Nintendo anunció una nueva consola, la New Nintendo 2DS XL, que por su nombre ya define bien el producto, incluso si eso lo lleva a ser excesivamente largo.

Se trata de una versión que mezcla las mejoras introducidas en el modelo New Nintendo 3DS lanzado en 2014 con la propuesta más asequible de Nintendo 2DS.

Es una consola con unas pantallas enormes sin efecto 3D, la característica que vendría a diferenciar en un primer momento a la Nintendo 3DS de su predecesora, la exitosa Nintendo DS.

El nuevo equipo mantiene el formato abatible de dos pantallas, algo que no ocurría en Nintendo 2DS. De paso, también redujo el tamaño de la consola en su formato XL.

El diseño exterior también se cambió, alejándolo ligeramente de las líneas marcadas por las anteriores consolas: tiene botones de colores (azules sobre carcasa negra o naranjas sobre cuerpo blanco, dependiendo del modelo escogido) y una bisagra.

Se sumaron varios botones, los cuales ya estaban en los modelos New Nintendo 3DS, pero que no habían llegado al modelo 2DS. También tiene funciones NFC, para los muñecos amiibo de la compañía.

Se trata de un modelo que mezcla lo mejor de todos los modelos actuales de la portátil de Nintendo para hacer un modelo definitivo con un precio aproximado más bajo: 150 euros.

Dado que Nintendo Switch, la nueva consola híbrida de la compañía, ya está en el mercado, esta versión parece una forma de la compañía japonesa de despedirse de esta familia de dispositivos.