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El Ministerio de Trabajo quiere acordar un leve retoque del piso salarial, en línea con las paritarias cerradas hasta ahora. Pero varios rechazan la pauta
23/05/2017 - 17:04hs

El Gobierno y la CGT avanzaron en los últimos días en negociaciones para actualizar el salario mínimo con una suba moderada. La idea del Ministerio de Trabajo, a cargo de Jorge Triaca, es elevar el salario mínimo entre 20% y 25%, desde su valor actual de 8.060 pesos.

El Consejo del Salario, que se reuniría a mediados de junio, es el órgano encargado de definir el valor del piso salarial que rige para toda la economía, en particular para los trabajadores informales. De él participarn el Estado, las centrales obreras y los empresarios.

Salvo las dos CTA, que piden llevar el nuevo mínimo a $14.090, la CGT estaría dispuesta a negociar un incremento mucho menor, como ya ocurrió en los últimos años. De ese modo, las autoridades buscan evitar que la convocatoria le sume más presión a la discusión salarial.

Es que que muchos gremios no cerraron paritarias y algunos de ellos, como los de la industria y los docentes, rechazan la estrategia de "contención" salarial que apunta a sostener una pauta salarial acorde con las metas de inflación de entre el 17% y el 20% para el 2017.

Según los datos del Ministerio de Trabajo, ya hubo acuerdos en casi el 40% de los convenios, con un promedio de aumento del 20%, más una claúsula gatillo que permite hacer correcciones al alza de los sueldos si los precios superan lo acordado.

En la lista figuran cuatro "pesos pesados" que firmaron aumentos en línea con el esquema oficial: el mercantil Armando Cavalieri, el estatal de UPCN Andrés Rodríguez y el estacionero Carlos Acuña, quienes sellaron un 20% en hasta tres tramos; mientras que el albañil Gerardo Martínez lo hizo por un 21%.

Sin embargo, los últimos datos oficiales sobre los precios, con subas del 2,6% en abril, volvieron a poner en el ojo de la tormenta los planes del titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, para reducir la inflación, y renovaron la presión de los gremios por el deterioro del poder adquisitivo.

El Ministerio de Trabajo dictó el lunes una nueva conciliación obligatoria hasta el martes próximo, luego de una movilización de los metalúrgicos de la UOM por microcentro por el estancamiento de las paritarias. No fueron los únicos: el gremio de la alimentación también realizó una protesta similar.

Las negociaciones entre las cámaras privadas y la UOM volvieron a fracasar el lunes. En la reunión en la cartera laboral las empresas "ofrecieron un 20% de incremento más un dos por ciento que el gremio ya tenía, por lo cual no hubo acuerdo", indicaron fuentes gremiales.

Presionado por sus bases, el sindicato liderado por Antonio Caló, definió en su reciente congreso de Mar del Plata pedir una suba de 30%, y hasta hubo delegaciones que reclamaron ir por un 40% por la inflación y las pérdidas del año pasado. 

En las últimas horas trascendió que el metalúrgico aceptó reducir su expectativa a un 25%, pero tampoco fue suficiente. Por ello, anunció que una vez finalizada la conciliación, realizarán "la medida de fuerza prevista para este martes: "Media hora de trabajo y media hora de paro".

La industria fue sorprendida la semana pasada cuando los aceiteros cerraron la paritarias más alta del año con un aumento del 31,6% en un solo tramo, lejos de la pauta oficial, y elevaron el salario mínimo del sector de 19.000 a 25.000 pesos.

Por otra parte, los gremios aeronáuticos sacudieron este lunes el mapa de la actividad, con su reunificación para rechazar la política oficial en Aerolíneas y el desembarco de las "low cost". Se trata de un giro de 180 grados luego de la postura expectante que habían adoptado tras el descabezamiento de Isella Costantini en la línea de bandera. 

Ahora, los sindicatos amenazan con pasar a la ofensiva y acusaron al Ministerio de Transporte y a la ANAC de otorgar rutas "de manera poco clara a operadores de dudosa o ninguna capacidad operativa", según un documento que difundieron en las últimas horas.

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