Samsung está cada vez más cerca de presentar su teléfono plegable, conocido como Galaxy X. El dispositivo ya obtuvo su certificación Bluetooth 4.2 y esta se sumó a la WiFi que ya había logrado hace unos meses.

Por esa razón se espera que próximamente el nuevo teléfono pueda ser presentado oficialmente en el mercado. Alcanzar estas certificaciones es una condición necesaria para señalar que ya está preparado para operar en diversas redes inalámbricas. La previsión es que comience a venderse antes de fin de año.

El Galaxy X sería el primer dispositivo que se puede doblar a la mitad para permitir cargar una pantalla más grande y sin afectar la portabilidad. Algunos aseguran que podrá doblarse del mismo modo en que lo hace una billetera, razón por la que el proyecto se conoció con el nombre de Project Valley.

Actualmente, la flexibilidad es el aspecto sobre el que trabajan diversas compañías para posicionarse en el mercado. Hace unas semanas, Lenovo presentó su Flip, una tablet capaz de doblarse por la mitad para convertirse en smartphone, capacidad que lograba a través de la ejecución de un sistema operativo Android.

Esa característica de flexibilidad será, en principio, exclusiva de algunos modelos de teléfonos. Información surgida desde Corea del Sur aseguró que sólo se fabricarán 100.000 unidades del Galaxy X que, a su vez, contará con una pantalla de 7 pulgadas.