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Lo que viene: el plan del Gobierno para que 7.500 empresas compren o generen energí­as renovables
22/06/2017 - 10:22hs

En pocos meses, se iniciará un cambio radical en el mercado energético argentino. 

Las grandes empresas, en el cortísimo plazo, deberán utilizar un 8% de energía sostenible

No es un deseo o un simple pedido de colaboración, más bien todo lo contrario: es una exigencia que surge de la ley 27.191, que comenzará a regir en 2018.

Por lo cual, aquellas compañías que tengan una demanda mayor a los 300 KW y no alcanzan dicho objetivo, se exponen a tener que pagar importantes multas.

La medida abarca, firmas de un muy amplio espectro de rubros: shoppings, supermercados, puertos, casinos, aeropuertos, talleres metalúrgicos y terminales automotrices, sólo por citar algunos ejemplos. 

Según cálculos oficiales, son más de 7.500 empresas las que estarán alcanzadas por la medida. 

En este contexto, iProfesional supo que el Ministerio de Energía está preparando una normativa que permitirá a grandes comercios e industrias comprar los recursos que generan los parques solares y eólicos.

De esta manera, estarán en condiciones de cumplir con la exigencia de tener un 8% de la demanda cubierta por fuentes limpias en 2018.

La apuesta del Gobierno en un año electoral es sacarle el jugo a los sectores que pueden ayudar a traccionar la economía. 

En este paquete de rubros preferidos” se encuentran -muy bien posicionadas- las energías renovables, gracias a que vienen de cosechar promesas de inversión por u$s4.000 millones. 

Esto, en un contexto en el que el nivel de actividad general sigue planchado y los dólaresproductivos” apenas sí amagan con asomar. 

¿Cómo se está creando este potente mercado en Argentina? Al igual que en otras plazas de la región, el mecanismo elegido hasta el momento es a través de licitaciones nacionales.

Es bajo esta modalidad que se logró el compromiso de firmas locales e internacionales para construir 59 emprendimientos de diferentes tecnologías: eólica, solar, biogás, biomasa y mini-hidroeléctricas.

Aprovechando este viento de cola, desde Casa Rosada ahora plantean redoblar la apuesta: crear un mercado entre privados que permita comprar o vender energía libremente, sin la intermediación del Estado

Cambio de paradigmaDe acuerdo con datos oficiales, las más de 7.500 las compañías de todo el país que tendrán que cumplir con esta “cuota verde” podrán optar entre tres caminos

Autoabastecerse con equipos de generación renovable propios, como podrían ser paneles solares o aerogeneradores.

Comprar el 8% de su demanda renovable bajo el esquema de compra conjunta directamente a la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico (CAMMESA).

Firmar contratos con parques administrados por privados, bajo condiciones económicas más favorables.

Sin dudas, esta tercera vía es la que prefiere Sebastián Kind, subsecretario del área, quién presentó en sociedad un borrador técnico que regularía la comercialización de energía renovable.

Lo hizo a modo de consulta, para que los actores involucrados aporten ideas y sugerencias. 

A través de una próxima resolución, el Gobierno especificará las condiciones de inversión para que los consumidores adquieran energía directamente a una planta renovable.

Para ponerlo en términos prácticos, una vez implementada, será posible que un parque eólico ubicado en la Patagonia suministre a una cadena de supermercados de Capital Federal, por ejemplo.

O que una planta solar fotovoltaica en Salta, Catamarca o Mendoza (dónde hay buen sol), ofrezca el servicio a una automotriz de Córdoba.

Este es el interés real por empujar un mercado que dinamizará la economía, al tiempo que se ayudará a reducir la emisión de gases de efecto invernadero. 

Los grandes van por su cuentaSegún observan los referentes del rubro, los consumidores de peso como petroleras, mineras y siderúrgicas, avanzarán en la construcción de sus propios proyectos para autoabastecimiento.

En esta dirección, se destacan las obras de YPF en el yacimiento petrolero “Manantiales Behr”, en Chubut, donde se instalarán en una primera etapa 15 aerogeneradores.

Lo está haciendo gracias a que consiguió u$s200 millones por parte del BID y un acuerdo de financiamiento con la Corporación Interamericana de Inversiones (CII).

También se pondrá en marcha el emprendimiento de Aluar, que consiste en un parque eólico conformado por 170 molinos, para el que se prevé el desembolso de u$s815 millones, en las cercanías de Puerto Madryn, Chubut.

Cuestión de precioSegún el borrador técnico que aún está en estudio de los empresarios, los grandes usuarios podrán firmar contratos con centrales de energía limpia.

¿Bajo qué condiciones? Este es el punto central que promete inversiones: el precio que pagarían es más bajo del que ofrece Cammesa en por lo menos 10 dólares por cada MWh.

