Si bien las cifras sobre la economía de 2016 no son alentadoras, el primer año de la gestión de Mauricio Macri cerró con una buena apreciación por parte de la gente, en un nivel similar al registrado cuando asumió.

Así lo revela el Índice General de Expectativas Económicas (IGEE) elaborado por la consultora Kantar TNS Gallup, que mostró que las perspectivas económicas generales de la población fueron irregulares durante el año pasado, pero con un repunte en diciembre, cuando logró un aumento de 9% con respecto al mes previo.  

Según la firma, este rebote se produjo gracias a la reforma del Impuesto a las Ganancias. El indicador igualmente estuvo lejos de los últimos picos históricos, que se registraron en 2011 y 2008.

Pero a la hora de evaluar las expectativas a futuro, aparecen las dudas.

Si bien este ítem no mostró una tendencia definida, durante diciembre pasado creció levemente con respecto a noviembre: 4%.

A pesar de que los números sobre consumo siguen en baja –de hecho, las ventas retrocedieron 4,7% en 2016 según CCR–, el informe insinúa una suba en la predisposición de la gente a la compra de bienes durables.

En efecto, durante diciembre avanzó un 10% la tendencia a adquirir este tipo de productos con respecto al mes previo. Además, se colocó por encima de las mediciones de diciembre de 2015.

El reporte también contempla la situación económica personal de los entrevistados, donde también se registró una mejora.

En este sentido, el 30% respondió que se han incrementado sus ingresos, una pequeña suba con respecto al 27% recogido durante noviembre.

Esta diferencia de tres puntos tiene su contrapunto entre los que respondieron que sus ingresos han decrecido: 25% en diciembre, contra 28% el mes previo. 

El futuro

Más allá de las percepciones, los argentinos mostraron una mayor esperanza en cuanto al rumbo planteado por el Gobierno.

En este sentido, la tendencia se mantuvo estable durante la mayor parte del año, con una fuerte caída en noviembre y una suba mensual de 15% en diciembre, acercándose a los valores generales de 2016.

Por su parte, la visión negativa sobre la dirección del país bajó 4,5% y revirtió la tendencia alcista que había llegado a su mayor pico anual en noviembre.