iProfesional

La canciller dijo que Cristina Kirchner "sobreenfocó" el reclamo por la soberanía de la islas ante el Reino Unido. "Hay que explorar el diálogo", aseguró
18/05/2016 - 10:54hs

La canciller Susana Malcorra afirmó que las Islas Malvinas no son más "el tema dominante" en la relación entre la Argentina y Gran Bretaña.

Señaló que las relaciones bilaterales con frecuencia son buenas en un 80% y malas en un 20%

"Queda claro que ese 20% tiene que ver con Las Malvinas. Pero en el largo plazo, podemos encontrar una solución", aseguró.

"Las órdenes del presidente Macri son concentrarse en el 80%. Necesitamos desarrollar la confianza", agregó y consideró que la gestión de la ex presidenta Cristina Kirchner se "sobreenfocó" en ese tema y sostuvo que la cuestión de la soberanía argentina sobre el archipiélago no debe "distraer la atención de temas bilaterales más significativos como el comercio y la inversión".

"La cuestión Malvinas está fijada por la Constitución Nacional, pero tenemos que explorar el diálogo y la asociación más allá de Malvinas", indicó al diario británico The Financial Times.

Además, ratificó que la Argentina no mantendrá relaciones diplomáticas directas con los habitantes de las islas autodenomiados "kelpers" pero se pronunció a favor de ser "flexible" con ellos.

"Creo que primero hay una cuestión de formalidad legal, que es que nuestro vínculo es con el Reino Unido y que, dicho sea de paso, el Reino Unido es quien representa los derechos de los isleños. Es decir que, desde lo formal, nosotros tenemos que mantener nuestro vínculo con el Reino Unido, inclusive por razones de legalidad internacional", señaló la canciller.

De todos modos, evaluó que "a medida que avanzan los tiempos, y hay un mayor reconocimiento a la participación de los pueblos, hay un mayor reconocimiento a la participación de la sociedad civil en distintas formas, uno puede ir pensando en opciones de aperturas. No tengo ninguna sobre la mesa en este momento".

"Pero sería flexible a decir: a ver, escuchemos y pensemos abiertamente", señaló la canciller en una entrevista publicada por un matutino porteño.

En ese sentido, dijo que su intención es "tratar de poner un poquitito de aceite sobre las aguas" y "pensar en la gente, en las personas".

Por último la canciller agregó que "una de las cosas que yo quiero resaltar es que, hoy por hoy, no hay ningún impedimento por parte de la Argentina en que los isleños tengan autorización para viajar y para volar en cualquier momento que necesiten, particularmente si hay una emergencia".

La relación con Brasil y el mundo

La ministra también tuvo palabras de consuelo para Dilma Rousseff, la presidente brasileña suspendida a través del impeachment.

"Desde la perspectiva legal, la suspención parece haber seguido su debido proceso", aseguró Malcorra.

"La pregunta es si más allá de la legalidad hay un verdadero mérito, si es legítimo".

Pero si bien Malcorra siente simpatía por la mandataria brasileña queda claro que el nuevo liderazgo en Buenos Aires dedica poco tiempo a las políticas de izquierda de Rousseff y los Kirchner. Por ejemplo, Malcorra descarta la idea de la administración de Cristina de que la integración con la economía global era una amenaza para los intereses de Argentina.

Las tres prioridades de Macri son eliminar la pobreza en Argentina, combatir el narcotráfico y unir a su polarizado país. Las tres, sostiene Malcorra, dirigen la tarea del ministerio de Relaciones Exteriores. Dice que para eliminar a la pobreza hay que generar empleos y brindar una red de seguridad social. No se puede hacer ninguna de esas cosas sin comercio internacional, inversión y acceso al financiamiento extranjero.

Una primera victoria fue conseguir que el Congreso aprobara un acuerdo con los holdouts, lo que permitió que el país regresara a los mercados de capitales globales con la mayor colocación de deuda por parte de un país en desarrollo.

El siguiente desafío será garantizar la participación del sector privado local y extranjero, y de otros gobiernos, en un ambicioso plan de inversión en infraestructura valuado en u$s25.000 millones anuales.

El gobierno de China sería un socio estratégico. "Había una idea de que la nueva administración se distanciaría de China, contó Malcorra.

"Eso no es cierto". De hecho, desde Londres ella viajará vía El Líbano a Beijing.

"Queremos inversiones (de China) pero queremos estar seguros de que sean transparentes y abiertas", aclaró.

"Algunos de los acuerdos anteriores no cumplieron el debido proceso. Pero ahora estamos 'Ok', reparamos lo que encontramos", dijo refiriéndose a un convenio por u$s4.300 millones para construir dos plantas hidroeléctricas en el sur de Argentina que habían sido firmados antes de que estuviera terminado el diseño de las mismas, y para las cuales los contratistas habían pedido un 15% de incremento en el valor. Con Macri, el diseño fue modificado para que se adaptara al presupuesto original.

Ella espera finalizar los detalles de este contrato, y conversar sobre otros, en Beijing. Entre ellos hay un plan para construir dos reactores nucleares. Malcorra hace poco estuvo en Moscú, donde conversó sobre planes para una planta hidroeléctrica por u$s1.840 millones, también en el sur de Argentina.

Argentina no sólo mira hacia los países en desarrollo. Estados Unidos, el Reino Unido y la UE son prioridades para el comercio e inversión y para asesoramiento y cooperación en la lucha contra las drogas y en el fortalecimiento de las instituciones del país.

En una mayor señal del cambio de prioridades, ella contó que el Mercosur no estuvo a la altura de lo que se esperaba. Se merece otra oportunidad pero "si no funciona, nos reagruparemos y pensaremos otra vez",

Un primer paso será observar a la más enérgica Alianza del Pacífico integrada por Chile, Perú, Colombia y México.