) Alberto Abad, sostuvo que  realizaron simulaciones de cómo quedaría la situación en el caso de que las paritarias cerraran en un 25% anual.

En este sentido, aseguró que para las primeras categorías, el efecto combinado de la baja de impuestos y del aumento de sueldos, dejaba un efecto neto del orden del 40%. "Ahora esta modificación resiste y no va a tener un impacto negativo como fue hasta ahora históricamente en el ingreso de los ciudadanos", opinó.

Por otro lado, admitió públicamente que en la Argentina la presión tributaria es muy alta y que se están estudiando algunas reformas para el sistema impositivo, incluyendo el Impuesto a los Bienes Personales.

"Es importante recordar que el Gobierno se encuentra con un déficit fiscal gigantesco, siete puntos del Producto Bruto Interno", justificó este martes Abad, en declaraciones radiales.

También admitió que a ese déficit se llegó "con presión tributaria fuertísima, de 36% del Producto, y un bajísimo nivel de formalización de la economía".

"Tenemos trabajo en negro, incumplimiento en el IVA, evasión en impuestos a nivel micro y sofisticado. Todo esto hace que las decisiones que se tengan que tomar en términos tributario van por un desfiladero, no van por una autopista", remarcó Abad.

Respecto de las medidas que comenzó a tomar la administración liderada por Mauricio Macri, Abad consideró que "este Gobierno empezó a tomar una serie de decisiones que, por supuesto, ninguna puede ser una respuesta integral, pero todos son pasos que están orientados a bajar la inflación y mejorar la productividad".

"Bajar las retenciones tuvo el objetivo de favorecer a las economías regionales, que tenían escasísima competitividad o nula, para que se puedan volver a poner en pie y generar trabajo. Fundamentalmente, generar dólares para poder bajar la emisión y reducir la inflación", ejemplificó el titular de la AFIP.

Otro ejemplo que mencionó es que "para el pago del aguinaldo de este último año, no se cobró el Impuesto a las Ganancias. Esa fue otra manera de reducir el costo fiscal".

"Ahora se ha tomado la decisión de bajar el impacto del Impuesto a las Ganancias, bajar presión tributaria, mediante el mecanismo de subir el mínimo no imponible. El Presidente ha anunciado también que se va a bajar la presión tributaria en Bienes Personales", continuó, y mencionó además la quita del IVA a los productos básicos.

En ese marco, admitió que "es muy ponderable que con déficit fiscal se esté bajando presión tributaria", pero "lo que necesitamos es que la calidad de las políticas públicas vaya aumentando de manera que los satisfechos sean cada vez más", apuntó.

En esa línea, agregó la baja de los derechos de exportación, la devolución de las percepciones por viajes al exterior y las compras de tarjeta, entre otras medidas. Por esas vías, "ya hemos devuelto más de $600 millones y vamos a terminar devolviendo más de $2000 millones", anticipó el titular de la AFIP.

"Estamos hablando de un costo fiscal de $100.000 millones. Es casi la recaudación de un mes de todos los impuestos", anticipó. 

Escalas

Al ser consultado por el cambio en las escalas salariales que determinan el pago de Ganancias, Abad remarcó que "una persona que hoy tiene una remuneración neta de $26.000, si el sistema seguía como hasta ahora iba a pagar $4.899" por ese impuesto, cuando ahora "va a pagar $181", el 96% menos.

"Y una persona que tenía una remuneración de $38.000, antes iba a pagar $8675 y ahora va a pagar $3200; un 62% menos de impuestos", continuó. 

De acuerdo al titular de AFIP, estos dos niveles de remuneración implican el 75% de todas las personas que pagan impuestos en la Argentina.

"Hay gente que considera que esto no es satisfactorio, que no es completo, que después de la paritaria va a tener un efecto adicional. Pero a mi lo que me interesa destacar es qué pasaba si todo seguía como estaba. Si todo seguía como estaba íbamos a pagar todas las personas de cuarta categoría $50.000 millones más", remarcó.

Por último, reconoció que la medida sería más efectiva si además se revisaban las escalas salariales que determinan estos pagos, "pero si se hubiera hecho eso no se podía bajar el impuesto a los bienes personales, no se hubiera podido bajar las retenciones para que las economías regionales mejoren, se mantenga el empleo y los pueblos de las ciudades se recuperen".

Tampoco, según Abad, "se podría haber devuelto el 35% de aquel que viajó pacíficamente, pagó con tarjeta y ahora no se lo devuelven".

"El arte de la economía es el arte de lo posible", afirmó el titular de la AFIP y prometió que "en el corto plazo estamos haciendo lo mejor que se puede hacer para un país que heredó una situación desastrosa y se está empezando a poner de pie de a poco".