Al menos cuatro empresas le recomprarían sus acciones a la ANSES
La reforma jubilatoria que propone el Gobierno, que está a punto de convertirse en ley la semana que viene, tiene incorporado un artículo que le permite a la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) desprenderse de sus acciones.
En la actualidad, el organismo previsional tiene vedada esa posibilidad producto de una norma sancionada por el Congreso el año pasado. El objetivo de la gestión de Cristina Kirchner era blindar esos papeles para que sea el Parlamento el que dé la última palabra.
Ahora, de convertirse en ley la iniciativa de Mauricio Macri, la ANSES no necesitaría ningún permiso para operar esas tenencias que están valuadas en $40.000 millones. Y ya se sumaron algunos nombres de empresas que estarían dispuestas a recomprar las acciones que tiene en su poder la entidad dirigida por Emilio Basavilbaso.
Una de ellas es Telecom. Es vox populi que la compañía como parte del proceso que derivó en la compra del grupo Fintech (David Martínez) a los Werthein lanzó una Oferta Pública de Adquisición (OPA) al resto del mercado.
Todo indica que el organismo estaría dispuesto a desprenderse de estas acciones que en la actualidad supera los u$s11.000 millones. Ese efectivo sería de utilidad para hacer frente al menos parcialmente a los pagos de sentencias y futuros aumentos jubilatorios.
Sin precisiones al respecto, los analistas consideran que no es la única. Por el contrario, se podrían sumar otras cuatro empresas a la lista de interesados en recomprar sus participaciones societarias, informó Ámbito Financiero.
Una de las candidatas para entrar una operación de este tipo sería Petrobras Energía, la compañía que hace pocas semanas adquirió el grupo Mindlin. Claro que sólo le pudo comprar a los controlantes brasileños el 67% ya que una porción (casi un 12%) sigue en manos de la ANSES.
Otra de las compañías que podría estar interesada en este proceso, se especula, es Consultatio. La desarrollada de Eduardo Costantini planea cotizar en el mercado internacional, pero su estructura podría resultar algo complicada para seducir al inversor internacional.
También se especula que el cambio de manos de Solvay Indupa podría finalizar en una oferta de adquisición del nuevo grupo controlante, por lo que la ANSES también terminaría evaluando su conveniencia.