Así lo refleja Juan Bosch, presidente de la comercializadora de energía SAESA.

“Los consumidores pueden negociar un valor más eficiente y asegurarse un plazo de entrega más cierto”, sostiene en diálogo con este medio.

Paulo Farina, ex Subsecretario de Energía Eléctrica hasta 2015, coincide con esto: "La resolución hace que para el usuario sea interesante avanzar en un contrato con privados", recalca.

El proyecto de resolución preliminar presentado por la cartera de Energía plantea un cargo extra de u$s8/MWh para adquirir el 8% reglamentario a través del mecanismo de compra conjunta que plantea Cammesa.

En definitiva, será conveniente gestionar con una granja eólica o solar.

“Es más del 10% del costo obtenido en los contratos de las licitaciones públicas, que en promedio es de u$s71/MWh”, precisó Farina.

En gran medida, comprar energía barata dependerá del costo de financiación que consigan los generadores para avanzar con la construcción de los proyectos.

Al igual que en otros rubros, el plazo es un factor fundamental.

En este sentido, Julia Carruthers, gerente de la Asociación de Grandes Usuarios de Energía Eléctrica (Agueera), señala ciertas dificultades para que se definan negociaciones de largo plazo.

“Si encontramos 50 empresas dispuestas a firmar contratos a 15 años va a ser un éxito”, expresó.

Agueera nuclea a 70 grupos empresarios que operan en el país. Algunos de ellos son: YPF, Acindar, Aeropuertos Argentina 2000, Aluar, Arcor, Bunge, Cencosud, Loma Negra, Mercedes Benz, Minera La Alumbrera y Siderar, entre muchos otros. 

El límite es la infraestructuraPara conseguir precios convenientes los proyectos deberán construirse en las zonas con mejores recursos.

El mejor viento se encuentra en Patagonia, en la provincia de Buenos Aires y en la región centro del país, con niveles de entre 9 y 12 metros por segundo.

La radiación solar, es excepcional en Jujuy, Salta, Catamarca, Tucumán, Mendoza, San Juan, San Luis y La Rioja.

Pero para poder evacuar la producción en estas regiones será necesario ampliar las líneas de transmisión eléctrica en alta tensión.

Hoy están saturadas, prácticamente sin capacidad para seguir sumando potencia.

Es ante este déficit estructural que, según confían fuentes del mercado, que Cammesa está aportando información sobre el estado del transporte.

En mayo, la compañía que administra el despacho finalizó un relevamiento en todo el país, que ya está en manos del Ministerio de Energía y Minería, que dirige Juan José Aranguren.

Según calculan los industriales, a través de nuevas licitaciones se construirán dos nuevos tendidos:

Una línea apunta a mejorar la conexión en la Costa Atlántica de la Provincia de Buenos Aires y Patagonia, para traer la energía eólica. 

Otra se propone aprovechar la energía solar fotovoltaica que pueden aportar las provincias del NOA.

El inconveniente es que las regiones con mejor potencial se ubican lejos de donde se concentra la demanda: Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.

“Para conseguir financiamiento es clave que el generador tenga la certeza de que la energía se va a poder inyectar al sistema”, explica Bosch.

Sumando las centrales térmicas y los 59 emprendimientos adjudicados en las subastas del programa de energías renovables, quedarían apenas 1.000 MW de potencia por conectar a la red nacional (SADI).

Actualmente, la infraestructura en alta tensión disponible es ínfima, apenas un tercio de lo que se adjudicó de energías limpias el año pasado.

“Si hubiera dudas sobre la capacidad de recibir esa energía, los bancos penalizarían el proyecto”, advierte Bosch respecto del acceso al financiamiento. 

Por eso es un aspecto que subraya como prioritario para revisar de cara a la publicación definitiva de la Resolución.

Expansión y nuevos negociosAdemás de avanzar con nuevas iniciativas, las "granjas verdes" que están instalándose podrían incorporar más equipos para ampliar las instalaciones.

Genneia, una de las firmas ganadoras de las subastas del Programa “RenovAr”, en diciembre tendrá todo listo para vender su producción de un parque eólico en Chubut.

La carta fuerte de la familia Brito dedicó exclusivamente 24 MW para trabajar con grandes consumidores.

Según los empresarios, con estos emprendimientos, las provincias podrán ir desarrollando proveedores y servicios.

El surgimiento de nuevos comercios abarcará una extensa lista: desde industrias asociadas hasta hoteles y restaurantes.

Con estos planes, el mercado laboral está dando sus primeros pasos, al ritmo de las obras de construcción de los proyectos.

Según los cálculos del Gobierno, la industria creará un total de 20.000 empleos, un número que claramente seduce al macrismo.