La reunión entre los representantes manteros de Once y miembros del gobierno porteño terminó este martes a las 19.40, luego de casi tres horas, donde los se decidió un cuarto intermedio hasta el miércoles a las 10.

A la salida del encuentro, algunos puesteros hablaron brevemente con los canales de TV y afirmaron que "hay buenas intenciones del gobierno" de la Ciudad, pero "todavía no está la solución".

Al parecer, los comerciantes informales esperarán a reunirse esta noche en una asamblea para analizar los pasos a seguir y si aceptan la propuesta acercada por el Ejecutivo porteño.

La oferta consistiría en crear un registro con los datos de los vendedores para poder crear un monotributo social y que regularicen su situación, además de una reubicación.

La mediación de la Defensoría del Pueblo

La Defensora Adjunta del Pueblo de la ciudad de Buenos Aires, María América González, confirmó que en la tarde

del martes se reunieron miembros del Gobierno porteño y representantes de los puesteros de Once.

"Intentamos juntar a las partes. Estuvieron los miembros de la asamblea y manteros que hace años que están trabajando con la Subsecretaría (de Trabajo porteña) para llegar a un acuerdo", destacó la funcionaria. 

"Los trabajadores me propusieron la necesidad de seguir trabajando porque es la manera de llevar dinero a sus casas. Quieren una alternativa válida para que mañana puedan llevar dinero a sus casas", completó.

González destacó las dificultades de negociar con los manteros debido a que no "son grupos de trabajadores de un sindicato", por lo que tienen que "buscar a los representantes legítimos".

También resaltó los escollos de llegar a un acuerdo, ya que es difícil que los puesteros encuentren un "circuito de gente" similar al que poseen en Once.

Pero afirmó que "es un camino que se empieza" y celebró "que haya voluntad de diálogo" entre las partes.

El corte de Pueyrredón

La policía dispersó a un grupo de manteros que cortaban parcialmente la avenida Pueyrredón de la ciudad de Buenos Aires a la altura de la Estación de Once que protestaba tras no llegar a un acuerdo con el gobierno porteño.

La medida de fuerza tuvo lugar alrededor del mediodía en los alrededores de Plaza Miserere, luego de que las fuerzas de seguridad desalojaran a los vendedores en la madrugada.

Además de decenas de efectivos de la nueva Policía de la Ciudad, en el lugar se encuentran inspectores del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño, personal de Higiene Urbana, de Tránsito y de Desarrollo Social.

"El operativo fue pedido por la Fiscalía General a modo de prevención para impedir la venta en el espacio público. Lo que se hizo fue un operativo durante la noche para evitar que los manteros se instalen durante la mañana y el personal de la Ciudad desarmó las estructuras que estaban montadas sobre la recova en Pueyrredón", señaló Luis Cevasco, a cargo de la Fiscalía General de la Ciudad de Buenos Aires.

"Se trató de una medida de prevención, como se hizo en su momento sobre Rivadavia y Acoyte y sobre la calle Avellaneda", se explayó.

Por su parte, Omar Guaraz, de la organización Vendedores Libres, resaltó que "muchos compañeros sabían que se iba a realizar este operativo y entonces no armaron y retiraron las cosas, pero otros no y se llevaron todo".

"El barrio está militarizado. Nos dijeron que también se hicieron algunos allanamientos en los domicilios particulares de los vendedores y creemos que hay detenidos", completó Guaraz. Pero fue desmentido por Cevasco, quien señaló que "sólo se está trabajando sobre la vía pública, en ningún momento se ordenaron allanamientos".

Guaraz describió que "si bien la población que vende en Once es fluctuante, por día deben trabajar allí entre 1.500 y 3.000 compañeros".

"En los últimos cuatro años fueron desalojados 5.000 manteros en (la avenida) Avellaneda, Caballito y otros puntos de la Ciudad. Ninguno de esos compañeros fue relocalizado como le prometió la Ciudad. Las personas que venden en la calle son trabajadores y lo hacen porque no tienen otro medio de vida", indicó.

Cómo empezó todo

La Policía comenzó en la madrugada del martes el levantamiento de los puestos sobre Pueyrredón, entre las avenidas Corrientes y Rivadavia. El operativo se realizó de manera pacífica en sus primeras horas.

Los disturbios comenzaron durante la mañana, cuando los puesteros exigieron a la Policía que les devuelva la mercadería confiscada. Como protesta, cortaron Pueyrredón y Rivadavia.

Los efectivos permanecieron en el lugar, pero sin reprimir a los manifestantes, quienes incendiaron un contenedor de basura. La policía avanzó con un camión hidrante y hubo tres detenidos.

"No vamos a dialogar con las organizaciones ni con las personas violentas, solo con los vendedores de buena fe que usan esta actividad como un sustento de vida", señaló la subsecretaria de Espacio Público de la Ciudad, Clara Muzzio.

"Estamos desde las 2 de la madrugada, tenemos la orden de liberar el espacio público y ahora analizamos la situación frente a este corte. Estamos ofreciendo un censo donde los vendedores de buena fe pueden registrarse, dando su domicilio privado y DNI para crear un monotributo social y así poder trabajar de forma legal", completó la funcionaria.